Entrevistamos al co-fundador de Magnane Studio Benoit Challand por “Queen Symphony”, un proyecto creado para revolucionar la moda tal y como la conocemos
Sonará cursi, pero no puedo evitar suspirar cuando pienso en la moda y sus infinitas posibilidades. Aunque mucha gente no se pare a pensarlo, la moda es algo tremendamente personal. En la vida de cada uno ocupa un lugar diferente. Quizás es simplemente ropa que llevar a diario, una profesión, algo que estorba en tu habitación o que se come gran parte de tu sueldo. ¿Frivolidad o pasión? ¿Una industria del pasado o un negocio millonario?
La moda y su esencia cambian según los ojos de quien la mire, es cierto, pero tampoco se libra del paso del tiempo, de la evolución social a la que se enfrenta una era. En la actualidad vivimos una metamorfosis, a veces palpable y otras invisible, que solo se manifiesta una vez el cambio se ha instalado en nuestras vidas. El universo digital siempre ha despertado opiniones encontradas, tan progresistas como conservadoras. Pero al igual que la fuerza de las olas, ha ido empujando hacia la costa y devorando la arena.
La prueba la podemos encontrar en la fascinación despertada por el último proyecto de Magnane Studio, quienes han elaborado a través de la tecnología 3D una serie de prendas únicas que destilan carisma por los cuatro costados. Bautizado como “Queen Symphony”, este proyecto convierte la moda en un canal con el que desafiar a los sentidos, cuestionándonos si lo que se plasma en las imágenes es pura ficción o simplemente el futuro. Pues, como he dicho antes, la moda depende de los ojos de quien la mire.
Magnane Studio
Entrevista: Juan Martí (@sswango)
Production : Magnane Studio (@magnane.studio)
Creative Direction : Benoit Challand (@benoitchalland)
Artistas 3D : Alban Contrepois (@albacore__), Diego Conte (@conte_graphics) y Benoit Challand
Retoque creativo: Monsieur Ney (@monsieurney)
Fotógrafo : Etienne Ruggeri (@etienneruggeri)
Localización : @studiolecarre
Modelos : Anouk Challand, Pascale Kay y Laura Tonlaveur
Peluquería : Ethikk
Me gustaría empezar hablando del principio. Cuéntame, ¿de dónde surge la idea de crear Magnane Studio? La idea de crear Magnane surgió gracias a la voluntad de Benoit Challand y Jean Frédéric Passot de empezar un estudio dedicado al 3D. Consiste en una mezcla de nosotros dos. Por un lado, yo, Benoit Challand, quien después de 10 años como artista 3D freelance vio como la demanda de proyectos cada vez más grandes hacían necesario el construir un equipo más sólido y regular. La otra mitad es Jean Frederic, quien dirige una agencia digital de 25 personas para las que el 3D ha empezado a tener mucha importancia en sus tareas diarias. El deseo de crear Magnane fue el de estructurar una oferta en torno al 3D y proponerlo para crear proyectos notables y a gran escala. La aventura de Magnane se inició a mediados de 2021 y realmente nació a principios de diciembre. Es cierto que este tipo de acontecimiento es estresante pero también está plagado de esa energía típica que se percibe al dar a luz a algo nuevo y se debe a poner toda nuestra ambición y nuestras ganas de evolucionar en ello
¿Por qué esta aventura virtual se llamó Magnane Studio? El nombre de Studio Magnane se llama así porque mi pareja y yo crecimos en un lugar relacionado con la sericultura. En el pueblo donde crecí hay una fábrica de seda muy conocida y el estudio está en el distrito más famoso de Francia para los fabricantes de seda. Detrás de esta idea de la creación de tejidos fruto del gusano de seda también está la idea del vínculo que deseamos crear con nuestros empleados y con los clientes.
Magnane Studio se define como un proyecto artesanal sobre la belleza. ¿Cuál es tu concepto de belleza? Creo que la belleza es algo que nos toca, que nos habla, una mezcla de aquello con lo que crecimos, pero al mismo tiempo, todo lo que deseamos ver a nuestro alrededor día a día. Para mí, la belleza es intentar que los demás sientan algo, que sientan eso que yo noto cuando encuentro algo hermoso. A mí esa sensación me hace sentir vivo. Para mí la belleza es fundamental a la hora de crear, lo que me lleva a tener que sentir emociones muy concretas. Por eso, muchas veces, involucro a personas con diferentes universos y puntos de vista en los proyectos para que aporten ese plus de sensibilidad, de alma… y así conseguir elevar el proyecto a otro nivel.
En Magnane creáis esa belleza para aquellos a los que denominas “soñadores digitales”, ¿qué es exactamente un “soñador digital”? Un “soñador digital” es alguien que tiene una sensibilidad por todo lo relacionado con lo digital. Me atrevería a decir que esas personas nacieron a partir de 1980, junto con los primeros videojuegos y que nunca han dejado de pensar y trabajar en el desarrollo del universo digital. Con la palabra digital me refiero a todo lo relacionado con la pantalla. También, se trata de un concepto que habla de todos aquellos que sueñan con cosas imposibles pero gracias a las herramientas digitales puede surgir la oportunidad de crearlas, de elaborar todo lo inimaginable. La tecnología digital nos ha permitido evolucionar y se ha convertido en una herramienta fundamental para nuestro desarrollo.
“La tecnología digital nos ha permitido evolucionar y se ha convertido en una herramienta fundamental para nuestro desarrollo.”
Acabas de presentar el proyecto “Queen Symphony”, cuéntame ¿cómo surgió esta serie? Queen Symphony es un proyecto nacido en un período clave en el diseño y la moda. Pienso que en los últimos meses se han llevado a cabo muchos proyectos de moda digital, proyectos de gran calidad y muy creativos que admiro enormemente pero que en su mayoría no tenían como objetivo crear un vínculo con la realidad. Quería llevar las cosas un poco más allá y construir esa unión con la realidad, donde la frontera entre lo digital y la palpable no sea perceptible. Me parece fascinante el poder crear algo que te haga dudar de si es real o digital y considero que la mejor manera de comenzar un proyecto de este estilo es reflexionando y haciéndote preguntas.
Con esta sinfonía quieres cuestionar los límites entre la realidad y la imaginación. ¿Qué conclusiones ha sacado de esta experiencia? No saqué ninguna conclusión concreta, pero sentí que este proyecto planteaba muchas preguntas. En primer lugar, sobre qué es real y qué es digital, pero también muchas cuestiones sobre por qué crear ropa como esta más allá del aspecto técnico o el estético. Plantearse muchos interrogantes diría que es la única conclusión interesante para seguir adelante con ideas como esta sinfonía.
“Quería llevar las cosas un poco más allá y construir esa unión con la realidad, donde la frontera entre lo digital y la palpable no sea perceptible.”
Nos cuentas que este proyecto está influenciado por el posmodernismo, ¿a qué te refieres exactamente? El posmodernismo es de hecho una observación sobre las creaciones de ropa digital actuales. Es una especie de punto de partida para la reflexión. Más allá de eso, no me gusta apegarme demasiado a esta noción tan difusa y vaga ya que para mí no es la esencia misma del proyecto.
Tú que elaboras outfits de manera completamente virtual, ¿cuál dirías que es el papel de este tipo de moda en la actualidad? Creo que la moda digital tiene un impacto real en la creación actual, más aún con la llegada de los token no fungibles. Todo ello nos está llevando en una misma dirección. No considero que le vaya a quitar espacio a la moda física, pero si va a empezar a ocupar un lugar muy importante en los procesos creativos que están por venir.
Benoit, eres el director creativo de Magnane y en esta ocasión has contado también con la ayuda de otros dos artistas 3D, Diego Conte y Alban Contrepois. ¿Cómo se formó este equipo? El equipo está formado por dos artistas 3D pero también por un fotógrafo y un retocador creativo, que aporta un poco de su personalidad al conjunto. Pero concretando el caso de Alban y Diego, que tienen un perfil más técnico, son dos personas con las que trabajé previamente en una campaña para una marca de ropa, y habiéndonos compaginado muy bien, me pareció completamente natural integrarlos en este proyecto. Tengo una visión bastante colaborativa en este tipo de trabajos y propongo a personas en las que confío y con las que es un placer trabajar. Además, sus habilidades técnicas hicieron posible tener un rendimiento a la altura de lo que esperaba.
¿Será acaso el diseño 3D un paso previo para poder crear moda de forma más sostenible?Desafortunadamente, no veo cómo el diseño 3D puede hacer que una tela o algo por el estilo sean más duraderas. Creo que todo este trabajo de sostenibilidad debe realizarse en el mundo real si se desea un impacto y un cambio auténticos.
Y hablando de futuro, me gustaría que me desvelarais los planes que tiene Magnane Studio para este 2022. Tenemos varios proyectos visuales relacionados con campañas publicitarias y también producciones internas que conciernen al estudio como, por ejemplo, con una nueva serie que conecta con el espíritu de “Queen Symphony” y lo amplia. Al mismo tiempo, estamos investigando y desarrollando metaversos. Lamentablemente nos falta tiempo para llevar a cabo todos los proyectos que nos gustaría.