DESCUBRIMOS EN LONDRES LA BARBERÍA Y EL BARBERO CON MÁS ROLLO DEL MUNDO, NEIL SCOTHON DE ROCKET BARBER SHOP
Tras vivir por medio mundo, este viajero barbudo de 32 años, y natural de Nottingham, recala finalmente en Londres donde en 2011 abre Rocket Barber Shop, probablemente la barbería con más rollo del planeta. Convertido en un icono de la nueva estética masculina, su imagen sigue recorriendo el mundo como protagonista de la campaña “My London” de Beefeater.
Nacida para proteger las mandíbulas de los hombres, a lo largo de la historia, la barba casi siempre se ha considerado un símbolo de virilidad, libertad, honor y sabiduría. Asociada al mundo del pensamiento y la creación, las barbas pueblan las caras de importantes nombres de la cultura de todos los tiempos: Aristóteles, Friedrich Engels, Johannes Brahms, Walter van Beirendonck… Y, sin duda, en las 2 primeras décadas del siglo 21 están viviendo sus años dorados. Un apogeo capilar que ha llevado no solo a recuperar la figura del barbero, sino a encumbrarla a categoría de gurú. Uno de los máximos exponentes de la profesión es Neil Scothon, un tío barbudo, tatuado y con tupé, copropietario junto a Stephen Murphy de Rocket Barber Shop, la barbería con más rollo de todo Londres: un local años 50 especializado en tupés y barbas inspiradas en tiempos pretéritos del rock and roll, de hecho toma parte de su nombre de una canción de Ike Turner, Rocket 88. Pero, como dice Neil, “para ser barbero en Londres hay que ser bueno”, no basta con decorar tu barbería con un coche Morris Minor auténtico. Neil empezó a aprender el oficio a los 14 años en su ciudad natal, Nottingham. Y desde hace 10 años lleva ejerciendo la profesión por medio mundo: Tailandia, Australia… fue precisamente en Melbourne donde conoció a su socio actual mientras ambos compartían experiencias, tijeras y maquinillas. Al volver a Londres decidieron abrir su propio negocio en uno de los barrios más creativos de la ciudad: Hackney. “Elegimos Londres por la diversidad. La idea era algo disparatada y sabíamos que aquí tendría una buena acogida porque la gente es receptiva a lo que sea un poco diferente”. Y de hecho, el éxito ha sido tal que, Neil y Stephen, han llegado a abrir un segundo espacio en el barrio de Stoke Newington, al norte de Londres. No es de extrañar que Neil se haya enamorado de Londres. “Durante los 10 últimos años he vivido y trabajado en muchos lugares del mundo. Siempre pensé que nada podría sorprenderme ni superar mi imaginación -comenta-. Desde que me mudé a Londres, ya no siento que estoy constantemente en busca de algo. He logrado abrir un negocio próspero que no habría sido posible sin esa actitud progresista de Londres que me sirve de empuje. Londres es una ciudad que nunca me aburre. Hay tanto que ver y hacer, y cuando crees que ya lo has visto todo, surgen cosas nuevas otra vez. Es imposible cansarse de ver espectáculos, galerías de arte o música en vivo”. A alguien que vive tan intensamente Londres no podemos dejar de preguntarle por sus lugares preferidos (dale al scroll y sigue leyendo)
<rocketbarbershop.co.uk> <www.beefeatergin.com>
Bares: Ni favorito es el Ain’t Nothin But, en el Soho, aquí todas las noches toca algún grupo de blues. En general me encantan los pubs tradicionales y la coctelerías, aunque siempre hay algo nuevo por descubrir. Y si pido mis bebidas preferidas, el Old Fashioned y el Tom Collins, sé que quien los prepare lo hará con mimo porque se enorgullece de lo que hace”.
Cafeterías: “Las mejores, sin duda, son las del este de Londres. En cualquier esquina te puedes tomar un estupendo café flat white”.
London Bridge: “Cada vez que miro el Puente de Londres, desde cualquier ángulo, me acuerdo de donde estoy y de lo feliz que me hace estar aquí. La Torre de Londres también me encanta”. Earl Court: “No es que sea un friki de los trenes, pero me fascinan las estaciones porque todas son diferentes. Si te fijas, en cada una hay un montón de detalles distintos. En la de Earls Court no ha cambiado nada. Todo es original”.
Brick Lane: “Los puestos callejeros de comida que ponen los domingos son mi sitio favorito para comer. Es muy variado, hay desde quesadillas hasta sushi”. Arte: “Me gusta ir a ver las obras de arte clásico en la National Portrait Gallery, pero también las de arte moderno en las galerías independientes del este de Londres, como la estupenda Nelly Duff y las que hay en Vyner Street. En Londres también hay algunos artistas callejeros con un talento increíble, mi favorito es Sweet Toof”. Pero sin duda lo que más le gusta de Londres es la diversidad de etnias y culturas, “me hace sentir que puedo expresarme con libertad, con la seguridad de que siempre habrá gente que comparta mis gustos”. Es la libertad de las barbas.