Oda a la crisis de los 30 con María (y los Demás)
A lo largo de nuestra vida, hay momentos en los que nos paramos y nos hacemos preguntas existenciales, como hacia dónde vamos y el cómo se plantean las cosas. Muchas de esas preguntas, están mucho tiempo sin respuesta o con conclusiones equivocadas. Estas crisis existenciales aparecen en cada década de nuestra vida y traen verdaderos torbellinos con ellas. María (y los Demás) , dirigida por la directora Nely Reguera, se nos revela como el perfecto manual para superar los 30 y llegar con vida (mental) a los tan temidos 40.
El debut de esta catalana, que sorprendió gratamente en el Festival de Cine de San Sebastián, nos presenta a María, una escritora frustada que trabaja en una librería, y que cuida a su padre enfermo de cáncer. María es la única de toda su familia que permanece al lado de su padre. Todo cambia cuando éste, comienza un romance con una enfermera. En ese preciso instante, algo hace click en la cabeza de María que comienza a plantearse las cosas y el sentido de las mismas.
Orquestada en clave de humor, María (y los Demás) es un film lleno de momentos entrañablemente ácidos y de situaciones muy familiares para todos nosotros.
Bárbara Lennie, construye un personaje cercano, definido y que logra hacernos entrar como espectadores al relato. Su María, muestra a la perfección ese difícil paso que es coger las riendas de la vida adulta.
La madurez es sin duda, el tema principal de este largo debut de Reguera. Los conflictos internos de los personajes de María y su padre, enfrentados por diferencias de opiniones vitales, articulan la película y le dan empaque, apoyándose ese manido dicho, de que difícil es hacerse mayor.
El paisaje espectacular de Galicia, actúa como telón de fondo y nos hace imbuirnos de lleno en la historia.
Las largas conversaciones costumbristas, son deliciosas y consiguen llevarnos de nuevo, a las obras de los mejores creadores de nuestro cine.
María (y los Demás), es la inmejorable carta de presentación, de una directora a tener en cuenta, y que sin duda, se convertirá en la nueva voz cinematográfica de esta generación millennial.
