Tenemos ya todas las claves para entender el desfile de Dior en Sevilla: un homenaje a la artesanía andaluza y un recuerdo del amor que tenia Monsieur Dior por España.
España prácticamente se detuvo cuando salió la noticia de que se iba a hacer un desfile de Dior en Sevilla y ya vista la pasarela, hay varias cosas que merecen ser comentadas; pero sí en pocas palabras, la colección fue un acierto que mezcla la referencia local con la mirada contemporánea de Maria Grazia Chiuri y nos entrega moda española a la francesa… y funciona de maravilla.
Según Chiuri, el la colección Cruise 23 de Dior pretende “profundizar en las raíces de la artesanía andaluza sin caer en la apropiación de sus códigos más arraigados”
Y así es como fue el desfile de Dior en Sevilla: un homenaje a la artesanía y saber-hacer de la indumentaria andaluza tradicional. Y como se tenía que hacer por todo lo alto, Dior vistió de rosas y claveles la Plaza de España del parque de María Luisa con rosas y claveles rojos… para que no se nos olvide que la Maison estaba de visita.
Imágenes de la colección Cruise 23 de Dior presentada en Sevilla. Descubre más sobre ella aquí.
Esta fijación de la actual directora creativa de Dior por España no es algo nuevo para el discurso de la firma; el mismo Christian Dior ya incorporaba a nuestro país en su ideario cuando presidía su marca. Y fue ese enamoramiento que nos trajo vestidos como el Nuits de Espagne (1954), Soirèe à Toléde (1955) o Bal à Séville (1956) … todo vuelve a sus orígenes, incluso Dior con su sexta colección Cruise.
Miremos ahora las claves para entender el discurso del desfile de Dior en Sevilla; que son pocas, pero esenciales. Estéticamente, la colección Cruise 23 de Dior tiene como foco central de inspiración el traje de sevillana (naturalmente) y el traje de corto masculino con sombrero cordobés… tampoco podía faltar un guiño al mundo de la hípica ni el mantón de Manila; todos elementos centrales del léxico de la indumentaria tradicional andaluza.
Las partes superiores de la colección que vimos en el desfile de Dior en Sevilla beben mucha inspiración de los trajes típicos de sevillana con sus grandes volantes y telas satinadas. También están presentes chaquetillas estilo torero con una gran decoración en brocados, blusas sin hombros… todos elementos clásicos andaluces puestos en contraste con elementos de sastrería clásica (que podrían acercarse también al mundo de la hípica). Y para los amantes del Dior de siempre vimos también una pequeña selección de prendas en denim y una bomber en el clásico Monogram Oblique en rojo (porque nuevas versiones de los iconos de Dior nunca vienen mal).
Como nexo entre las piezas superiores e inferiores vimos varios conjuntos estampados de blusa escotada y falda de volantes en varios colores con motivos tradicionales de la indumentaria tradicional andaluza.
A las partes inferiores, los vestidos y las faldas de volantes fueron los protagonistas de la colección Cruise 23 de Dior; referenciando obviamente al traje de sevillana. Aunque para no perder las costumbres francesas, la colección ofrece una falda corta estampada. Luego vimos el traje de sevillana en toda regla, pero en versión Dior y presentado en cinco colores que conectaban a la firma francesa con nuestra tradición de una manera muy bien lograda. El desfile terminó con tres vestidos estampados en beige y rojo, con motivos referentes a la cultura española y al fuego.
Pasando a los pantalones de la colección que vimos en el desfile de Dior en Sevilla, primaron los pantalones de pinzas de corte alto (referenciando otra vez a elementos de la sastrería clásica). Tuvimos algunos otros modelos sueltos como los ornamentados para el conjunto de inspiración torera, dos vaqueros y algunos de sastre en corte capri. Destaco también que Dior ha resucitado las perneras (conocidas como chaparreras dentro del ideario español) que se unen de una manera bastante orgánica a la temática central de la colección.
Los colores protagonistas de este desfile fueron los típicos que esperamos en un desfile de Dior como blanco, negro, crema y beige puestos a contraste con el rojo que vestía una parte considerable de la colección, el morado nazareno (para mas inri en el tema de referencias a la cultura andaluza) y el dorado de los brocados que adornaban algunas piezas.
El departamento de los accesorios no ofrecía demasiadas opciones, pero si las adecuadas: el sombrero cordobés fue el gran protagonista de este discurso que vimos acompañado en varios looks de un cinturón extra ancho de piel negra (más referencia al mundo hípico). Y si nos preguntamos cuales fueron las texturas que cobraron protagonismo en el desfile de Dior en Sevilla tenemos el encaje, el satén, el terciopelo, y el satén de los espectaculares vestidos de noche.
Lo que vimos en el desfile de Dior en Sevilla fue un acierto (más) para Maria Grazia Chiuri: supo encontrar un mundo arraigado en el ADN de la maison y de su fundador, tomó los elementos más característicos de su ideario y pudo entregar una colección que celebra la tradición desde una perspectiva contemporánea. Si alguien puede convertir algo como el mantón de Manila o el sombrero cordobés es un artículo de verdadero deseo a escala global, esa es Chiuri.
21 de junio de 2022 a las 21:01
Extraordinaria colección , desfile y locación.!