THE SKELETON TWINS

DOS ALMAS PERDIDAS Y CONDENADAS (CÓMICAMENTE) A ENTENDERSE

A simple vista la película que hoy viernes llega a cartelera, puede parecer una comedia costumbrista de estas que de vez en cuando tienen algún golpe bueno, desatando tu risa o sonrisa precavida, pero que no deja de ser una comedia que planea sobre el drama, drama que bucea en la comedia y que al final ni te conmueve ni te divierte. Pues no, dejadme que os diga que The Skeleton Twins es un drama con tintes de comedia, de esos que no solo te entretienen escena tras escena, sino que una vez visto te insufla una dosis de ‘buenrollismo’ que ya quisieran para sí, muchos anuncios navideños de la ONCE. Dirigida por Craig Johnson, la cinta cuenta la historia de dos hermanos gemelos que distanciados y después de rehuir de la muerte en el mismo día, vuelven a unirse con el fin de dar un sentido a su vida, a su pasado y futuro. Una relación que no solo los llevará a descubrir lo intrínseco de una relación de hermanos, sino al interés por luchar por cambiar el destino al que parecen dirigidos. Kristen Wiig y Bill Hader hacen un perfecto retrato de esos gemelos unidos hasta en la desazón, que no dudan en dejar a un lado tantos años de separación para volver a reunirse en una auténtica terapia de pareja doméstica. Junto a ellos un divertido y sosegado Luke Wilson, como amante marido y tolerante pareja, pone el contrapunto de cordura en esta película de caóticos delirios por subsistir. Una película que va ganando en consistencia y trama según van avanzando los minutos de metraje y que esconde un secreto final, solapado gas tras gag. Una historia que nos hace creer la perfección de la vida de un hermano frente al otro, pero que no es otra cosa que una farsa salpicada de ironía y brillante en su planteamiento y composición. Perfecto retrato de personajes muy bien perfilado, gracias a un director que se preocupa en cada detalle, cada mirada y cada vuelta de hoja de un guion firmado por el propio Craig Johnson, junto a Mark Heyman, y que pese a resultar típico o incluso tópico, nos descubre una de las más divertidas historias fraternales de las últimas semanas. Pese a su tétrico nombre (tiene su justificación), The Skeleton Twins llega a nuestros cines como un canto esperanzador para todos aquellos que se autodestruyen continuamente y que piensan que la vida no tiene sentido, pese a querer luchar por ella. El resultado es una tragicomedia de tintes british, pese a ser americana, que recupera no solo la inocencia de las relaciones fraternales sino ese look ochentero de éxitos como el Nothing’s Gonna Stop Us Now de Starship, que se marcan en la película. Y es que es eso, pese a la intención derrotista primigenia de la película, según pasa el tiempo descubres con Milo y Maggie, los gemelos suicidas, que no hay tanto dolor como parece aflorar y que juntos pueden afrontar ese obstáculo y muchos más. ¿Esperanzadora en estos tiempos, verdad? Vayan a verla.

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