La combinación ideal entre una moto y un coche. Este automóvil, perfecto para la ciudad, es una idea revolucionaria, sostenible… y fácil de aparcar.
En 2015, un nuevo coche revolucionó el sector del automóvil. Se trataba del primer prototipo de Microlino, un vehículo burbuja 100% eléctrico que daba un giro a la movilidad urbana. Su renovado diseño, que alcanza los 90 km/h, tiene tres tipos de batería. Además de poder cargarlo en cualquier parte, este coche también supone un aliciente para la sostenibilidad.
Cómo nació Microlino
Wim Ouboter creó en 1996 un scooter de dos ruedas plegable y que cabía en una mochila. No sabía que aquel sería el germen de Microlino, que nació en 2015 con la idea de mejorar la movilidad urbana.
El creador de Microlino, Win Ouboter (arriba), con sus hijos, Oliver y Merlin
La creación de este vehículo, inspirado en los coches burbuja de los 50, como el famoso BMW Isetta, tiene firmes argumentos: según la empresa, los coches llevan de promedio 1,2 personas y recorren distancias de solo 30 km. Hoy en día, Wim y sus hijos, Oliver y Merlin, trabajan a diario para mejorar este proyecto con base en el respeto al medio ambiente.
Un coche en busca de la sostenibilidad
Aunque la idea nació en Suiza, es en Turín (Italia) donde se hace realidad el Microlino. Un total de 20 vehículos se fabrican a diario y a mano en Turín, en una línea de montaje que funciona con energía solar. Asimismo, el compromiso con la sostenibilidad es uno de los grandes valores de la compañía.
El uso de materiales reciclados y la reducción de residuos y el consumo de energía son fundamentales. Esto se traduce en un 50% menos de piezas que un coche normal, siendo un 80% de ellas fabricadas en Europa. En total, se gasta un 65% menos de energía que en la producción habitual de un vehículo que, además, es cero emisiones.
Microlino, perfecto para la ciudad
El pequeño tamaño del Microlino, con 2,51 m de largo, 1,47 m de ancho y 1,5 m de alto hacen que quepa en cualquier parte. Tanto es así que ocupa solo la tercera parte de un coche convencional. Como puede aparcarse en batería, su única puerta delantera, que se abre con un botón, es perfecta para bajarse directamente a la acera. El espacio está pensado para dos personas, con capacidad extra de 230 litros para lo que se necesite.
Que el peso de apenas 500 kg de Microlino no engañe: su estructura integral de acero prensado y aluminio aumenta su rigidez y seguridad. Además, el eje trasero es más ancho en el nuevo modelo y su suspensión independiente es perfecta para las curvas. Otro dato es que no pasa de los 90 km/h, así que el riesgo de accidente se reduce aún más. Por último, sus barras de luz LED delanteras y traseras lo hacen perfectamente visible en la oscuridad, como cualquier otro vehículo.
Cargar el coche como un móvil
Uno de los puntos flacos que más destacan los detractores del coche eléctrico es el tiempo y la dificultad de carga. Sin embargo, Microlino tiene una ventaja: puede enchufarse como si fuera un smartphone a cualquier toma de corriente. Además, en el supuesto de que la batería esté a 0, se llenaría en tan solo cuatro horas. Es más: en las estaciones de carga eléctrica estaría listo en tan solo una hora. Sus tres tipos de batería pueden alcanzar los 93, 117 y 228 km de autonomía. Como está pensado para trayectos urbanos, difícilmente se gastará en un solo día el total de su carga.
Acabados de Microlino y precio
Este pequeño coche viene en dos versiones: el Dolce y el Competizione. El primero tiene un toque retro, y está disponible en seis colores diferentes: rojo, azul, verde, naranja, blanco y rojo con techo blanco. El Competizione es la edición más moderna, con cuatro elecciones diferentes en colores mate oscuros.
Ambos gozan de techo solar plegable, volante de piel vegana, modo deportivo, dos pantallas y calefacción. El Microlino Dolce tiene un coste de mercado de 22.900 euros y el Microlino Competizione tiene un precio de 23.560 euros.
Microlino más cerca con Astara
Astara es la empresa que se encarga de distribuir Microlino en España y Alemania. La compañía ofrece adquirir este coche en propiedad a través de la web, pero también en forma de suscripción. En este caso, el precio parte de los 430 euros al mes con seguro, mantenimiento e impuestos incluidos. La incorporación de los nuevos Microlino a la flota de carsharing de Astara en Madrid acerca así la sostenibilidad a la movilidad urbana de la capital española.
6 de junio de 2024 a las 17:05
Os leo desde Madrid. Lo que más me gusta de este modelo es lo ergonómico que es para hacer deporte por la mañana y el color beige, más alejado de la tecnología.