Observatorio Festival 2020, buena música rodeada de naturaleza, en Balboa, un pueblo de León con castillo y todo. Agenda el 26 y 27 de junio.
Si te mola el rollo de unificar naturaleza, lugares extraños, poco manidos o poco visto en fotos y un musicón, entonces, no te puedes perder la nueva edición del festival Observatorio Festival los próximos 26 y 27 de junio en Balboa (León). Hemos hablado con Javier Bornstein, del equipo de Observatorio Festival 2020, para conocer más detalles.
Cartel de Observatorio Festival 2020
¿Cómo nació Observatorio Festival? Pues nació como lo hacen la gran mayoría de proyectos: entre unas cervezas con unos amigos. Todos nosotros somos apasionados de la música y llevamos años yendo a festivales, tocando en bandas, pinchando en bares, organizando fiestas… y al final de manera casi orgánica subimos al siguiente nivel. Además entre nosotros también hay arquitectos, diseñadores, gente que hace cerveza, etc. La idea inicial era poner todas nuestras habilidades en común para organizar una fiesta en la naturaleza en la que tocasen y pinchasen grupos amigos. Nos propusimos buscar un lugar bonito en el que instalar la Membrane House, una estructura diseñada por nuestros amigos del colectivo de arquitectos LHRC, y usarla como cabina de dj. Una cosa llevó a la otra y al final acabamos dando con Balboa, un lugar increíble que no habríamos imaginado ni en nuestros mejores sueños. Y qué además nos ha acogido con los brazos abiertos. No podemos estar más agradecidos.
¿Por qué el nombre Observatorio Festival? Los observatorios son lugares que suelen estar alejados de la ciudad, con poca contaminación lumínica, para poder explorar el cielo en toda su profundidad. Uno de los objetivos de Observatorio es ser un lugar en el que evadirse de la ciudad, sumergirse en la naturaleza, deshacerse de distracciones superfluas, y simplemente dedicarse a contemplar todo lo que el festival tiene que ofrecer. Aspiramos a ser una plataforma desde la que conocer algunas de las propuestas más interesantes de la música emergente nacional, pero el festival no se limita solo a la música: arte, naturaleza, cultura, gastronomía… forman también parte de la experiencia Observatorio.
Observatorio Festival es un festival nuevo, emergente, ¿qué línea queréis marcar o qué tiene de diferente o especial este festival? En un contexto de burbuja festivalera, creemos de corazón que son muchas las cosas que hacen especial a Observatorio. En primer lugar, el entorno en que se realiza: Balboa es un lugar mágico, un pequeño pueblo rodeado de montañas y bosques, con una arquitectura tradicional de lo más original. No exageramos al decir que el escenario principal, tallado en madera y roca, en lo alto de una colina con vistas a todo el valle y a los pies de un castillo medieval, es uno de los más bellos de España. Por otro lado, somos un festival verdaderamente íntimo, en el que artistas, público y habitantes del pueblo conviven durante un fin de semana, dando lugar a intercambios y momentos difíciles de olvidar. Sin colas ni aglomeraciones ni precios desorbitados, Observatorio es casi más una experiencia que un festival, y así nos lo han hecho saber los asistentes de las dos primeras ediciones.
¿Qué tiene que tener un artista Observatorio Festival? Musicalmente, cubrimos un espectro bastante amplio: desde el indie a la electrónica pasando por el pop y el folk. Este año además hemos incluido una representación importante de la escena urbana. La idea es ofrecer un muestrario de lo que está pasando ahora mismo en la escena musical independiente nacional, que goza de una salud envidiable. Hay bandas y artistas haciendo cosas interesantísimas en este momento y nos gustaría dárselas a conocer a nuestro público. Preferimos grupos que están empezando, porque somos conscientes que a menudo no lo tienen fácil para tocar en el escenario principal de festivales a horas decentes. Creemos que ofreciéndoles esta posibilidad y además compartir cartel con otros proyectos más consagrados, ayudamos a promover la música emergente del momento.
¿Veis la escena de los festivales underground nacionales participativos o algo más competitivo? Para nosotros ha sido una grata sorpresa descubrir que hay un montón de festivales pequeños con una filosofía muy parecida a la nuestra y que están dispuestos a ayudar y a colaborar. Algunos ejemplos son el Prestoso Fest en Asturias, o el Esmorga Fest en Galicia, festivales que no conocíamos antes de meternos en esto y con los que hemos entablando buena relación. Al final la sensación es que estamos metidos en el mismo barco, ofrecer una alternativa a los grandes macro festivales que cada vez parecen saturar más al personal. En ese sentido nos parece muy bonito que entre los festivales independientes de tamaño pequeño haya más colaboración que competitividad.
¿Cómo cambiarías el formato de festival actual? Es difícil de decir porque, para que negarlo, nosotros también hemos ido al Sónar o al Primavera y nos lo hemos pasado como enanos. Son experiencias distintas que te aportan muchas cosas a otro nivel. A mí lo que más me duele es entrar en un festival y ver marcas por todos lados desde que entro hasta que salgo. Pero entiendo que un festival de ese calibre necesita esos apoyos para salir adelante. Una vez que pasas la linea de proyecto artístico a negocio es difícil dar marcha atrás. Para nosotros lo importante al final es dar un trato humano a los asistentes y hacerles sentir como una parte más del festival y no un simple consumidor.
¿Cuál sería vuestro cartel ideal? ¡El de este año! Bromas aparte, hacemos el cartel con muchísimo mimo, y estamos muy contentos de como ha quedado. Lo mismo en los años anteriores. Evidentemente al ser un festival pequeño tenemos nuestras limitaciones y no podemos traer a todos los artistas que quisiéramos. Pero para nosotros tener a Sen Senra, Parrots, o Vera Fauna tocando en el auditorio natural de Balboa es mucho más de lo que habríamos soñado hace un par de años.
Vuestra BSO actual. Esta semana estoy en repeat con el último tema de Chico Blanco, ‘El cole no es para siempre’. Me ha dejado muy sorprendido con el giro que ha pegado respecto a sus anteriores canciones y la sensibilidad y sensualidad que destila por los cuatro costados. Hay muchísimas ganas de verle tocar en Observatorio este año!
Planes para 2020. Este año nos estamos tomando la sostenibilidad mucho más en serio que en años anterior. Somos conscientes de que Observatorio Festival tiene lugar en un entorno natural de gran valor y es por ello que debemos aspirar a minimizar todo lo posible nuestro impacto. Por ello tenemos a una persona dentro de la organización trabajando únicamente en estos temas, y estamos valorando, entre otras posibilidades, instalar un punto de compostaje para los restos orgánicos del festival, de tal manera que ese recurso quede ya instalado en Balboa más allá del festival. Por otro lado, estamos trabajando mucho más nuestra relación con Balboa y sus habitantes. No queremos ser un festival que llega un fin de semana y no vuelve a pasar por ahí el resto del año. Para ello estamos desarrollando un programa de residencias artísticas que van a investigar sobre la memoria del territorio de Balboa, sus costumbres, usos, valores, etc. Los resultados de las residencias serán expuestos durante el festival y serán recopilados en una publicación escrita que esperamos gustará mucho a los habitantes de Balboa.
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