Hablamos con Víctor Ceccato acerca de su proyecto ‘Staying in’, un editorial de moda inspirado en el confinamiento
La situación provocada por el Covid-19 nos ha mantenido confinados en casa durante mucho tiempo. Nadie estaba preparado para esta situación, pero hemos tenido que adaptarnos. Durante semanas nuestros hogares se han convertido en el único espacio a retratar y, precisamente esta situación, ha servido como fuente de inspiración para algunos creativos. Víctor Ceccato nos presenta ‘Staying in’, un editorial de moda inspirado en el confinamiento. El proyecto es una llamada a la creatividad y a la exploración artística, aunque nos veamos limitados por las fronteras de nuestras casas, empleando como localización las diferentes estancias del hogar y despojando de su funcionalidad a diferentes elementos cotidianos.
Editorial de moda inspirado en el confinamiento: Staying in
Fotografía: Andreu G. Furió
Dirección y estilismo: Víctor Ceccato
Diseño de proyecto y asistencia: Joan Casado
Modelo: Rubén Lifante Titos
Foto superior: Corsé de Peter Sposito Studio + Pantalones de Lamner
¿Cómo surgió la idea de crear el editorial ‘Staying in’?
Este proyecto parte de uno de los fenómenos más significativos que hemos vivido la mayoría. Con el Covid-19 nos hemos topado con una reinvención forzosa a la hora de seguir generando proyectos, teniendo que convertir nuestras casas y espacios cotidianos en fuentes de inspiración y lugar de trabajo. A partir de esto me pregunté cómo iba a ser crear contenido desde casa y cómo se iba aplicar a la moda.
Foto superior: Pantalones de D The Brand
¿Quién hay detrás de este proyecto?
Pues hemos trabajado en petit comité, encargándome yo de la dirección creativa y el estilismo, Andreu poniéndose en manos de la cámara y Joan que se ha dedicado al diseño y asistencia del proyecto.
Foto superior: Top de D The Brand + Pantalones de Lamner
¿Cuál es el concepto del editorial? ¿En qué te has inspirado para crearlo?
La idea clave del proyecto parte de la reclusión que hemos vivido con el confinamiento, lo que generó una cuestión acerca de qué sucedía con la moda y las prendas adquiridas durante la cuarentena, ya que no podíamos salir de casa y vestirlas para nuestra actividad social, como hacemos normalmente. De este modo, tras 3 meses encerrado en un mismo lugar, día tras día, me planteé nuevas formas de interactuar con los espacios y elementos cotidianos para desligarlos de la funcionalidad que los caracteriza, dándoles un carácter expositivo y lúdico y así repensar las capacidades de una casa. De hecho, mis fotografías favoritas del proyecto pertenecen a la secuencia en el mueble del salón.
Foto superior: Top de D The Brand + Mascarilla de Daría y María
¿Dónde han sido tomadas las fotografías?
Pretendía continuar con la iniciativa que estaba llevando a cabo por mi parte durante los meses de confinamiento, trabajando con la idea de “moda desde casa”, sólo que ahora construyendo una editorial sólida a partir de la experiencia. Es por ello que decidimos continuar con la premisa de trabajar en casa y aprovechar los espacios resignificándolos, pero esta vez con los elementos necesarios y la intención de elaborar un proyecto definido.
Foto superior: Camisa de Becomely + Botas de New Rock
Como director y también estilista del editorial, ¿cómo ha sido el proceso de selección de las prendas que aparecen en las fotografías?
Desde el primer momento tuve claro que no quería utilizar fast-fashion ni nada que implicara una producción masiva. Sin embargo, ésta fue la única premisa estricta que tuve, todo lo demás fue muy natural, escribí a amigos diseñadores y un par de marcas con mucho potencial que todavía no había visto publicadas en editoriales. De todos modos, este es el Lado B de las fotos, ya que partía de la idea de trabajar con una modelo y preparé el proyecto para ella, aunque cambié de idea y rápidamente adapté y reorganicé el editorial para hacer la sesión con un modelo masculino.
Foto superior: Camisa de Becomely + Bolso de Telfar
Como vemos en uno de los looks del editorial, la mascarilla se ha convertido en un complemento de moda más con innumerables formas y diseños disponibles. ¿En qué otros aspectos crees que está influenciando el Covid-19 en la forma de vestir?
Lo bien cierto es que la mascarilla es una prenda radicalmente nueva que hemos debido admitir en nuestro día a día de forma obligatoria. Sin embargo, ni esta cualidad ni su clara funcionalidad nos impide manipularla y adaptarla a las necesidades estéticas y significativas que requerimos en las prendas que vestimos. Al final siempre intentamos encontrar un equilibrio entre practicidad, belleza e identificación. También creo que haber permanecido tres meses en casa y haber entendido la moda desde estas circunstancias ha hecho que, de algún modo, focalicemos más en nosotros mismos nuestras preferencias estéticas, como si hubiera sido un proceso de desintoxicación de influencias. Tengo la sensación de que hemos aprendido más a vestir para nosotros que para el resto del mundo, algo que siempre ha estado ahí pero que muchas veces se nos olvida, y que me parece sumamente importante.
Foto superior: Camisa de Becomely