Friedriich es la nueva estrella pop que ilumina la escena queer española. Storm in my Head es su primer EP. Siete canciónes que nos introducen en el mundo interior de este artista que esperamos ver en el Orgullo LGTBIQ+ 2023
Friedriich es Frederic Prat Oms, un artista pop que viene pisando fuerte desde Barcelona. Encuentra su inspiración en divas como Lady Gaga, Lana Del Rey, Marina o Halsey, y en esta entrevista os contamos al detalle todo lo que esconde Storm In My Head, su primer EP. El rechazo, la ansiedad, la estimulación, la aceptación, la pérdida, el orgullo y la memoria emocional son todas las emociones que nos hace vivir esta nueva promesa del pop.
Arriba: portada del nuevo EP de Friedriich, “Storm In My Head”
Foto: @friedriich. En Storm In My Head, disponible YA
Para la gente que no te conoce, ¿cómo te definirías a ti y a la música que haces?
Soy un alíen, con una imaginación peculiar y creativa, dentro del planeta Tierra. Nunca me he amoldado a lo que la sociedad esperaba de mí y quiero que las personas, que me ven como un bicho raro, se hagan preguntas.
La música que hago es para todas esas personas que hemos tenido experiencias incómodas por el simple hecho de expresarnos o ser como queremos ser, y que exploramos fuera de las reglas establecidas.
¿Cómo y cuándo decides lanzarte a hacer música?
En diciembre de 2019, cuando mi abuela falleció. Después de padecer Alzheimer durante años, generó un cambio trascendental en mi ser. Yo ya llevaba años acudiendo a clases de música y escribir es algo que siempre me había gustado.
Me inspiró a visualizarme a mí como una pop star, y embarcarme en el mundo de la música. En febrero de 2020, escribí todas las letras, que fueron moldeadas con el tiempo, y busqué a un productor que pudiera entender mi concepto.
¿Qué te impulsó a lanzar un EP?
El concepto que tiene al completo. Cuando empecé a escribir las letras, quería centrarme en el hecho de sentir. Personas que han formado parte de mi vida me repitieron constantemente que mi forma de expresar los sentimientos era un tanto extraña, o que no era suficiente.
No era consciente de que era perfectamente capaz de plasmarlo en palabras, así surgieron los 6 sentimientos del álbum. Además, a idea de la portada es una ascensión a un plano, donde soy capaz de descargar mi tormenta de sentimientos y dejar la puerta abierta para que suban a experimentarla conmigo.
Muchos artistas esconden una historia detrás de sus proyectos, ¿cuál es la de “Storm in My Head”?
La historia detrás de “Storm in My Head” es la de volcarse en el torbellino de experiencias emocionales y sensoriales que experimenta uno mismo. Es un recorrido para sanar el pasado, recordándolo y enfrentándolo de la manera más positiva, evasiva o decadente posible. El orden son 7 fases por las que he pasado.
@friedriich. Nuevo EP “Storm In My Head” disponible YA
¿Qué razón de ser representa cada una de las 7 canciones del EP?
«Don’t Blame Me», habla de una persona decidida a dejar de culpabilizarse por alguien que no merece la pena. «Storm in My Head» representa a una persona abrumada por la cantidad de inputs diarios, que quiere hacer borrón y cuenta nueva, pero se pierde en un mar de infinitos pensamientos. «Ascension» es una persona que evade la realidad y construye mentalmente una dimensión alternativa, para ser feliz. «Alienation» trata de una persona alienada de la realidad, que busca refugio en otro planeta, dónde pueda ser aceptada. «The Architect» vive el luto de una de las personas más importantes e influyentes de mi vida, mi abuela. «Crazy Beautiful Life» refuerza el poderío y celebra la vida del colectivo LGTBIQ+. Y, por último, «Live and Forget» no deja que estas razones de ser impidan retroceder al pasado, aunque sí recordarlo de forma vivida.
@friedriich. En The Architect, disponible YA
Siendo este tu primer EP, ¿crees que es una buena carta de presentación? ¿Qué esperas de él?
Sí, creo que «Storm in My Head» es una buena carta de presentación para empezar. Pero creo que todavía me queda mucho para experimentar. De hecho, lo nuevo que estamos preparando es un giro importante.
Lo que espero de este trabajo, con todo el esfuerzo que hay detrás, es darle una buena visibilidad durante este año. Hay tantas personas que han formado parte de él, experiencias, tiempo dedicado, dinero invertido y, sobre todo, un concepto visual único y elaborado. ¡Me hace muy feliz poder llevar este trabajo a los escenarios y otras plataformas!
@friedriich. En Don’t Blame Me, disponible YA
¿Cuál dirías que es tu principal fuente de inspiración a la hora de escribir tus temas?
Mis fuentes de inspiración son mis reinas del pop: Lady Gaga, Lana Del Rey, Halsey y MARINA. Creo que ellas nos han ayudado, con su música y sus letras, a ser capaces de sanar problemas de autoestima, de odio hacía nosotros mismos y de falta de comprensión.
Una de mis partes favoritas de hacer música es que las personas se identifiquen con mis letras y les permita avanzar en su vida personal a la medida que sea.
Don’t Blame Me es el tema que abre tu nuevo EP “Storm In My Head”. ¿De qué no debe culparte la gente?
Más que de la gente, hablo de algunas personas en particular con las que he formado un estrecho vínculo afectivo. Como acuario que soy, generalmente me han tachado de no tener sentimientos y de ser una persona fría, pero se han aprovechado mucho de mis momentos vulnerables.
Con el tiempo, y horas de terapia, me he dado cuenta de que tenemos una parte muy práctica a la hora de gestionar lógicamente los conflictos, y que somos capaces de mostrar nuestros sentimientos en acciones hacia las personas que queremos.
friedriich en Don’t Blame Me
Desde tu punto de vista, ¿cuál es el peor pecado de la sociedad?
El peor pecado de la sociedad es el ímpetu constante que tiene de criticar, señalar y violentar a todo lo que sale de la norma. Realmente, esta sociedad no sabe la suerte que tiene de tenernos. Creo que, como personas que no han experimentado una vida como las demás, situaciones laborales distintas y constantes barreras, tenemos mucho que aportar y que contar.
No querer escuchar, ni entender, ni ponerse en la situación de personas del colectivo LGTBIQ+ me parece una falta de valores humanos.
¿Crees que las personas del colectivo LGTBIQ+ tienen más barreras en la industria musical que los demás?
Si tengo que decir que sí o no, yo diría que sí. Pero también quiero justificar mi respuesta, porque hay una línea muy fina, entre ponerle una barrera o aprovechar el momento adecuado o cloud, para darle una plataforma a un artista del colectivo LGTBIQ+. He visto personas en contra de nuestros derechos, apostar por artistas del colectivo, minar sus formas de ser o exponer opiniones que nos son dañinas. A nivel de locales, por ejemplo, considero que actualmente hay muchos, categorizados como LGTBIQ+, que nos dan un espacio y dónde podemos visualizar nuestro arte. Pero también es verdad, que hay locales con un enfoque normativo y hasta que no haya un cambio mental, no van a aceptar nuestras propuestas.
@friedriich. En Crazy Beautiful Life, disponible YA
¿Cuáles son los demonios contra los que luchas en Ascension? ¿Son los mismos que te han hecho ser la persona que eres ahora?
La canción es una queja de la sociedad en la que vivimos y el estrés que sufrimos diariamente. Es anhelar otra dimensión, que nos permita ser más creativos, no centrarnos solamente en nuestro trabajo y tener más bienestar propio.
Los demonios es lo “malo” que podríamos encontrar en esta dimensión alternativa. Y sí, son los mismos que me permiten luchar diariamente por querer conseguir ser la persona que quiero y llevar esa dimensión en la tierra, para finalmente dedicarme exclusivamente a la música.
En temas como Ascension o Alienation hablas de viajar a otro planeta por sentirte extranjero en el tuyo, ¿a qué podríamos extrapolar esto?
El tema de sentirse extranjero en el mío, viene de sentirse como un alienígena, tal y como me he definido al principio. Como, por ejemplo, el mismo ciclo de vida que está aceptado por la sociedad: nacer, crecer, trabajar, casarse, tener hijos y morir (¡Y no te salgas de la norma!). Estoy en desacuerdo de muchas ideas que han sido impostadas en la sociedad, pero vamos a centrarnos en las dos canciones que mencionas. «Ascension», extrapola el hecho de sobresaturarse en el trabajo y darlo todo, para después no tener ni un momento o las ganas necesarias para realizar una actividad que te haga feliz. «Alienation», en cambio, infiere en el hecho de huir de dónde uno no es aceptado a otro planeta, dónde no se hace discrepancias a la hora de expresarse diferente.
@friedriich en Alienation, disponible YA
Una de las canciones de “Storm In My Head” es The Arquitect. ¿Quién es “tu arquitecto/a”?
Mi arquitecta es mi abuela, que por desgracia ya no está aquí. Siempre la tengo muy presente y le debo ser la persona que soy hoy. Ella era una luz en mi vida.
Siempre tuvo las cosas muy claras. Lo que quería y lo que no, sin medias tintas. Era un ejemplo a seguir y como nunca me he identificado con la figura masculina, aparte de mi padre, ella era el motor de mi desarrollo como persona. Esta canción es el texto que leí en su entierro y es lo que me inspiró a emprender en el mundo de la música.
¿Crees que la música es una herramienta útil para luchar por los derechos de las minorías, y alzar la voz?
Sí, lo es porque no pueden censurar nuestra creatividad. Pero lo es cuando se puede difundir y cuando las personas están preparadas para escuchar el mensaje. Ya podemos ser artistas independientes e intentar aportar nuestro granito de arena, que si los medios no quieren darnos una voz es muy complicado que llegue a las personas indicadas.
Si siempre lo escuchamos las minorías, que también aprendemos, no podemos abarcar al completo. Eso es algo que me encantó que dijera Samantha Hudson en una entrevista: “si se quejan de que no hay suficiente representación, que acojan a más artistas del colectivo”.
Boceto de The Architect para el videoclip del tema
En algunos temas mencionas a esa “lucky person”. ¿Tú te consideras una persona con suerte?
Me considero una persona con suerte por las personas que tengo a mi lado, pero suerte bidireccional. Tengo la suerte de poder definir y llevar a cabo una imagen visual que concuerda totalmente con mi personalidad.
Suerte no sólo por haber hecho sold out casi siempre, sino por haber podido actuar, tanto de forma íntima, como por todo lo grande en tan sólo un año. La energía que he vivido en estos conciertos ha sido un empuje enorme y una adrenalina arrolladora.
Y, en último lugar, siendo sincero, toda esta suerte ha sido gracias a una gran dedicación y un trabajo que no se puede ver desde el exterior.
¿Dónde te has inspirado para hacer los videoclips? ¿Cómo ha sido el proceso creativo?
La inspiración para hacer los videoclips ha sido fruto de cada canción, del mensaje que tenía detrás y del dinero que podíamos invertir.
Para «Live and Forget», la visión de ir a los sitios más western americano de Barcelona y cercanías es por la melodía country-pop del tema. Para «Don’t Blame Me», por ejemplo, plasmamos una relación tóxica entre dos personas, y jugamos con luces de colores en un piso alquilado por horas del centro de Barcelona.
En «Ascension», decidimos ir por todo lo alto e involucrar a muchísimas personas del propio colectivo LGTBIQ+ y aliadas, en el antiguo taller de mi ex manager y recrear todas las escenas con cambio de attrezzo y sala.
Imagen del videoclip de Live and Forget, disponible YA
El año pasado recorriste España con conciertos en ciudades como Barcelona, Sevilla, Gerona… ¿Qué recuerdo tienes?
Era la primera vez que hacía una gira y el recuerdo es una fantasía hecha realidad. Cantar por diferentes sitios de España me ha hecho muy feliz. Los conciertos que más adoro son o los más íntimos, o los más grandes.
Recuerdo el domingo después del Festival Sónar, en La Casa de la Pradera, cantar tan cerca de las personas que vinieron fue muy bonito. O en La Mirona (Gerona) había tantas personas viéndome que, cuando salí al escenario, noté un calambre eléctrico por todo mi cuerpo, que me hizo empezar con una energía arrolladora. Allí fue donde canté por primera vez «The Architect», y todo el mundo estaba moviendo los brazos de un lado a otro.
Para este año 2023 ya tienes algunas fechas para el “Storm in My Head Tour”, ¿qué nos deparará esta gira?
Por ahora tenemos dos fechas confirmadas en Barcelona, la primera es en Lo de Carmen (Poble Sec) el 2 de febrero. Y la otra el 17 de febrero en La Casa Milagrosa (Eixample), en la que se realizará una recaudación del dinero de las entradas para una asociación trans de Barcelona, que se llama Tirititrans.
Esta gira nos deparará mejor voz, mejor puesta en escena, viajes a nuevas ciudades y países, nuevas coreografías, en «Ascension» y «Crazy Beautiful Life», y otras cosas que todavía no puedo desvelar.
¿Qué nos puedes contar de tus planes de futuro?
De entrada, me encantaría poder tocar en otros sitios de España y Europa. A nivel de proyecto y canciones, ya está escrito el próximo EP que irá sobre el desamor. Se prevé utilizar otras herramientas de grabación, para darle un cambio diferente a la voz.
A la par, estoy pensando qué quiero expresar con la imagen de este nuevo concepto, colores e ideas. Me gustaría seguir haciendo música, en todos los aspectos, pero la meta es dedicarle el cien por cien de mi tiempo, no tengo suficiente con las noches y los fines de semana.