Diego Calvo no encaja con ninguno de los estereotipos que pueda acudir a tu mente cuando mencionamos que se trata de un joven hotelero ibicenco. Es más, su aspecto sería más cercano al de un miembro de una banda de Rock and Roll, o el protagonista de una película musical de los años 50, pero ojo, son las apariencias las que engañan. Diego Calvo es el responsable de llevar el rock a Ibiza con su fiesta Rock Nights.
No hace falta más de un minuto para darte cuenta de que estás delante de una mente extremadamente creativa, con un discurso apasionado y una fe inquebrantable en aquello en lo que cree. Y Diego Calvo cree firmemente en las ideas, en las ideas llevadas a cabo con profesionalidad y pasión, y en hacerlo evitando el camino fácil y buscando siempre impactar, enamorar, conseguir una experiencia única para el cliente de sus hoteles. Y lo ha conseguido con sus fiestas de rock en Ibiza: Rock Nights.
Diego Calvo aprendió desde cero los secretos del negocio hotelero y de la música, desempeñando toda clase de cargos en el negocio de la hotelería y el mundo del rock, hasta tener una visión global y precisa de lo que espera el cliente.
La filosofía de Diego Calvo, que es la misma que imprime a sus hoteles de Ibiza y a su fiesta Rock Nights, no es solo ofrecer al cliente aquello que éste espera, sino precisamente sorprenderle con aquello que no se espera. Ir siempre un paso más, dar una última vuelta de tuerca, ofrecer un guiño diferente. No solo es la idea, y la conceptualización, sino los detalles los que marcan la diferencia, y Diego lo sabe bien.
Concept Hotel Group, el emergente y exitoso grupo hotelero que abandera en Ibiza, ha presentado sus cartas desde la primera jugada, y desde el primero de sus hoteles: Lugares originales, con una conceptualización original y cuidadísima, atendiendo hasta el más mínimo detalle, y poniendo el acento en cualquier aspecto diferencial que los puede hacer únicos.
Los pilares sobre los que se erigen los hoteles de Diego Calvo no son solo arquitectónicos, sino conceptuales: Arte, música, diseño, decoración… En cada nuevo proyecto, no se ha hecho más que subir la apuesta e ir un paso más allá en todos los sentidos. Santos, Tropicana, Dorado, Cubanito y Paradiso, cinco hoteles (de momento) que han hecho correr ríos de tinta, decenas de publicaciones, apariciones en TV, editoriales de moda, grabaciones de videoclips y miles de publicaciones en redes sociales, siempre haciendo referencia a su originalidad y carácter único. Puro rock and roll en Ibiza.
Habiendo nacido en Ibiza, ¿cómo surgió tu interés por el rock? Básicamente en el periodo que me empecé a interesar por las chicas del instituto cuando iba a primero de BUP y llevaba melena y camisa a cuadros. En aquella época con los colegas escuchábamos bandas como Nirvana, Offspring o Green Day. Antes de aquello solo recuerdo ver los vinilos de los Beach Boys o los Beatles de mi padre en casa.
¿Cómo se te ocurrió llevar el rock en directo a una isla como Ibiza? Justo antes de empezar con Rock Nights en el 2005 colaboré con Ibiza Rocks cuando empezaron con los directos en Privilege y aquello me fascinó. Y fue a raíz de aquel verano cuando decidí que quería tener mi propia promotora, obviamente todavía había mucho camino que recorrer hasta donde estoy hoy.
Siendo el rock lo underground en Ibiza, ¿Crees que alguna vez se volverá mainstream? Más que lo underground yo diría que es lo original, único o auténtico de hecho Rock Nights que la realizamos semanalmente en el legendario hotel Pikes es la única fiesta rock de la isla. A inicios de los 2000 si que hubo esa oleada de jóvenes británicos y españoles que escuchaban a bandas como Franz Ferdinand o Artic Monkeys y si que aquellos sonidos se podían considerar como mainstream en aquella época pero todo evolucionó hacia el EDM y ahora el reggaetón o el trap aunque yo soy de la opinión que las guitarras no muren nunca, siempre están ahí y es muy posible que venga pronto una oleada de gente que se de cuenta de que lo que realmente suena cojonudo son bandas como The Cult o Stone Roses.
Arriba Diego Calvo, la auténtica rockstar de Ibiza
De todas las bandas que has traído, ¿cuál es tu favorita? En el top 3 por este orden Loquillo, Kitty Daisy and Lewis y Mando Diao.
¿Y cuál te gustaría traer? Me fliparía Royal Blood porque suenan tan heavy que yo creo que solo por un día nuestros altavoces sonarían más fuerte que los de Ushuaia o Bora Bora (risas).
¿Qué tienen en común todas ellas? ¡La guitarra! Sino suenan guitarras no está en nuestros planes.
Porque además de amar el rock, eres un coleccionista de todo lo que sea vintage o retro, ¿por qué? ¿De dónde salen todas tus piezas, rocolas, etc? En la época de la universidad cambié el estilo grunge y me empecé a interesarme por ropa vintage, todo ese mundo me cautivó que era además el que veía en las pelis americanas de los 80 que me gustaban y desde ahí comencé a coleccionar camisas western y hawaianas, actualmente tengo más de 300. También me flipa todo tipo de mobiliario de diseño de los 50, 60, 70 y 80, soy un apasionado del interiorismo y siempre estoy en la búsqueda de piezas originales. Los coches clásicos americanos son mi adicción, tengo un Mustang del 65 y un Cadillac del 54 el cual está en la entrada del hotel Cubanito. Ahora le tengo el ojo puesto al culo de un Corvette del 69 ya veremos si se da la vuelta.
Lo que era tu pasión y tu amor por el rock se ha convertido en tu trabajo, ¿cómo surgió la idea de un hotel de rock? Con Concept Hotel Group explotamos 5 hoteles, cada uno con su propio concepto y propia estética. El tercero de ellos fue Dorado que lo abrimos en el 2016 y la idea era hacer un hotel que rindiera tributo a canciones que habían sido disco de oro pero lo queríamos hacer de una manera muy auténtico. Le pusimos muchísima pasión a este proyecto y hay todo tipo de detalles como fotografía original de Terry Oneil, Mats Baker, Baron Wolman, Gijsbert Hanekroot o mi buen amigo Juan Fajardo con quien haremos su expo este mes el día que toca Sex Museum y que coincide con el 14 aniversario de Rock Nights. Cuando entras en la habitación y pones la tarjeta magnética además de encenderse la luz se enciende un tocadiscos con el single que lleva el nombre de la habitación. Tenemos neveras y altavoces Marshall en las habitaciones, un micro shure en la ducha. En el lobby del hotel una lámpara hecha con platillos paiste y en hall del hotel varias guitarras Gibson con toda una exposición de las bandas que han pasado a tocar con nosotros.
Arriba: Diego Calvo con Ovidi de Los Zigarros en Dorado Ibiza
Y de ahí, ¿cómo acabaste siendo hotelero? Porque parecen dos mundos bastante contrarios. La verdad que a nivel profesional empecé antes con los hoteles que con el mundo de la música rock. Con 17 años ya trabajaba como camarero en un Marriot y lo del rock vino más tarde, había que hacer algo “guay” para gustarle a las chicas. La hotelería siempre me ha apasionado y soy muy afortunado de poder hoy en día unir en un único universo mis dos pasiones. Aunque sean dos mundos contrarios encajan a la perfección porque la gente va a los hoteles a disfrutar igual que va a un concierto a disfrutar también así que el disfrute se puede compartir.
¿Crees que las guitarras están muertas o morirán algún día? ¡Nunca! Yo creo que sonidos como el de una guitarra o una batería están aquí para quedarse siempre. Sin guitarras no hay rock and roll.
Has crecido entre rockeros y has escuchado cientos de historias, ¿cómo crees que se es un buen rockero? Da igual si tocas o no un instrumento lo que realmente importa es la actitud y el rock and roll de eso tiene mucho. Se trata más que de un género musical se trata de un estilo de vida.
Y de todas tus vivencias, ¿qué anécdota puedes contar que no hayas contado ya? Porque has vivido muchas pero has contado muchas también. La que nunca hayas dicho a ningún medio. Ver a Kate Moss en nuestra fiesta Rock Nights y cuando me la presentaron me dio un pico por error después de pasarme una botella de Jack Daniels para beber a morro, hay pocas anécdotas que tenga más rock and roll que esa. Aunque para mí la que más me emocionó fue tener la suite oficial de Loquillo en Dorado y que él viniera personalmente a inaugurarla.
Este 2019 traes a bandas como Carolina Durante, entre otras. ¿Qué te ha llevado a trabajar con ellos? Pues yo la verdad que no los conocía pero me hablaron de ellos amigos de Madrid y Valencia y la verdad que flipé con como lo están pegando. Me encanta que aparezcan bandas emergentes con ese rollo.
Tu BSO actual. ‘Baby Baby‘ de The Vibrators, la letra me tiene enganchado.
Planes para 2019/2020. ¡Hoteles y rock! Sobre todo como objetivo principal poder seguir disfrutando con la misma ilusión tanto con los hoteles como con Rock Nights y poder compartirlo con la gente que me quiere y con mi socio y gran amigo Tallyn Planells que es con quien empecé toda esta movida de los hoteles.
Arriba: Diego Calvo y su genuina estética rockera