Andrea Serboli y Mateo Colombo llevan casi una década trabajando como socios en su propio estudio de arquitectura en Barcelona. En 2019 reciben en su estudio Colombo & Serboli, proyecto especial con una historia trágica y final feliz.
La familia Klinker (Residentes en California) compraron un apartamento de 75 m2 en el conocido barrio del Borne situado en un impresionante edificio Art Noveau.
María y su familia (Ella es original de Barcelona y diseñadora de interiores) comenzaron a reformar su nuevo refugio estival. A pocas horas de terminar las obras y culminar el proyecto familiar, una explosión de gas dejó todo el espacio destrozado, solo lamentando daños materiales.
Imágenes superiores:Vista desde la puerta de entrada al apartamento y cocina completa con isla central.
Ante esta tragedia, María acudió a Colombo & Serboli para poder recuperar su vivienda, la imposibilidad de poder encargarse ella misma debido a la distancia y un presupuesto bastante mermado, el dúo de arquitectos se pone manos a la obra.
El apartamento se encontraba totalmente ennegrecido y era necesario un trabajo de restauración urgente de los techos de escayola. Para su recuperación han tenido que “sacar” moldes a partir de los restos que habían sobrevivido al incendio.
Imagen superior: Al fondo el balcón que da al exterior de la fachada.
Imagen superior: Escritorio y estanterías realizadas a medida para el proyecto.
Imagen superior: El estudio se integra en la zona central del apartamento.
Imagen superior: Reflejo del salón desde el estudio.
El eje principal de la vivienda conecta el exterior desde el balcón y el salón, hasta la ventana del patio y la entrada al apartamento.La zona central en color-block terracota se convierte en eje de comunicación entre espacios, realizando las funciones de cocina-comedor y estudio.
Otro elemento que vértebra los espacios son los singulares suelos de baldosa hidráulica originales, que tras ser recuperados y pulidos, delimitan las diferentes estancias de la vivienda.
Imagen superior: Esquina con moldura en el salón.
Imagen superior: Vista del salón desde la habitación principal.
Imagen superior: Las molduras recuperadas del incendio.
Imagen superior: Habitación principal con cabecero de obra.
La habitación principal tiene acceso desde el salón y se comunica por una ventana de ojo de buey hacia el estudio. El baño y la habitación para los niños tienen acceso desde el área de la entrada.
Las gamas cromáticas tienen un lugar muy importante en los proyectos de Colombo & Serboli, alejándose del blanco total consiguen crear espacios dinámicos.
Imagen superior: Detalle de la habitación principal.
Imagen superior: Entrada a la habitación infantil.
Imagen superior: La habitación infantil integra el armario aplicando el mismo color al lacado de las puertas.
Imagen superior: El baño continua con el color terracota de la cocina.
Colombo & Serboli han combinado el terracota y el burdeos (para el techo del salón) con una gama de verdes para las habitaciones y sus techos, junto con un color arena que hace de transición, siempre teniendo en cuenta los usos de cada espacio del apartamento Klinker
Cada rincón está estudiado al máximo, para aprovechar cada peculiaridad y destacarla. Como por ejemplo en la habitación principal, aprovechan una pared irregular, consiguiendo crear un cabecero de obra con un hueco lateral a modo de estantería y una repisa superior.
Otro ejemplo es el trabajo en uno de los muebles de la cocina, con un acabado en color arena, se integra en el espacio de la entrada de forma totalmente mimética, ganando espacio de almacenamiento.
Imagen superior: Vista del mueble de cocina integrado en el paso hacia el baño y la habitación infantil.
Un trabajo de perfecta armonía con las necesidades de los dueños y una recuperación total de los elementos singulares dañados para un apartamento de vacaciones único en pleno corazón de Barcelona.
Fotos: Roberto Ruiz
