Loewe Mujer SS22, una colección femenina que fusiona el Renacimiento con las vanguardias del siglo XX y las tendencias del siglo XXI.
Loewe Mujer SS22 es la propuesta femenina de Jonathan Anderson para la casa de moda de origen español. Una firma que desde su creación en 1846 ha sido testigo del nacimiento de todas las vanguardias del siglo XX. Ismos que son tendencia en el siglo XXI y se reflejan en la moda de Loewe junto a pintores renacentistas como Pontormo. Una propuesta que viaja del siglo XVI a hoy.
Fotos Desfile: Estrop – Francesc Tent / Fotos Bodegón: Cortesía de Loewe
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Las pistas ecuestres de la Guardia Republicana de París en el centro de la capital francesa han sido el decorado perfecto para este evento de moda, arte y tendencias. Creada en 1848, el año de la Revolución Francesa, dos años después de la creación en Madrid de la casa Loewe. Un paralelismo que sin duda no ha pasado desapercibido a Jonathan Anderson a la hora de dar ok a este escenario histórico cargado de energía revolucionaria.
“Psicodélica, neurótica y difusa”, así describe la casa del grupo LVMH la colección Loewe Mujer SS22. Una colección que refleja los ismos más experimentales de estos años locos de la segunda década del siglo XXI, recurriendo a referencias artísticas pretéritas. Por ejemplo, entre las que reconoce Jonathan Anderson está la del pintor renacentista italiano Pontormo, manierista del siglo XVI con personalidad pictórica extravagante, y que se manifiesta tanto en la gama cromática utilizada, como en las siluetas estilizadas creadas por Jonathan Anderson para esta colección.
Pero en Loewe Mujer SS22 también hay referencias más cercanas. Por ejemplo, vanguardias de comienzos del siglo XX como el surrealismo o el arte encontrado. Este último movimiento, conocido también como objet trouvé o ready made art, fue impulsado en su momento por Marcel Duchamp y hoy en día, en tiempos del upcycling, tiene una gran visibilidad en redes sociales como Instagram gracias a trabajo de creativas como Nicole McLaughlin.
La propuesta textil se caracteriza por la influencia espiritual de las túnicas de la pintura renacentista de Pontormo, con efectos metálicos psicodélicos que nos transportan al universo más sofisticado de los años 60. Vestidos asimétricos con incrustaciones 3D, tops, gabardinas, pantalones drapeados, chaquetas y faldas vaqueras, vestidos lenceros de lentejuelas… Un amplísima colección como caracteriza a las grandes firmas que vuelven a celebrar la vida de las pasarelas físicas.
En cuanto a la colección de bolsos y accesorios, aquí es donde se evidencia con mayor fuerza la influencia de Marcel Duchamp, sobre todo en los zapatos de tacón, hechos con objetos tan cotidianos como una laca de uñas, una rosa o una pastilla de jabón, dignas obras de arte hecho con objetos encontrados, tan de moda en Instagram. Aparte de este golpe de efecto, hay que destacar el bolso clásico Goya en sedosa piel, también en su versión clutch alargada, así como el bolso Flamenco en terciopelo o el bolso curvilineo Luna en piel lisa y jacquard Anagrama. Todo un repaso a la historia del arte, desde el renacimiento a las vanguardias del siglo XX y las tendencias del XXI.
