La evolución de las especies y el caso del cocodrilo de Lacoste
Curiosamente, las teorías de Darwin sobre la evolución de las especies en base a la selección natural no cobran peso hasta 1930, década en la que nace Lacoste, la marca del cocodrilo. Desde su nacimiento, el logotipo de este reptil de la familia de los arcosaurios se ha ido adaptando a la perfección a nuevos ecosistemas: gafas, relojes, fragancias, maletas… Pero es a partir del siglo 21, desde 2006 concretamente, cuando anualmente el cocodrilo experimenta las transformaciones físicas más radicales a partir de la ediciones limitadas en colaboración con creativos provenientes de diferentes disciplinas. En 2010, Felipe Oliveira Baptista, diseñador portugués conocido por ser uno de los responsables del rejuvenecimiento de la semana de la alta costura parisina con sus colecciones, es nombrado director creativo de Lacoste. Su misión, aportar una visión global de la marca más próxima a los criterios avanzados de la moda contemporánea funcional. En 2011, el cocodrilo se aclimata a los nuevos tiempos bajo el concepto de imagen “Unconventional Chic”. Ese mismo año, se crean 2 nuevos universos: (1) Lacoste Lab: un laboratorio para experimentar con la genética de la marca y nuevos productos, desde una bicicleta a uno coche o una tabla de surf; (2) Lacoste L!VE: el futuro de la marca, donde el cocodrilo parece sentirse muy cómodo, rodeado de nuevas generaciones de creativos. Un ambiente más fresco, audaz y salvaje, donde el street style del reptil encaja perfectamente con las reglas de la calle. Como prueba, la tercera colección de footwear Lacoste L!VE para el próximo otoño invierno 2012-13. Cuatro líneas: Barbuda, náuticos coloridos de cuero y ante; Barbados, zapas elegantosas de ante y suela vulcanizada; Auber, para montañeros urbanos; Storm, zapa de piel nubuck premium que combina el beige con detalles rojos. Pues eso, larga vida a Lacoste.
