El diseñador gallego Tomás Alonso diseña una colección de mobiliario para la galería belga Victor Hunt. La colección forma parte del proyecto Vaalbeek Project que incluye sofás, butacas, alfombra, 2 lámparas de pared y 2 lámparas de pie. Piezas que conectan en materiales y estética con otras pieza que hizo en mármol para el mismo designart dealer en el año 2014.
Esta nueva colección es un aperitivo del proyecto Vaalbeek Residence que consistirá en una
remodelación de una casa de campo ubicada en Bélgica. El proyecto es un rediseño de todos
los objetos de la casa, un trabajo hecho a medida y enteramente por Tomás Alonso.
El método del diseñador ha utilizado es una aproximación a los objetos cotidianos
mediante la deconstrucción de todos los elementos que componen un objeto.
Una vez descompuesta la pieza, conceptualmente hablando, se vuelve a montar simplificando
y manteniendo su función. El material también es un factor importantísimo,
a veces es determinante para generar una forma o un utilidad.
Tomás consigue en Contemporary Salon una funcionalidad elegante, donde juega con las conexiones
entre el diseño del siglo 20 y el diseño más actual. En un primer vistazo parece que estás viendo iconos
del siglo 20 en un modernariato en una ciudad cualquiera europea.
Este vuelve ser un claro ejemplo del New Memphis del que tanto hemos hablado en Neo2,
esa estética recuperada del movimiento Memphis de Ettore Sottsass pero reinterpretada con la nueva
visión de los jóvenes diseñadores.
La galería Victor Hunt tiene una visión especial para trabajar con nuevos talentos del mundo del diseño industrial.
Entre sus fichajes están: Sylvain Willenz, Julien Carretero, Sabine Marcelis, Commonplace Studio, Kwangho Lee, Johannes Hemann, Maarten De Ceulaer , Tome Price y por supuesto Tomás Alonso. Según explican desde la propia galería después de las grandes marcas italianas del diseño de los años 70’s a los 80’s la industria ha tenido una gran revolución, estableciéndose en lo pequeño, lo artesano, de calidad, de edición limitada… y es esto lo que la galería persigue