Cada verano desde 2013, se celebra en Valverde de la Vera una iniciativa de cooperación ciudadana. Una comunidad de personas transforma el aspecto del pueblo mediante la confección de parasoles con plástico reciclado.
La arquitecta Marina Fernández Ramos es la artífice de este proyecto que lleva por título Tejiendo la Calle. Se trata de una acción efímera que empodera a la mujer y reivindica las tradiciones rurales del pueblo extremeño. Además, se visibiliza una España vaciada en un acto de sinceridad afectiva y festiva que recibe a familiares y amigos durante el periodo estival. Esta iniciativa craftivista -ya que aúna reivindicación con lo hecho a mano- ha suscitado el interés y la implicación de vecinos y extraños: tras casi 10 años de ganchillos y croché, el proyecto ha dado el salto al papel gracias a Rua Ediciones.
La domesticidad de la España rural ha quedado siempre relegada al ámbito más privado de los hogares. Tradiciones relegadas a un segundo plano, sobretodo si hablamos de las situaciones y labores domésticas de las mujeres.
Con un virtuosismo prodigioso, se han confeccionado durante años, cientos de prendas que han vestido a pequeños y mayores. Hablamos de trabajos con un alto valor creativo que nada tienen que envidiar a los grandes de la industria textil y que hasta ahora han sido despreciados o invisibilizados.
Marina Fernández Ramos, originaria de Valverde de la Vera, supo ver el potencial oculto tras el conservadurismo rural y trasladó el ganchillo al ámbito público. Esta acción se convierte en un mecanismo de reivindicación y activación social. Como resultado, se interviene el espacio público transformándolo e implicando a todos los agentes del pueblo.
Pese a las reticencias iniciales, actualmente son más de 30 personas las que participan de manera activa en el proyecto. Se tejen piezas a mano, mediante la técnica del ganchillo, utilizando plástico reciclado. Con esta acción crean cientos de metros lineales de tela a modo de parasoles, que sirven para vestir los cielos del pueblo de colores y dar sombra durante los meses estivales.
La iniciativa de Marina Fernández Ramos ha sido recogida recientemente en un libro que publica Rua Ediciones. En él se recoge una aproximación personal del proyecto por parte de la arquitecta, que comparte páginas con testimonios de tejedoras y vecinos. Además, se incluyen fotografías del contexto realizadas por Manuel V. Fernández y Asier Rua.
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