Si hay una propiedad fundamental y secular para el hombre, es de hecho la del hábitat. Espacio de protección e intimidad, este lugar de la vida se puede definir con una amplia gama de variaciones. El artista palestino Mohamed Abusal destaca en sus numerosos proyectos todos los problemas contemporáneos de su vida actual. Visionario y humorístico, compone y controla con precisión cada proyecto realizado con material local.
Mohamed Abusal se centra en la crisis en la Franja de Gaza. Maneja las crisis de manera visual y las presenta para realizar soluciones comparativas, atrayendo la atención. Los proyectos de Mohamed Abusal son esperanzadores y devuelven un confort virtual y físico después de las imágenes de los restos de casas destruidas durante los combates. Transforma cada residuo en muebles que ofrecen comodidad y durabilidad, como en su proyecto titulado “PainFortable”. De manera inteligente e interactiva, secuestra objetos en el lujoso “Louis Vuitton Tent” o “The Precious 20 cm Stone” incrustado con piedras preciosas. Muebles y objetos ritualizan actitudes. Lamentablemente, Mohamed Abusal destaca el hecho de que el hábitat sigue siendo un bien, ante el cual los hombres son desiguales.
Los sueños de Mohamed Abusal son el producto de un estado momentáneo, onírico y visionario, provocado por su presencia en el mismo lugar. Hay una dimensión íntima entre el artista y su hábitat, que es la forma en que el espacio no solo está ocupado y dispuesto, sino que se invierte. Su arte está comprometido para enfrentar al público a las condiciones vividas en el territorio palestino. Mohamed Abusal a nivel conceptual, trata de romper las condiciones introduciendo el arte. En uno de sus proyectos, Mohamed también apunta a traer nuevos elementos artísticos universales a Gaza para enriquecer la cultura palestina. Soñaba con un metro en la Franja de Gaza, un territorio palestino superpoblado que se enfrenta a una situación caótica de transporte. Después de haber probado el transporte público en París, al encontrar Gaza y el caos de su circulación, quería un medio de transporte revolucionario para los 1,6 millones de habitantes de Gaza: un metro. Artista y no contratista de obras públicas, simplemente imaginó y dibujó el plan y sus 7 líneas, luego, atravesando Gaza con un letrero remendado (una “M” luminosa) simbolizando la boca de entrada de su metro, tomó fotos en la ubicación exacta de las estaciones fantaseadas en su mapa, dando “vida” a su transporte público.
Mohamed Abusal toca la universalidad de la condición humana. La especificidad de su condición de anclas palestinas en lo que Michel Foucault llama una práctica de libertad, determinada por la anomalía de la situación. Desarrolla proyectos casi autárquicos, relacionados con las condiciones de vida marcadas por la falta de libertad, la precariedad económica y los trastornos políticos. Por lo tanto, su evolución artística es por reinvención en una preocupación constante por la supervivencia, la afirmación de la libertad y la resistencia. Nos resistimos a la invasión de ejércitos, no nos resistimos a la invasión de ideas “. (Victor Hugo)
