Pop, disco y funky. Estos son los principales elementos de Woman, el esperado nuevo trabajo del dúo francés, que ha dejado a un lado sus raíces techno para deslumbrar con un disco más soleado, elaborado y, por encima de todo, bailable. Porque, como Xavier de Rosnay nos explica, nueve años después del que fuera su debut internacional con el single ‘D.A.N.C.E’, que la gente lo pase bien con su música sigue siendo la única premisa de la banda.
Woman: “Es cierto que el nombre no corresponde a ninguno de los temas del álbum, pero nos gustaba porque es fuerte y poderoso. El concepto de una mujer ya representa esos elementos para nosotros, en parte porque las mujeres tienen la capacidad de crear vida. Así que pensamos que era el nombre perfecto para lo que queríamos hacer”.
Debut con ’Safe And Sound’: “Estábamos en la fiesta de nuestro sello [Ed Banger] en el pasado Sónar y preguntamos si podíamos tocar el nuevo tema. No atendía a ninguna estrategia de marketing ni a ningún motivo en particular, simplemente sucedió así”.
Protagonismo bajo: “Es curioso que remarques la presencia del bajo en Woman. La primera vez que tuvimos una reunión con nuestra discográfica nos dijeron que lo más claro de nuestra identidad era precisamente este instrumento. Puede ser que en este disco esté más presente o se escuche más claro, pero siempre ha formado parte de nuestro estilo y de la música que hemos hecho”.
Evolución: “No podemos dejar atrás lo que hemos hecho antes porque es parte de lo que somos y nos gusta. Así que es normal que esto también se deje ver en este disco. Pero los tiempos cambian, y queríamos experimentar con nuevos instrumentos [como el violín o el acordeón que grabaron con la London Contemporary Orchestra] dentro de una progresión natural”.
Presión: “No pensamos demasiado en el que dirán, entre otras cosas porque no tenemos ni idea de qué esperan de nosotros. Estoy seguro de que mucha de la gente que nos sigue ha escuchado nuestros álbumes completos, pero también que hay una mayoría que solo conoce los singles, y nuestros últimos singles son la cara pop de lo que hacemos… No es que no nos importe lo que el resto opine, es que simplemente no lo sabemos”.
Diseño gráfico: “Somos diseñadores pero ahora hacemos música. Así que es difícil que alguien nos pida un diseño [risas]. Nos gusta supervisar todo el material visual y teníamos una idea del estilo o los colores que queríamos para el artwork de este álbum, pero ni si quiera lo hemos diseñado; para eso hemos confiado en una amiga que conocemos desde hace más de 16 años y que probablemente, a día de hoy, nos conozca mejor que nosotros mismos”.
Símbolo personal: “Esa cruz la diseñamos como logo un día y pensamos que le iba bastante bien a nuestra identidad, pero tampoco sabemos si esto se mantendrá en los próximos álbumes. Ahora mismo no podemos predecir nada”.
Acogida en redes: “Siempre es de agradecer que a la gente le guste lo que haces, especialmente cuando es algo nuevo. Hay una parte de nosotros que inevitablemente se pregunta si a alguien le va a importar lo próximo que saquemos. Aunque al final lo que más nos importa es lo satisfechos que estemos nosotros mismos con el resultado”.
Raíces heavies: “No es que seamos metalheads ni nada parecido. Yo diría que somos más pop, dance o disco, que es de lo que siempre ha bebido nuestra música. Aunque está claro que tenemos un lado algo heavy, en parte porque hemos crecido escuchando a bandas como Nirvana, Motorhead o Prodigy”.
Romain Gavras: “Es un gran amigo y nos encantaría volver a trabajar con él. El único requisito que necesitamos es que lo que produzcamos vaya a ser mejor que [el vídeo de] Stress, y esto sigue siendo difícil de conseguir”.
Stress, crítica social y política: “Si sacásemos un vídeo parecido ahora mismo, estoy convenido de que la gente hablaría de ello un par de días y luego se olvidarían. Vivimos en la cultura de la inmediatez pero realmente no se profundiza en las cosas. Respecto a la política, preferimos no opinar. Hacemos música y es por lo que nos gusta que nos conozcan… Es decir, hay muchas cosas que podríamos decir, pero realmente no nos apetece tomar esa postura”.
Cierre de Fabric: “Siempre es una pérdida el cierre de un negocio, sobre todo para la gente que trabaja allí. Como personas, lamentamos estos hechos pero, como músicos [estuvieron vetados de tocar allí durante diez años] el cierre de Fabric como club o símbolo cultural no significa nada”.
El Grammy: “Siempre está bien que reconozcan tu trabajo pero nos da bastante igual el mundo de las celebs y todo eso. Tener admiradores famosos está bien [Kanye West es fan declarado] y por supuesto ganar un Grammy estuvo genial, pero no es el motivo por el que hacemos las cosas. Preferimos que la gente se sienta identificada con nuestras canciones y, sobre todo, que disfrute con ellas”.