El director de cine Daniel Calparsoro vuelve a entretenernos y de manera más que ilegal. Entrevistamos a una de las protas de su nueva película: Adriana Ugarte.
Que se hagan en España películas como Combustión devuelve al espectador más mainstream, su interés por el cine de acción patrio. Tras los pasos de la saga yankee ‘A todo gas’ o ‘Fast & Furious’, si nos ponemos tiquismiquis, la última del director Daniel Calparsoro es de esas películas que en principio no atraen tu mirada a la pantalla, pero que si decides hacerlo te atrapan y mantienen pegado al asiento, como al más entretenido de los niños. Calparsoro da un volantazo de 180º y abandona el Irak de ‘Invasor’, para meterse de lleno en el mundillo de los garajes y las carreras de coches ilegales. Un argumento poco tratado en nuestro país, pero que el cineasta resuelve con gran destreza y toque maestro. La historia nos sitúa en una trama de robos millonarios, mentiras, dobles intenciones y una relación de amor a 2 bandas y que sin llegar a ser una película erótica, como se publicitaba en un primer momento, sí que tiene sus momentos de tórrida acción, gracias a los encuentros de los buenorros Alex González y Adriana Ugarte. María Castro, Christian Mulas y un siempre impecable Alberto Ammann, completan el elenco de actores en este largometraje entretenido y vitalista. Una película que en ningún momento pierde el tono y la acción, que no se deja llevar por esas películas fáciles de ‘usar y tirar’ y todo ello sin perder el trasfondo de la peli en sí: una historia que navega en las profundidades del ser humano, en lo que está bien y lo que está mal, en la ruptura con lo políticamente correcto, un aullido a la vida para retomar la rebeldía que pensábamos perdida con los años. Una actividad que transforma al trío formado por el Mikel de Álex González, como chico bueno y bobo que se convierte en avispado malote, papel cosido a su cuerpo, tanto como a Spiderman el mono rojo de araña; Alberto Ammann, actor que repite con Calparsoro, que despliega sus armas como actor de impecables matíces, en el papel de enérgico jefe de esta banda de maleantes que roban para seguir compitiendo en carreras a espaldas de la ley y una Adriana Ugarte que se desempolva de sus roles en La Señora o El tiempo entre Costuras, con esta femme fatale que provoca tanto la excitación como la ternura, en un público totalmente entregado a la causa. Con ella, tuvimos tiempo de charlar y he aquí las perlitas con las que nos dejó al borde del colapso más obsesivo.
Foto: Jesús Ugalde
¿Qué resaltarías de Combustión? Resaltaría la conciencia de grupo. Era imprescindible estar unidos para que la relación de amor y de perdida fuera real.
¿Cómo ha sido tu experiencia con el intenso y siempre al límite Calparsoro? Mi experiencia con Daniel ha sido muy gratificante. Nunca me ha preguntado tantas veces un director, en el set, si me encontraba a gusto o si sentía frío. Desde el punto de vista profesional, creo que tiene un sentido de la verdad y de transmisión de gran comunicador.
¿Es complicado seguirle el ritmo a Adriana Ugarte? A veces sí. ¡Incluso para mí misma!
En la peli te marcas una especie de triángulo amoroso atípico con Alberto Ammann y Álex González. ¿Qué es para ti el amor a tres bandas? ¿Qué resaltarías de tus escenas con Navas y Mikel? En realidad no es un triángulo amoroso, es una relación que acaba y otra que empieza. Para Ari es duro poner fin a su historia con Navas porque está llena de amor y de expectativas, probablemente hay mas de lo segundo que de lo primero, por eso la irrupción de Mikel funciona como un desenlace inevitable. De las escenas con Navas resaltaría la potencia, una fuerza bruta casi fraternal que une a los dos personajes y de las escenas con Mikel la suavidad, una atracción de la naturaleza que roza lo infantil por su espontaneidad.
¿Cómo ves que el cine español, por fin, se arranque a realizar buenas películas extremas y de acción, en la onda de la saga americana Fast&Furious? Creo que siempre es bueno que el cine español se atreva con otros géneros y si se trata de acción, a las órdenes de Daniel Calparsoro solo va a ser para mejor. De ‘Fast and Furious’ tiene la estética de taller, pero lo esencial de Combustión me parece que es una reflexión acerca del amor.
¿Alguna anécdota durante el rodaje? ¿Anécdota de rodaje? Pues estábamos tan concentrados que no hubo mucho lugar para deslices, pero me llamaba la atencion el hambre que teníamos todos. Cortábamos para comer y ¡nos volvíamos locos!, o igual sólo era yo…
¿Qué te gustaría que salieran pensando de ti los espectadores que fueran a verla? Me gustaría que pasaran un buen rato viendo la peli, que les generara sensaciones, que los personajes les cautivaran y ¡claro!, me encantaría que les gustara mi trabajo…
La Señora, El tiempo entre Costuras…, ahora una femme fatale. ¿Te sentías un poco encasillada? ¿Cómo ha sido el cambio de registro para Combustión? ¡Todo lo contrario! Mi primera peli “Cabeza de Perro”, a la que debo muchas alegrías, es una historia contemporánea y las que le siguen también. Combinar esto con La Señora y El tiempo entre Costuras ha sido muy positivo para mi formación. ¡Todo un regalo! Ponerme en la piel de Ari ha sido muy divertido. Me vuelven loca los tacones de aguja.
¿Para cuándo una vuelta de la Ugarte al teatro? Pues ahora mismo estoy en el Español con Carlos Saura interpretando a la Hermosura, personaje del Gran Teatro del Mundo de Calderón de la Barca. Es muy especial.
¿Qué será lo siguiente? Ahora me dedico a la promocion de Niños Robados y Combustión, dentro de poco de El Tiempo entre Costuras, disfrutar del teatro durante un mes y cerrar un par de proyectos veraniegos.
‘Combustión’ se estrena en cines el 26 de abril