Hasta el 18 de mayo puedes visitar “La fragilidad del tiempo”, una exposición que hará las delicias tanto de adultos como de niños.
“La fragilidad del tiempo. Casa de muñecas” se trata de un viaje en el tiempo. Una ocasión para adentrarte en los mundos de los recuerdos de la infancia y de las casas de muñecas, de la mano de Carmen Mazarrasa y Miriam Martínez Abellán. Entrevistamos a Helia San Nicolás, comisaria de la muestra.
Imagen superior: Vista general de la exposición. Miriam Martínez Abellán
Miriam Martínez Abellán. Foto: Alex Lafuente
Un universo en miniatura
Imagina un mundo donde la grandeza de la arquitectura se reduce a una escala reducida. Donde cada habitación es un universo en miniatura que encierra siglos de historia y evolución. Este es el fascinante universo de las casas de muñecas, una ventana al pasado que nos invita a explorar la arquitectura y el interiorismo a través de los ojos de los coleccionistas y artistas que han dado vida a estas diminutas maravillas.
Carmen Mazarrasa
Delicadeza, precisión y atención a los detalles definen la esencia de la exposición “La fragilidad del tiempo. Casa de muñecas”. Una experiencia cautivadora que transporta a los visitantes a los recuerdos de la infancia y al mundo encantado de las muñecas. Bajo la curaduría de Helia San Nicolás, arquitecta y gestora cultural, la muestra se erige como un homenaje a la belleza efímera de la vida, recordándonos la importancia de apreciar cada instante.
Carmen Mazarrasa. Fotos: Alex Lafuente
Trascendiendo el tiempo y la escala
Collages, instalaciones fotográficas, y casas de muñecas componen esta exposición que, hasta el 18 de mayo, podrá visitarse en la Sala Caballerizas de Los Molinos del Río de Murcia. La cual, gracias al apoyo de tres estudios de arquitectura locales liderados por mujeres ha podido ver la luz. Así, “La fragilidad del tiempo. Casa de muñecas” emerge como un testimonio del poder del arte para trascender las barreras del tiempo y la escala. Una invitación a los espectadores a sumergirse en un mundo de ensueño donde la imaginación no conoce límites.
Carmen Mazarrasa
Charlamos con Helia San Nicolás, comisaria de la muestra
¿De dónde parte la idea de desarrollar “La fragilidad del tiempo. Casa de muñecas”?
Siempre me han atraído las experiencias multidisciplinares, especialmente las que apuestan por la transversalidad desde la arquitectura hacia otros ámbitos. Llevaba tiempo queriendo organizar un ciclo que apostase por el “cambio de escala” como eje vertebrador de actividades ligadas a los espacios domésticos. En este sentido, analizar las casas de muñecas desde su origen y su evolución hasta ser el punto de unión entre el patrimonio cultural doméstico y nuestra niñez me pareció un maravilloso ejercicio que abordar y compartir. Por otro lado, también vi como una oportunidad reveladora el indagar sobre las casas de muñecas como campo de experimentación expositiva y reflejo de la domesticidad contemporánea.
Miriam Martínez Abellán. Fotos: Alex Lafuente
Carmen Mazarrasa y Miriam Martínez Abellán artistas de la muestra.
¿Cómo conociste a las dos artistas, Miriam y Carmen?
Conocía a Miriam de la escena cultural de la Región de Murcia. Es una artista visual, docente y además una referencia nacional en el sector del collage. En cuanto a Carmen, supe de su obra a través de una publicación y quedé maravillada por la delicadeza y el detalle con el que retrataba y construía escenas domésticas con sus propias manos. Una vez conocí mejor su obra, tuve claro que debía invitarla a formar parte de esta exposición junto a Miriam.
Vista de la exposición. Foto Alex Lafuente
Háblanos un poco de ellas…
Miriam es una artista con una sensibilidad abrumadora y una precisión exquisita a la hora de plantear y ejecutar sus obras. Cuando visitas su estudio-taller puedes apreciar la atmósfera elegante, comprometida y honesta que luego traslada a sus obras. Por otra parte, Carmen ha sido todo un descubrimiento. Con una trayectoria profesional vinculada al mundo del diseño de joyas, ha sabido trasladar su experiencia en el tratamiento exquisito del detalle al diseño de objetos en miniatura, y a materializar de forma sublime espacios domésticos que reflejan la cotidianidad de nuestros hogares.
Carmen Mazarrasa
Sensibilidad y capacidad de precisión
¿Qué destacarías de sus trabajos?
De Miriam destacaría su gran sensibilidad y su capacidad de encontrar “tesoros” en anticuarios. También de observar el mundo y analizarlo con una mirada crítica a la vez que poética, y trasladarlo después a composiciones contemporáneas muy bien orquestadas a través de planos, líneas, objetos y fotografías antiguas.
De Carmen destacaría su exquisita precisión, su mirada curiosa y conciliadora hacia el pasado y el presente, su habilidad para construir atmósferas con las que conectamos emocionalmente. Especialmente me llama la atención la belleza delicada de los objetos que diseña y crea, su respeto por el detalle y su capacidad de “congelar el tiempo” a través de espacios domésticos que despiertan nuestros sentidos y nuestra memoria dormida.
Miriam Martínez Abellán. Foto: Alex Lafuente
“La fragilidad del tiempo”
¿A qué hace referencia “La fragilidad del tiempo”, parte del título de la exposición?
El título de la exposición alude a la belleza de lo efímero. Es una declaración de intenciones, una invitación a reflexionar sobre la necesidad de disfrutar de cada momento. Disfrutar de cada etapa de la vida como una experiencia única que hay que experimentar en toda su plenitud, entendiendo que su belleza va ligada a su fragilidad. Nuestros recuerdos de la niñez se deslizan por esa misma fragilidad que anida en nuestra memoria. Despertarlos a través del tiempo y el hogar mediante esta exposición fue uno de los objetivos de esta muestra: (re)conectar con ellos a través de un viaje expositivo.
Carmen Mazarrasa. Foto: Alex Lafuente
Tres arquitectas locales mecenas del proyecto
Esta exposición cuenta con apoyos institucionales, pero también cuenta con patrocinios particulares de empresas locales. ¿Cuéntanos quienes son y cómo surgió esta gran idea?
El apoyo institucional del Ayuntamiento de Murcia a través de Los Molinos del Río ha sido clave para sacar adelante esta iniciativa, que incluyó dos coloquios y la exposición. Por otra parte, el patrocinio contó con la aportación de algunas empresas -inmobiliaria, mobiliario comercial y prensa- y el apoyo económico de tres estudios de arquitectura ubicados en la capital murciana y que lideran tres mujeres: Laura Ortín Arquitectura, Casalinga de María Brotons y AFuentes Arquitectura, de Ana Belén y Andrés Fuentes.
Para mí, como arquitecta, este apoyo tiene muchísimo valor. En este momento, estoy trabajando en el diseño de otros proyectos y, sin duda, volveré a pedir el apoyo de estudios de arquitectura para que se conviertan en realidades.
Vista de la exposición. Foto Alex Lafuente
La exposición es muy bonita y delicada, además de resultar atractiva para muchos públicos. ¿Entra en vuestros planes la idea de mostrarla en otros puntos de España?
Aunque la exposición no está concebida inicialmente como una muestra itinerante, sería todo un orgullo que se abriese a otros puntos de la geografía nacional. Estoy segura de que habría mucha gente que conectaría con el objetivo de la muestra: compartir una visión transversal sobre lo que significan las casas de muñecas en cuanto a recuerdos, infancia, emociones, interiorismo, arte y arquitectura. Sinceramente, me encantaría.
La fragilidad del tiempo podrá visitarse hasta el 18 de mayo en Los Molinos del Rio de Murcia. Más información aquí.
Para conocer más sobre la comisaria, Helia San Nicolás, sigue este enlace