Es de las pocas listas negras en la que los diseñadores gráficos desean estar. The Design Blacklist es una selección, actualizada a diario, de trabajos gráficos internacionales que sorprenden por su eclepticismo e incluso por su feísmo. “Existe una fina línea que separa el feísmo intencionado de lo insulso. No nos equivoquemos: muy bueno has de ser para embarcarte en esta aventura. De ahí que el reto sea tan estimulante”, nos comenta Isabel Casilda Rincón de Arellano, valenciana de 27 años y creadora de la plataforma online The Design Blacklist
Imagen superior: Página web de The Design Blacklist
Imagen superior: Shortcuts – Publication (2018) diseño de James Richards
Algo de Background
Isabel Casilda Rincón: “Reconozco que mi formación es bastante particular: acabé el bachiller científico con la intención de dedicarme a la odontología. Sin embargo, en el momento de matricularme en la facultad, tuve el fortuito impulso de cambiar el orden de las licenciaturas a las que postulaba y elegí Bellas Artes en primera instancia. Cursé los primeros años en Valencia y terminé la carrera, especializándome en diseño gráfico, en la universidad de la Bauhaus en Weimar, Alemania. Actualmente soy colaboradora del estudio de diseño gráfico Gallén+Ibáñez.”
¿Cuándo creas The Design Blacklist?
The Design Blacklist nace hace un año como excusa para testar la acogida de ciertos lenguajes o proyectos de diseño que, por alguna razón, suscitaban mi interés. A día de hoy, siento que se ha convertido en una forma de apoyar a aquellos diseñadores que defienden un lenguaje nuevo y nada convencional.
En nuestra mano está definir qué es el buen diseño, apoyarlo y difundirlo a través de canales que no sean de uso exclusivo para diseñadores. Quisiera pensar que ésta es mi aportación a la profesión.
Imagen superior: Closer diseño de Matteo Vandelli
¿Por qué ese nombre?
Me encantan las contradicciones. Elegí ese nombre porque tiene una connotación negativa a la vez que suscita una atracción fatal: todo el mundo quiere aparecer en la lista negra.
¿Qué tipo de diseño encaja en The Design Blacklist?
Si echamos la vista atrás y revisamos las primeras publicaciones de la cuenta, se puede apreciar una evidente evolución formal en la elección de los trabajos. Aspiro a perpetuar esa evolución hacia lo inesperado. La respuesta es sencilla: sólo hay cabida para lo mejor.
Imagen superior: Isabel Casilda Rincón de Arellano, fundadora de The Design Blacklist
¿Cómo encuentras esos trabajos tan alucinantes?
De la misma forma que la gente se levanta y lee el periódico mientras desayuna, yo tengo la costumbre de peinar las redes todas las mañanas en busca de algo nuevo, algo distinto que no haya visto antes. El periódico prefiero leerlo al final del día. Me resulta mucho más estimulante empaparme de inspiración para empezar con ganas cada jornada.
¿los trabajos te los envían a ti directamente o también tienes que hacer una labor de búsqueda?
A día de hoy, recibo una barbaridad de correos electrónicos con proyectos interesantísimos de todo el mundo. Agradezco enormemente la implicación y el feedback que recibo tantos profesionales del diseño. A decir verdad, facilita mucho la tarea. Aún así, estoy siempre en constante búsqueda.
¿Cómo ves el mundo del diseño gráfico hoy en día?
Al igual que en el mundo del arte o de la moda, en el panorama actual del diseño gráfico conviven simultáneamente infinidad de tendencias. Al ser humano le encanta ponerle etiquetas a las cosas, acotarlas y definirlas. Una cultura o tendencia se define principalmente por las cosas que puedes o no hacer. Personalmente, no me interesan tanto las tendencias como el intento de saltarse esas reglas marcadas y abrir una puerta. Ese pequeño simulacro que precede la posible eclosión de una tendencia.
¿Crees que hay países que tienen más nivel que otros?
Sin lugar a dudas, hay países con un nivel medio de calidad superiores a otros y pienso que esa diferencia es debida a los modelos de educación. La formación que recibí durante mi estancia en Alemania, nada tiene que ver con la que tuve en España. Era mucho más práctica y estaba enfocada a la experimentación. Al alumno se le presupone autónomo y el bagaje que adquirirá depende de su implicación.
¿Qué opinas del feísmo en el diseño gráfico?
Existe una fina línea que separa el feísmo intencionado de lo insulso. No nos equivoquemos: muy bueno has de ser para embarcarte en esta aventura. De ahí que el reto sea tan estimulante.
Imagen superior: AW18 campaign Pihakapi un diseño de VLF
¿Hay mucho trabajo tipográfico en el nuevo diseño gráfico?
La tipografía sigue siendo un pilar fundamental. Diría que tiene una importancia superior a la imagen. Ahora mismo están surgiendo, de la mano de diseñadores freelance o pequeñas fundiciones tipográficas, una cantidad de tipografías de carácter experimental interesantísimas.
¿Qué está pasando con el color?
Pienso que más poner el foco de atención en las tendencias del color, deberíamos fijarnos en la forma en que se aplica. La tecnología es la que marca las posibilidades. Y me refiero tanto a programas informáticos como a técnicas de impresión.
¿Está muerto el minimalismo en el diseño gráfico actual?
Sí el minimalismo se convierte en el estándar básico de calidad, brindo sin duda por ello. Pero no lo encuentro en absoluto interesante.
Me da la impresión de que una gran mayoría de la sociedad ya tiene asumido que el diseño es un valor en el que se ha de invertir. Comprenden que una identidad consta de un logotipo, un color y una tipografía corporativa. Lo que no han comprendido es que esos elementos ya no son suficientes para diferenciarse en un mercado tan competitivo como el actual. Una identidad ha de tener un lenguaje mucho más amplio y complejo para resultar realmente interesante y para conectar con el público al que va dirigido.
Imagen superior: Página web de The Design Blacklist
¿Por qué hay un auge de las ediciones en papel cuando internet es tan práctico y barato?
La forma de consumir contenido está evolucionando hacía dos vías paralelas. El papel ha perdido la dimensión informativa que antes lideraba y ha adquirido un nuevo estatus de objeto fetiche. Pienso que existe una vinculación emocional hacia el objeto físico: no es lo mismo regalar un libro que un pdf. La forma de diseñar contenido virtual también es distinta a la de una publicación impresa. No es ni mejor, ni peor ni sustitutiva: es simplemente distinta.
Tienes mas de 20.000 seguidores en tu Instagram ¿no te da miedo que el señor Mark Zuckerberg cape la audiencia de cuentas importantes cómo la tuya en un futuro próximo? (Como ha hecho en Facebook)
No me preocupa en absoluto: tengo muy asumido que el cambio es la única constante. Nunca imaginé el mundo sin el mítico messenger y, sin embargo, dudo que alguien lo eche de menos. Siempre hay que dejar una puerta abierta para lo que esté por llegar.
¿Hay que ver mucho diseño gráfico para crear tendencias o es mejor estar aislado para no dejarte influir por lo que se está haciendo?
Uno ha de ver y leer todo lo que pueda y no únicamente lo relativo al diseño gráfico: el ojo hay que educarlo todos los días.
The Design Blacklist thedesignblacklist.com
