Kleenex nos recuerda que sus prácticos pañuelos son desechables, pero que con las cajas puedes hacer muchas cosas y muy chulas
Desde que en 1924 se inventase el Kleenex como utensilio para la limpieza facial femenina, han pasado muchas cosas. Todos nos hemos reconvertido un poco: la industria… el ser humano… y también Kleenex (desde 1930, reconocido, sobre todo, como pañuelo para los resfriados).
El ser humano aún está en plena reconversión. Una de los aspectos sobre los que estamos tomando conciencia es la importancia de la naturaleza. La industria, o parte, también está en ello. Por ejemplo, Kleenex fabrica en la actualidad todos sus pañuelos con fibras naturales, pero quiere dar un pasito más estimulando al consumidor a responsabilizarse también con el medio ambiente. Y lo hace a través de la creatividad y la sostenibilidad. Es decir, poner en práctica el juego de las 3R: reducir material, reutilizar envases y reciclar residuos. ¿Y qué mejor que empezar con su propio producto?
Kleenex te propone reutilizar sus bonitos envases de colores como objetivos decorativos, ya sea de forma permanente o de forma efímera para una fiesta. A modo de ejemplo, te proponemos estas ideas que hemos cotilleado a través de Google:
– reconvierte las cajas de Kleenex en simpáticos maceteros
– aprovecha algún marco que no uses y enmarca los prints de las cajas para decorar un rincón de tu casa (idea de cocondecoration.com)
– Haz un poco de origami para decorar plantas o simplemente guirnaldas para una fiesta casera (laorquideadichosa.com)
Aquí tienes un tutoría para desarrollar tus propias ideas con la filosofía DIY:
Bueno, ideas hay muchas. Si te ocurre alguna más, compártela, que también es muy sano -> Facebook Kleenex España