Estrenamos en exclusiva el video arty de Diamante negro: collage, Caribe, verano, clubs y mucho indie.
¿Está viviendo el indie español una nueva ola? Géneros musicales como el bedroom pop están más en boga que nunca, y el pop ha copado de nuevo la mayoría de los carteles de festivales y conciertos del año pasado y principios de este año 2020, por eso, cuando surgen proyectos como Diamante Negro, no podemos evitar fijarnos en ellos. Diamante Negro son un trío catalán argentino formado por Pol Folguera Gumà (23), Benoit García Fernández (26) y Lucas Méndez Stern (24). Comenzaron como Diamante Negro en el año 2018, y casi de casualidad. Ahora hacen un power pop fresco muy en la honda. Además de estar bastante buenos, tienen talento, y este año publicaron ‘Cortes’, su primer EP con el reputado sello Intromúsica (casa de Dorian, entre muchos otros). Hoy estrenamos en exclusiva su nuevo videoclip del tema ‘Club Caribe’, dirigido por Beatriz Ortiz, en el que de manera metafórica, la resaca y la diversión se juntan con muchos collage y un toque arty muy vanguardista. Hablamos con el trío de power pop para conocer más de qué va este rollo y, sobre todo, conocer a una banda que tiene un miembro como Pol que siempre, siempre, descubre y escucha a las bandas que van a petarlo después.
¿Diamante Negro es por la piedra preciosa o por algo más?
Estábamos mirando nombres para la banda Lucas y Benoît (Pol en ese momento ni siquiera existía, empezó a existir más adelante) cuando un día Benoît, mientras ojeaba un libro titulado ‘Cronología del Siglo XX’, encontró una noticia que decía “Diamante Negro, el torero, ha sido apuñalado” y nos gustó cómo sonaba.
¿Quiénes estáis detrás de Diamante Negro?
Pol a la batería, Benu y Lucas se van turnando guitarra y bajo. La voz solo se atreve a utilizarla Benoît y es casi siempre para gritar.
¿Y cómo nació el proyecto musical?
En 2018 Benoît y Lucas empezamos a hablar de formar un grupo porque teníamos muchas ganas de ser algo más que amigos y qué mejor que empezar un grupo, la relación menos tóxica que existe.
¿Y por qué tocar juntos en una banda?
Luego decidimos que necesitábamos completar la paleta de colores y siendo Lucas rubio y Benoît moreno, nos hacía falta un pelirrojo y coincidió que además Pol toca (muy bien) la batería y nos gustaban las mismas cosas como por ejemplo fumar y beber zumo de naranja.
Hoy estrenáis ‘Club Caribe’, ¿qué queríais contar con este videoclip?
Tuvimos una reunión con Beatriz Ortiz, quien se ocupó de hacer todo el vídeo (escáner de las fotos, bordado y animaciones y montaje) y concretamos que queríamos algo visualmente potente que explicara el proceso de la destrucción y creación, en este caso a través de la borrachera y consecuente resaca. El proceso creativo lo entregamos completamente a Bea, que tuvo que lidiar con nuestra falta de responsabilidad afrontando el videoclip sin directrices. Este videoclip es fruto de su esfuerzo y por eso cada foto utilizada y cada elemento incorporado expresan exactamente lo que queríamos: la incomodidad de la resaca y la diversión de la borrachera, siendo la incomodidad y la diversión dos elementos que también nos acompañan durante nuestras vidas. Ella lo ha dirigido y montado, todo ella sola.
¿Y qué nos podría decir Beatriz Ortiz de este trabajo?
Le he preguntado y me ha dicho esto: “Quería proponer una mirada caótica y casi ininteligible a la génesis y a la destrucción de todo para que la gente vomitara viéndolo, igual que vosotros (Diamante Negro) vomitáis vuestras canciones”.
Beatriz Ortiz, directora del videoclip explica: “Quería proponer una mirada caótica y casi ininteligible a la génesis y a la destrucción de todo para que la gente vomitara viéndolo, igual que vosotros (Diamante Negro) vomitáis vuestras canciones”.
¿En qué escena musical veis a Diamante Negro?
En la que estamos pero con más medios (económicos por parte de los ayuntamientos para que la cultura no entre en fase 0). Guiño y codazo sr. Rodríguez Uribes.
¿Creéis que sigue existiendo una escena musical como tal?
Mientras existan grandes discográficas buitre existirán escenas underground que las cuestionen, por suerte. Pero, ¿qué es eso de “UNA” escena musical? Benoît añade que el individualismo nos ha abocado a la introspección y hasta que no creemos un vínculo grupal sano no será posible establecer una escena musical. Como mucho las ciudades acaban teniendo algo de comunidad porque coinciden amigos músicos y artistas, como es nuestros caso, pero no como para llamarlo escena. De lo que estamos seguros es de que cuando la existencia de escenas venda va a haber muchas más y resultará que incluso C.Tangana va a tener amigos y todo.
Hasta 2021 no va a haber festivales ni conciertos, cómo creéis que va a desarrollarse toda la escena cultural musical hasta entonces?
No tenemos la misma bola de cristal, pero esperemos que sí los haya, sobretodo teniendo en cuenta que tenemos conciertos programados. De todas formas, lo que está claro es que de aquí a septiembre bailaremos sentados y haremos pogos con el aire. Y por desgracia por el camino irán cayendo salas de pequeño formato y propuestas culturales independientes que nutren el underground de cada ciudad. Para evitarlo está habiendo donaciones, así que donad.
¿Y qué etiqueta musical sentís que os identifica más?
Power pop o el rock alternativo de los 90’s. Si tuviéramos que generar uno sería pop agresivo de color y dolor.
¿Con quién os gustaría colaborar?
No doubts here, Mujeres o Power Burkas a nivel local. Así a nivel internacional algo loco rollo 100 gecs, Mura Masa. También estamos a la espera de que Pol conteste con un grupo danés que conoció durante su estancia en Copenhague.
Pol: Ok, Dan Carey, pero no es ni grupo ni danés. O ya puestos a soñar, con los puto Parquet Courts.
Vuestra BSO actual. Lucas: Her’s.
Benoît: mi propia playlist de canciones italianas, se llama Addirittura, aquí tenéis el enlace.
Pol: Ahora mismo estoy escuchando Greyed Rainbow de Telstar Drugs.