Tenemos un nuevo capítulo de la polémica de Balenciaga… ¿puede esto ser lo último que oigamos del tema para pasar cosas más importantes?
La polémica de Balenciaga fue un asunto; y uno de los gordos. Dos campañas en simultáneo causaron un revuelo (justificado) en redes, la posible cancelación de la marca y el pensamiento colectivo del fin de Demna fue con lo que despedimos el año pasado. Ahora, Balenciaga anuncia nuevas medidas de corrección y el diseñador cuenta su versión con lujo de detalles en una entrevista para Vogue.
Anuncio de la colaboración de Balenciaga con la NCA.
Campaña Gift Shop de Balenciaga.
Un poco de contexto sobre el asunto de Balenciaga
El pasado mes de noviembre fue cuando reventó esta polémica de Balenciaga. ¿Qué la causó? Con motivo de la campaña de regalos y accesorios de la firma se presentó una campaña que incluía una infinidad de artículos de toda índole puestos en escena a manera de vitrina; ¿El problema? Los protagonistas de esta campaña eran niños que sujetaban bolsos en forma de osos de peluche con indumentaria BDSM y muchos de los accesorios no eran kid friendly (como copas de vino, entre otras cosas). No fue del todo bien recibida; pero la crisis no había comenzado.
Una semana después, se estrenó otra campaña para Spring 2023. La colección, inspirada y presentada en la Bolsa de Nueva York, también incluía la colabo con adidas y fue fotografiada en una oficina de la misma ciudad. La cosa que reventó la polémica de Balenciaga es que se habían “colado” ciertas piezas del atrezo que referenciaban a casos de abuso infantil: sentencias de tribunales y un título universitario con el nombre de un convicto pederasta. Y claro, la gente se puso a atar cabos y revienta el asunto.
Como respuesta a tal percal, Balenciaga decide tomar cartas sobre el asunto. Lo primero que hicieron fue disculparse y lavarse las manos diciendo que el responsable de todo aquello fue el fotógrafo y la compañía de producción; incluso los llegaron a demandar por veinticinco millones de dólares (demanda que retirarían posteriormente). Luego, internamente, iba a ser insuficiente.
Primeras declaraciones de la marca tras la polémica.
Las nuevas medidas en la polémica de Balenciaga
Claro que se hicieron esfuerzos para minimizar daños; pero era demasiado tarde. Se comenzó a hablar de la cancelación de la firma, del fin de la era Demna y claro; el internet se plagó de teorías conspirativas sobre Balenciaga y el grupo Kering. Ahora, Balenciaga ha anunciado nuevas medidas para tratar de solventar esta polémica.
El grupo Kering, al que pertenece Balenciaga, anuncia en su perfil de Instagram donaciones por el terremoto de Turquía y Siria
Junto con la Fundación Kering, la marca ha anunciado un acuerdo colaborativo de tres años con la National Children’s Alliance (NCA); una ONG destinada a la protección de los niños que recientemente ha abierto un instituto de salud mental. Esta colaboración de Balenciaga con la NCA pretende ayudar a niños a superar traumas causados por el abuso y educar a la marca sobre el asunto.
La entrevista de Demna con Vogue
El siguiente capítulo de la polémica de Balenciaga no vino solo con estas nuevas medidas, que al público le pareció como muy poco y muy tarde. Demna decidió dar una entrevista a la revista Vogue, con lujo de detalles, sobre su versión de los acontecimientos. El diseñador asume su culpa con total responsabilidad y pide disculpas por el daño ocasionado. Pero aclara, varias veces, que los bolsos en forma de oso no tenían inspiración BDSM, sino que referenciaban a la estética punk y al DIY.
El BDSM no era algo nuevo para el lenguaje de Balenciaga. Looks de la colección Spring 2023.
Otro nombre que se menciona en la entrevista es el de Cédric Charbit, CEO de Balenciaga. Que en un comentario incluido en la entrevista asume también la responsabilidad la polémica con Balenciaga diciendo que “la tarea del director creativo supervisar el aspecto creativo. Pero yo tomo las decisiones del negocio, tengo la decisión final y toda la responsabilidad”. Además, también enfatizó en las medias que la firma estaba tomando para enmendar su error.
