Hace unos días nos llegó una nota de prensa de un nuevo estudio de diseño de mobiliario: Estudio Báltico. Detrás está Ruth Uve estilista, con una amplia trayectoria en el mundo de la música y los blogs, que tuvo la osadía de abandonar su trabajo para dedicarse en cuerpo y alma a una vocación que llevaba su nombre: dedicarse al mundo del diseño de mobiliario.
Acaba prácticamente de empezar y solo tiene un par de productos visibles pero nos ha llamado la atención, las ganas de hacer bien las cosas que tiene Ruth. Por eso hemos decidido hacerle una entrevista, para hacernos una idea de cómo ve el mundo del diseño del mobiliario alguien que empieza en esto
Imagen superior Ruth Uve y a la derecha el logotipo de su estudio. En el resto de las imágenes piezas de la colección Schnitt
¿Qué edad tienes? Soy de octubre del 78.Así que ya estoy más cerca de los cuarenta que de los treinta. Aunque suena a tópico, para mi la edad es algo meramente mental. Creo que en una vida hay muchas vidas y muchas etapas, y puedo asegurar que por momentos con 20 me sentía como si tuviese 80, con 10 como con 20 y así todo el rato.
¿Qué has estudiado? Estudié diseño de moda hace mucho tiempo y después diseño de Mobiliario en lo que antes era la escuela de arte nº12. La primera escuela dedicada al diseño experimental de diseño industrial, fundada en 1984, hasta que en 1994 pasó a formar parte de la Logse. Ahora está fusionada con la escuela de arte nº10. Desde el principio quise estudiar allí. Llevaba años dándole vueltas, al final, tuve la suerte de formar parte de la última tanda de alumnos que empezaron en la escuela original.
¿Venías del mundo del diseño? Venía sobre todo del mundo del estilismo y la docencia de este, que es a lo que me dediqué después de estudiar moda. Trabajé durante bastantes años en estilismo editorial, ficción y sobre todo publicidad. Ahí tuve la suerte de trabajar con personas increíbles de las que pude aprender mucho, como Jose Morraja o Luis Cerveró, con los que pude compartir proyectos maravillosos que aún recuerdo con gran cariño.
¿Por qué has elegido el diseño de mobiliario? Creo que las disciplinas dentro del mundo del diseño ayudan a enmarcar especialidades muy determinadas. Para mi lo que siempre ha predominado en diseño es el discurso. Trabajar sin el, es algo completamente incomprensible . El discurso en diseño está muy ligado al personal. Obviamente evoluciona, se afina, pero siempre hay una base inicial, que se mantiene. Al menos en mi caso.También creo que ese discurso puede aplicarse a cualquier disciplina. Al final es una forma de ver y entender el mundo a partir de la cual crear. Lo que cambia es el material, la volumetría. Las sensaciones, los objetivos, el proceso es bastante similar. En mi caso elegí mobiliario por aprender algo más técnico. Pero podría haber sido cualquier otra cosa.
¿Cuál es la mejor marca de mobiliario española para ti y porqué? La mejor marca de mobiliario española para mi es BD. Luego hay estudios y makers que me gustan mucho. Creo que en España se trabaja mucho en base a la búsqueda de soluciones ingeniosas. Cosa que admiro mucho, aunque para mi, prime siempre más la poesía y el porqué. Por eso me siento siempre mucho más cercana a proyectos como Basics de Javier Peña Ibañez. Las piezas de Brut, que tienen una cromática preciosa y unos acabados perfectos. Very Wood Ideas de Simone Nicotra, porque es súper emocional e intuitivo creando. Me da mucha pereza el tema de las tendencias en mobiliario. Tipo, el mármol, venga, pues todo en mármol. El tubo de metal, pues venga, todos con tubo de metal. Cuando eres seguidor y consumidor, y ves de donde surge la primera idea… . Entiendo que a veces todos vemos cosas que nos encantaría haber hecho, y que es muy complicado frenar ese impulso. No tengo nada en contra de copiar o de reinterpretar, sencillamente creo que eso nos limita a todos mucho en general. También que se pierden preguntas importantes de base en ese proceso. no se trata de hacer algo exclusivamente estético para mi. intentar ser la voz de tu tiempo desde el presente me parece un tremendo error. De los consagrados soy muy seguidora de Patricia Urquiola. Cada vez soy más consciente de que existe una aproximación diferente de hombres y mujeres ante el diseño y ella, bueno, me parece que desarrolla productos con una capacidad estética maravillosa. Nacho Carbonell también me encanta. sobre todo su conceptualización de los objetos.
¿Cuál es la mejor marca de mobiliario internacional para ti y porqué? La marca conocida con la que más me identifico es HAY. Sobre todo soy una gran seguidora del diseño holandés. Mis imprescindibles en esta lista son Scholten and Baijins. Precisamente por algo que comentaba antes. Son el equilibrio perfecto entre el diseño masculino y el femenino. Se nota mucho en su resultado. Su manera de trabajar me parece formidable, y siempre que sacan algo nuevo, no me recuerda a nada. Siempre es como descubrir un olor nuevo, tocar un material nuevo. Con ellos siempre es como una primera vez y eso para mi es diseño absoluto. Aquí al final se trata de crear muebles. Se puede hacer desde muchos puntos de vista. Desde el meramente estético olvidando completamente que sea viable, hacerlo muy técnico, seguir una tendencia …. . Todo vale. Todo el mundo puede idear un mueble. Puede ser una pieza de arte o algo meramente utilitario. Pero que sea como la primera vez que ves el mar… . cada vez. Para mí ahí está en parte el reto. Estudios que tengan un tamaño y una proyección similar a la mía, Zoë Mowat. Me encanta su trabajo.
Vas a exponer en Lambrate en Abril… ¿Has estado antes en la semana del diseño de Milán?
No. Nunca he estado antes. Ten en cuenta que el estudio es muy nuevo. Llevo menos de un año con el. Siempre he sido muy seguidora de la semana de diseño de Milán, aunque siempre de manera virtual. Históricamente es para mi la mejor feria. La verdad es que estoy muy emocionada con poder participar. Lo que comentábamos antes de las primeras veces. Es mi primera feria. Y bueno, la selección de Lambrate me parece una pasada. Poder exponer con diseñadores que me alucinan como Lucio Curcio o Archibal Godts, me parece increíble. Soy una persona muy comunicativa, a veces incluso más de lo que debería, y poder comunicar desde allí con personas a las que de otro modo no habría llegado me parece un sueño. Y luego claro, la experiencia del proceso hasta llegar ahí. Calcular los resultados una vez desmonte. Para un estudio nuevo y con muchas ganas como el mío es algo maravilloso. Aprender, siempre, hasta el final. Eso es para mi Lambrate. Tengo mucha suerte además con las personas que me rodean. Amistades talentosísimas, que me han apoyado en todo desde el día 1. Opiniones que valoro muchísimo. Compartir esto con ellas es casi lo que más ilusión me hace. Los retos son una parte muy importante de mi proceso creativo. Enfrentarme a nuevas dificultades, salgan bien o mal, que al final es lo de menos.
¿Qué echas de menos en el mundo del mobiliario?
Echo mucho de menos una educación más focalizada en lo realmente importante.Me explico, las escuelas van centrando su atención en aspectos que van surgiendo. En lo sostenible,en lo social. ¿Existe alguna manera de que el diseño no sea social?. Para mi no. Igual que el hecho de que sea sostenible. La sensibilidad de un diseñador no va a jugar nunca en contra de esto. Son al final, todo cuestiones que ya están planteadas.Que no deberían formar parte del proceso de aprendizaje. Generar futuro. Esa, debería ser, desde mi concepción de todo esto la única pregunta. ¿Cómo lo generamos?. Pues obviamente a base de preguntas. Preguntas que únicamente pueden existir observando. Acercándonos a los rituales comunes de cada uno de nosotros. Las escuelas para mi, deberían acercarnos a la consciencia del entorno, pero no a una en la que seamos respetuosos con el medio ambiente, si no a una más profunda.¿Qué necesitamos para mejorar el mundo?. ¿Qué mini pasos podemos dar?. El diseño sigue siendo una disciplina muy objetual, y así se trata desde la educación, y creo que sería un gran avance introducir lo emocional como materia principal. Obviamente, el uso, al tacto, el color, son cuestiones que existen en una pieza y que no vamos ni demos hacer desaparecer. Pero, ¿ qué pasa con la memoria?. No juegan los recuerdos un papel importante en todo esto?. La alfombra que recuerdas de pequeño, los espacios antes habitados por personas queridas que ya no están y que revistas cuando estos se han ido. El diseño tiene que hablar de esto. Y las escuelas deberían ser las transmisoras. Quiero decir también que yo he tenido una gran suerte con mis profesores. José Luis Espinosa, Paula Daliá, Gabriel de Un Mundo Feliz. Grandes diseñadores que han dedicado su vida a la docencia, y que me han abierto las puertas de un puñado interesantísimo de cuestiones.
¿Qué tipo de productos te gustaría desarrollar en el mundo del mobiliario?
Intento vivir mucho en el presente. Me parece el único punto de partida posible para generar futuro. Si dijese que para mi los muebles no son importantes, sería obviamente un absurdo. Pero si son algo secundario. Yo disfruto observando. Descubriendo aspectos nuevos en algo cotidiano. Pueden ser muebles, o puede ser un jardín. Dónde va a caer la respuesta a la pregunta, como se va a materializar no suelo tenerlo claro hasta bien avanzado todo el proceso. El encuentro entre lo material y lo emocional me parece auténtica magia. Sobre eso trabajo cada día. Por lo menos de momento. Siempre espero que el tiempo me sorprenda. Si hablamos de mobiliario específicamente si te confesaré un deseo profundo de que se mantengan en el tiempo. En que envejezcan bien.
En tu manifiesto dices que es importante mirar al pasado. ¿Qué época del pasado relacionada con el diseño es la que más te ha llamado la atención y la que más te puede llegar a influir? En mi manifesto hablo de observar el pasado. No el pasado en el diseño. Hablo de partir de lo ya aprendido por otros. De no despreciar toda esa experiencia por una necesidad vacua de ser modernos. La historia hay que conocerla para asegurar los pasos que vamos dando en el presente. De una forma muy cercana, en nuestro círculo familiar lo vivimos continuamente. La experiencia transmitida de manera generacional es indiscutible. Nos marca. El apellido no es un nombre, son una cantidad ingente de vivencias a las que estamos ligados. De las que aprendemos de manera positiva o negativa. En política debería suceder lo mismo. Y en diseño también. Me fascina el trabajo de ebanistería. La capacidad de ensamblar sin metales de ningún tipo. El uso que se le daba a piezas muy determinadas. Escribir sobre la madera, o sobre la roca en una cueva. Son cosas que me ayudan a seguir hacia delante. Avances que tenemos muy interiorizados, pero que siempre están ahí como recurso, en nuestra biblioteca emocional personal. Cosas en las que me fijo y que me hacen sentir. A mi lo que me influye de verdad son las vidas. La mía y las de las personas que me rodean. Por supuesto tengo piezas de diseño que prefiero sobre otras, como la ultraligera de Ponti, que no fue más en realidad que una adaptación de una silla que ya existía en el pasado. Y sin embargo hay algo del pasado en el diseño, en la literatura, en las artes aplicadas, que me fascina. Los movimientos culturales. La sensación conjunta de pertenecer a un todo en el presente. De ir en una misma línea de manera individual. En este sentido admiro mucho a Oscar Tusquets Blanca y a su estudio Per.
Ergonomía y poesía ¿Cuál es el porcentaje ideal de cada una en un producto?
La ergonomía es una ciencia creada para mejorar la vida de las personas. y en ese sentido es positiva y necesaria. Hay que ser muy responsable con las implicaciones físicas de lo que diseñamos. A veces veo objetos o proyectos que me fascinan desde un punto de vista estético pero que sin embargo son muy poco responsables. Eso para mi no es diseño. Es otra cosa. arte, una idea …. . Objetos en los que prima el ego del creador. Piezas ideadas para satisfacer una necesidad muy específica y muy individualista. A favor de ellas eh?. En general a favor de lo máximo posible. Pero para mi no entra en la categoría de diseño, en la que creo que las piezas tienen que ser generosas y estar creadas pensando en algo que vas más allá de uno mismo. El diseño debe existir para mejorar la vida de los demás. Puede haber ergonomía sin poesía. No paramos de verlo en las sillas de oficina. También puede haber poesía sin ergonomía, aunque no creo que debiese comercializarse sino estar en museos como piezas únicas. El diseño es la mezcla de ambas en la proporción que el diseñador lo desee.
Más info: estudio-baltico.com
