Studio Morison realiza normalmente instalaciones y proyectos de carácter artístico, pero esta vez ha confeccionado junto con Artura, una empresa de ingeniería, una pieza de Origami a escala 1:1.
Look! Look! Look! es un capricho, un folly contemporáneo con forma de piña situado en los jardines de Berrington Hall.
Imagen superior: Look! Look! Look! de Studio Morison Foto:©Ivan Morison
Imagen superior: Interior del folly Look! Look! Look! de Studio Morison Foto:©Ivan Morison
El color elegido por Studio Morison, fue el rosa para ponderar la extravagancia propia de los follies ingleses. Lo de la forma de piña se debe a que muchos de estos follies de los siglos 18 y 19 contaban con cúpulas rematadas con piñas.
Look! Look! Look! tiene ocho metros de altura por ocho metros de anchura y está formado por 90 secciones ensambladas que a simple vista se perciben como una pieza de origami gigante.
Sus materiales son sencillos, metal, madera y textil y el tiempo de construcción ha sido de seis meses, debido a la complejidad que suponía la correcta colocación de la tela sobre cada pieza.
Imagen superior: Look! Look! Look! de Studio Morison izquierda vista desde fuera Foto:©Marsha Arnold, derecha interior Foto:©Ivan Morison
Imagen superior: Look! Look! Look! de Studio Morison Foto:©Marsha Arnold
Hasta diciembre de 2019 podrá visitarse en Herefordshire, una ciudad situada al oeste de Inglaterra, en su interior acontecerán numerosos eventos y forma parte del programa Trust New Art que consiste en colocar instalaciones artísticas en lugares clásicos pero interesantes de la ciudad para reactivar el interés por los mismos.
Look! Look! Look! Studio Morison y la esencia performativa
Fundado en 2003, Studio Morison está dirigido por Heather Peak e Ivan Morison cuenta con una amplia gama de proyectos que trasciende entre el arte, la arquitectura y el teatro. También son reconocidos por sus conferencias sobre las intervenciones en el ámbito de lo publico, la colaboración, el compromiso y las estrategias de supervivencia para los artistas.
Algunas de sus obras forman parte de las colecciones de museos como el Museum of Contemporary Art Australia, Tate Britain o BANFF de Canadá entre muchos otros.
La esencia de su trabajo es siempre performativa, utilizan personajes sociales para investigar la construcción del yo, y del mismo modo la identidad colectiva a partir del análisis de la arquitectura, la ciudad y las costumbres. Como sucede con Look! Look! Look! para cuya creación trabajaron intensamente en reconocer la identidad pero también la sorpresa de los futuros visitantes.
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