Todavía estás a tiempo de ver en Madrid la versión teatral de Sueño De Una Noche De Verano de Darío Facal
Allá por el 1600 Shakespeare estrenó la que sería una de sus obras más conocidas (bueno, todas lo son, lo sabemos). El sueño de una noche de verano, se representaba sobre las tablas de The Globe y sin saberlo se convertiría en uno de los más grandes clásicos de la literatura. Shakespeare, en una época en la que no estaba permitido ni respirar, tocó y ridiculizó temas que nadie se había atrevido a tratar. Su comodín: esconderlo tras un halo de fantasía y comedia y llevarlo a un marco ya muy lejano en el tiempo como es la Atenas de la Grecia clásica. Temas tan actuales como la lucha de clases o el sexismo están en el texto original y quizá están más de actualidad que nunca. El reputado director Darío Facal ha cogido el reto de devolver a la vida esta obra inmortal y traerla a los tiempos que corren. Con un elenco de actores en estado de gracia y totalmente mimetizados con sus personajes, dos por actor en la mayoría de los casos, y una escenografía basada en elementos totalmente actuales como letreros electrónicos, telones de fondo que van cayendo según la escena, nos encontramos sin duda ante Sueño de una noche de verano 2.0. Facal ha conseguido darle otra vuelta más al argumento, haciendo hincapié en todos los tópicos sobre el clasismo y el sexismo que por desgracia siguen siendo temas de actualidad. Sueño de una noche de verano de la mano de Darío, vuelve a brillar una vez más, esta vez abriendo la puerta al futuro y demostrando que lo clásico en ocasiones es absolutamente moderno. Hablamos con él.
¿Cómo surgió la idea de adaptar de nuevo una obra tan archiconocida como esta? Cuando te enfrentas con un clásico la idea siempre está rondando ahí. Y hoy más que nunca parece pertinente y necesario volver a `Sueño de una noche de verano´ para recapacitar sobre el enfrentamiento de los sexos y para cuestionar el autoritarismo masculino. Shakespeare además consigue hacerlo con sentido del humor y poesía. Por otra parte era un reto ser capaz de reconciliar el humor con la experimentación escénica e intentar darle a la comedia la consideración que merece.
¿Supone un reto darle una vuelta de tuerca a una historia tan integrada en la cultura como es Sueño de una noche de verano? A veces las obras que mejor creemos conocer son las que deberíamos volver a leer para darnos cuenta de que hay cosas que estamos pasando por alto. Mi trabajo como director empieza siempre ahí e intento no decir nada sobre lo que no tenga una nueva lectura o una visión que aportar. Desconfío de cualquier forma de creación que esté sustentada en repetir lo que tradicionalmente se viene repitiendo. Crear y conservar me parecen conceptos contrapuestos.
Tras ver la obra uno de los aspectos que más sorprende sin duda es la puesta en escena, ¿de dónde nace la idea de utilizar recursos como los telones de fondo, el cartel electrónico o la taxidermia? La puesta en escena siempre surge de una forma orgánica durante el proceso de ensayos y las ideas aparecen en el trabajo con los actores Y en el trabajo con todos los que están junto a mí, mi ayudante de dirección y mano derecha Javier L. Patiño, Cristina Otero directora de producción, Álvaro Delgado jefe técnico de Metatarso y María De Prado, que es la escenógrafa, todos resultan imprescindibles en el proceso de concretar la puesta en escena. En cualquier caso el camino a seguir siempre parece abrirse a partir de una intuición o bien porque algo nos parece hermoso o expresivo o divertido.
Siempre en cada obra, el director queda enamorado de un personaje o de una interpretación en particular, para usted ¿cuál ha sido en esta ocasión? Teniendo en cuenta que tengo un elenco extraordinario e inmejorable, no me pidas que tome partido por nadie. Realmente me siento muy afortunado de haber compartido esta producción con unos actores maravillosos que interpretan algunos de los personajes más memorables de toda la obra de Shakespeare. Así que, aunque suene políticamente correcto, diré que estoy enamorado de cada uno de ellos por motivos diferentes.
Sueño de una noche de verano dirigida por Darío Facal se puede disfrutar en las Naves del Español de Matadero (Madrid) hasta el próximo 12 de junio
Darío Facal. Foto: Sergio Lardiez