El nuevo reloj de Omega y Swatch rinde homenaje a la calificación de vuelo que la NASA otorgó al Speedmaster original en 1965.
El nuevo MoonSwatch 1965 toma inspiración del año en el que el Omega Speedmaster pasó todas las pruebas de la NASA para ser el reloj oficial de su misión a la luna. Y viene cargado con detalles muy especiales que narran esta historia de éxito y excelencia (y un dial blanco de espectáculo).
¿Cómo un reloj llega a la luna?
Todos sabemos que el Omega Speedmaster original fue el reloj que acompañó a los tripulantes de la misión Apolo 13; pero, ¿sabemos por qué? Pues todo remonta a las fases preparativas de la misión, cuando la NASA publicó la licitación oficial para un reloj de serie que fuese preciso, confiable, además de fácil de leer y utilizar. A parte del Speedy, se presentaron modelos de Longines y Rolex. Pero, como os podréis haber dado cuenta, solo el modelo de Omega logró pasar todas las pruebas. Y es por eso que el 1 de marzo de 1965, la NASA calificó como apto este icónico cronógrafo e hicieron historia.
Es curioso imaginar la posibilidad de que un Rolex pudiese ser el Moonwatch, ¿no? Lo sabemos. Pero la historia fue diferente, y el Speedmaster (REF. ST105.003 de 1964) fue el que se convirtió en un icono del viaje espacial. Con los años, el modelo se ha ido actualizando y mejorando hasta convertirse en lo que conocemos hoy, con su variante de Bioceramic de la mano de Swatch.
Ahora, este nuevo lanzamiento colaborativo (y no limitado, gracias a Dios), toma inspiración de este hito con un nuevo colorway, que se carga de detalles conmemorativos a la calificación de vuelo. ¿Viene con una nueva complicación? No; pero no hace falta cuando tiene un look tan elegante y clásico como este.
Para los frikis de la historia relojera: el nuevo MoonSwatch 1965 de Omega y Swatch
En cuanto a especificaciones y prestaciones, el nuevo MoonSwatch 1965 rescata la fórmula original de complicaciones y mecanismos; todos los cambios son estéticos. En el exterior, nos encontramos la clásica caja Speedy de 42mm rematada en Bioceramic gris pálido. Dentro, tenemos un mecanismo de cuarzo ultra preciso con función de cronógrafo.
Lo especial del MoonSwatch 1965 lo encontramos en sus looks. Comenzando por la esfera, tenemos un dial blanco inspirado en el Speedmaster Professional que salió el año pasado. Y las subesferas del crono también tienen algo muy especial. El contador de horas llega solo hasta la 19; y el minutero llega hasta los 65 minutos, para sumar el año de la certificación. Aparte, estos números se recubren de Super LumiNova azul, a contraste del verde de los demás indicadores.
Y como un reloj Omega X Swatch no está completo sin su correa típica, el MoonSwatch 1965 también viene con una. Esta, a juego con la caja, se remata en gris pálido y viene con todos los detalles de branding colaborativo que hemos visto antes.
