Corte! publica su primer EP homónimo. El ex guitarrista del cuarteto de rock Carrera, crea y descubre tanto su propio camino como su propia voz en este primer lanzamiento.
Corte! es Gonzalo Barbero (Madrid, 1997) y ya formaba parte del cuarteto Carrera. Con ganas de tener su propia voz y crear su propio camino, nace este proyecto en solitario. “Corte!” es su primer EP de cuatro canciones en el que no tiene ningún problema en poner sobre la mesa todas las tribulaciones de la escena y la industria musical actuales. ¿Sus influencias musicales? Desde Talking Heads, Lizzy Mercier hasta Dry Cleaning, pasado por Yves Tumor.
El proyecto en solitario nace de Gonzalo Barbero, ex miembro del cuarteto Carrera
¿Cómo empezaste en la música? ¿En qué momento has querido profesionalizarte?
Empecé a tocar la guitarra con 11 años un verano que casi me quedo ciego de un ojo. Realmente no estudié nunca música y en casa nadie tocaba así que lo de profesionalizarse nunca fue una opción real.
Fui a la universidad como la mayoría de gente de mi generación y le dediqué todo el tiempo posible a la música entre tanto. Todavía me toca hacer malabares entre el curro y escribir y grabar canciones. Por ahora dedicarme de lleno a tocar no es viable.
Antes tenías el proyecto musical de Carrera, ¿qué te empujó a empezar en solitario?
Carrera se sostenía por un esfuerzo en común de las cuatro. No es fácil mantener vivo un proyecto entre trabajos, responsabilidades y sin sello, ni pasta. Decidimos darnos un tiempo, dar los conciertos que nos quedaban y despedirnos.
Había estado haciendo canciones durante meses, demasiado distintas al sonido de la banda. Siempre he grabado en casa y he escrito cosas, lo que me ha faltado ha sido rematarlas y con Corte! lo conseguí. Preparé un dossier, le di un nombre al proyecto y a volar.
Corte! es tu primer proyecto musical en solitario, ¿cuándo empezaste a componer temas?
Llevo escribiendo y canciones mucho tiempo, antes incluso de tener una banda. Cuando tenía 16 años me pateé fiestas de izquierda unida y del PC tocando la guitarra y la armónica. La ironía me perseguía pero yo era mucho más rápido.
Estas cosas a las que nos exponemos los hombres para llamar la atención. Con Corte! intenté componer todo desde la batería y el bajo para evitar al máximo tocar la guitarra. El resto vino un poco solo.
“Una Rata” reflexiona sobre el trepismo, ¿cómo lo sientes y notas en la industria musical?
Más que sobre el trepismo habla sobre abusos y el papel tan fundamental que solemos representar los hombres como cómplices. Que tu colega sea un cerdo nunca es culpa tuya, que le rías las gracias y le encubras porque le conoces bien, es de ser una rata. Los tíos tenemos una habilidad especial para hacer de las peores causas, las más justas a nuestros ojos, perdemos la mira rápido.
A nivel de industria esto es vomitivo, no se libra nadie. No sé si el underground da tan poco de sí que renunciar a cierta gente sería mortal (lo dudo) o simplemente asumimos que vamos a poder tener una escena sana para artistxs y trabajdorxs sin cortar antes un par de cabezas, o doscientas (lo dudo aún más).
En este proyecto eres más honesto, tanto en tu sonido como en tus letras, ¿por qué has querido irte a unos terrenos más “electrónicos”?
Me parece mucho más divertido y se acerca más a la música que escucho ahora. Lo que me gusta del proyecto es poder hacer un poco lo que quiero, es una ventaja a la hora de autoproducirte. Pero sobre todo necesitaba que quien escuchase las canciones se pudiese mover con ellas.
¿Cómo ves la escena musical de ahora para proyectos como Corte!?
Creo que estamos en un momento de transición. Hay ciertos códigos y sonidos que ya están empezando a quedarse obsoletos. El público también está cambiando. Cada vez reconozco a menos gente en los conciertos y eso es maravilloso.
El problema sigue siendo que somos unos aburridos, lo que le falta a la escena es más humor. Estoy un poco harto de himnos generacionales y devastación y generaciones perdidos, chico qué coñazo, si luego nadie mueve el culo y todo el mundo es facha en el indie, no sé de qué nos hablan. Al menos me gustaría que nos riésemos un poco.
Corte! en tres palabras.
Rápido, furioso y ansioso.
¿Planes para el futuro?
Seguir sacando música y que me hagan un contrato indefinido en el curro.
Ilustraciones por Marta Ibanez (@bebepequenito). Fotografías por @superglu__
“Corte!” es el primer EP en solitario del cantante, compositor y productor Gonzalo Barbero y nos lo explica tema a tema y track
1. Track 1 de “Corte!”: “Rata”
Es una canción de desahogo. Una rata es una persona que se queda calladita porque le conviene más seguir mamando que morder. Ratas hay muchísimas pero las de dos patas son las peores. Después de hacer la canción me interesé más por los animales. Me pasé una mañana entera buscándolas en los cuadros del Prado y molestando a todos los guardias y la gente de información.
No encontré ninguna, lo cuál me hizo interesarme aún más por ellas.Al principio era una canción muy distinta y me pasé dos meses cambiando cosas compulsivamente. En los Invernaderos (donde se mezclaron los temas) terminamos de producirla a seis manos entre Jose Doel, Pablo Cuerno (DjHater) y yo.
2. Track 2 de “Corte!”: “Tumbos”
me pasé varias semanas con la primera frase de la canción en la cabeza antes de ponerme a escribirla (no empiezo una y ya estoy en otra, arreglo cosas mientras rompo otras). Me representa bastante como persona nerviosa.
Cuando estoy sentado no paro de mover las piernas, es un defecto de fábrica que pone enferma a algunas personas. Al principio se llamaba siempre lo mismo porque mierda de ciudad ya estaba cogido (homenajes a Kortatu aparte). Está hecha pensando hacia la Puerta del Sol y Cibeles, y sigo pensando que esta ciudad cada vez es más de mierda.
3. Track 3 de “Corte!”: “Lizzy, Te Quiero”
siempre quise hacer una canción con agogós y percusiones y saxos. Un tema de Lizzy Mercier vaya, que es la Lizzy del título. Hice la instrumental en un par de días y grabé las voces en una toma, un poco improvisada. Era la primera vez que hacía algo tan marciano pero me pareció muy divertido, solo me imaginé que era Arturo Valls en una especie de resort paradisíaco bajo los influjos de cosas.
Aproveché unos saxos que había grabado Edu Pons (Bernarda) para otro tema que se quedó en el cajón. Es el puente más extraño que he hecho nunca y del que más orgulloso estoy. El día que terminé de grabarla en casa estaba dando botes en la silla de ganas de escucharlo todo junto. Me hago bastante gracia a mí mismo, es otro defecto fatal.
4. Track 4 de “Corte!”: “Cuerda Huida”
creo que es mi canción favorita de todo el EP. Habla sobre estar con alguien que te gusta mucho, casi como cerrar los ojos e imaginarte en su habitación. Hay varias referencias a Pokemon en el EP, esta es la más obvia, pero me parece una cosa fascinante.
Cuando eres pequeño no piensas mucho en el influjo que tienen las cosas sobre ti, pero cuerda huida me parece uno de esos términos inventados que son capaces de alojarse en tu cerebro y no abandonarte nunca.En el jugo te permite salir de cualquier sitio, estés donde estés. Es un poco lo creo que te hace sentir alguien a quien quieres mucho, la posibilidad de desaparecer durante un rato, recargar y seguir.