¿QUÉ HAY MEJOR QUE BRUNCHEAR EN 'EL VIAJERO'?

EL LOCAL MÁS CASTIZO DE LA LATINA VUELVE A DAR QUE HABLAR

En el número 11 de la madrileña Plaza de la Cebada abría sus puertas en 1995 ‘El Viajero’, un local que llamaba a lo más bohemio y vanguardista de la ciudad y que en muy poco tiempo se convirtió en todo un clásico del barrio de La Latina. Jornadas de desayunos, aperitivos, sobremesas y copas de madrugada se sucedían de manera incesante, entre un ir y venir de lo más movido y creativo que buscaban ese lugar de reunión más distendido y cool. Ya son 19 años los que han pasado desde entonces, tiempo en el cual han sobrevivido a aquella tienda de semillas donde tu madre compraba, a la espartería que arreglaba aquel calzado que te fallaba a cada zancada o incluso a la corchería que tantas botellas de buen vino cerraron, pero que no supieron (pudieron) aguantar las transformaciones de un enclave que repleto de bares, tascas y tabernas se adaptaba, con muchas ganas, al devenir de las estaciones. Quizá, durante este verano, te habrás preguntado por qué al pasarte por El Viajero, éste permanecía cerrado. Pues bien, fieles a su espíritu de ofrecer el mejor de los servicios en un local mítico que rechazaba perder su esencia pero apostando por la frescura y la innovación, el local reinventa su concepto con la única intención de devolver al barrio lo que el barrio les ha ofrecido durante tantos años. Una actitud que dirigida por la hija de los propietarios, Sara Aznar, le ha llevado a darle la vuelta al tema espacio y así convertir la parte a pie de calle en el mejor lugar donde degustar sus ricas mini hamburguesas o sus crujientes de pollo con miel y mostaza y esa parrilla uruguaya con ese churrasco o secreto ibérico, que tan babeantes nos han dejado durante años. La segunda planta se reestructura como zona de coworking durante las mañanas y tardes de postres y cafés. Llegada la noche el local se reconvierte en uno de los focos gourmet e incluso de marcha de la zona, entre cenas, copas, cócteles y botellines de Mahou a gogó, poniendo especial hincapié en su divertida azotea con vistas, donde comenzar  tus mejores juergas por Madrid. ¿Te convence? Pues espera a probar, además, sus brunch de fin de semana con un menú apto para todos los públicos y que con su parfait de yogurt de cabra con galleta de jengibre y muesli orgánico o en su guacamole, hummus y morcilla de berenjena casera con selección de pan y crudités, obtengas la excusa perfecta para repetir, repetir y repetir, cumpliendo otros 19 años en esta ya mítica ‘gastro-meca’ madrileña.

Plza. de la Cebada, 11. Madrid. T. 913 66 90 64

¿QUÉ HAY MEJOR QUE BRUNCHEAR EN 'EL VIAJERO'?

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