Gintas y Dovi o Dovi y Gintas son un pareja tan supercute como sus nombres. El pasado verano abrieron la coctelería Savas en Lavapiés. Es un pequeño espacio, sin nombre ni carteles, camuflado en una pequeña calle del centro de Madrid. Hemos ido y aquí te lo contamos.
Gintas es ingeniero y Dovi economista, procedentes de Lituania, forman un dueto en lo personal y en lo profesional. Llegaron a España hace más de 10 años, y por casualidades de la vida, terminaron trabajando en el restaurante madrileño Sudestada. Lo que empezó siendo para Dovi un trabajo de camarera, terminó hechizándola, hasta conseguir que diese un giro a su carrera profesional que la llevó a convertirse en sommelier. Pero la magia no acabó aquí, Gintas llegó incluso a derribar la política del local de no contratar parejas, y sucumbiendo a sus encantos, no pudieron resistirse a incorporarle a su equipo. Pero esto es algo que solo entiendes cuando los conoces y descubres el gran equipo que hacen.
Llevaban tiempo queriendo montar su propio local, y como quien saca un conejo de la chistera, sus amigos de cervezas La Virgen les comentaron que cambiaban de ubicación, dejando libre su local de la calle de la Sombrerería. No dudaron y se lanzaron. Así nació la coctelería Savas (cuyo significado es “cerca de ti”, “el nuestro”, “casero”).
Este pequeño local es ya un secreto a voces. Camuflado en la Calle de la Sombrerería, 3, su fachada no tiene cartel ni ningún tipo de señalización, y aunque hasta hace muy poco quien sabía de Savas era porque conocía a alguien que había estado, ahora, lo difícil es no haber oído hablar de él.
La coctelería Savas es pequeña, limpia, sencilla pero no simple, con poca decoración y una música atractiva al volumen perfecto para disfrutar de una conversación sin necesidad de gritar.
En Sudestada el cóctel icónico de Gintas y Dovi era la caipirinha, sin embargo, cuando les preguntamos cuál es ahora en Savas su “niño mimado”, nos responden que todos, aunque el Tom Collins parece que es al que más cariño le ha cogido el público.
Entre los cócteles que probamos también estaba el Bloody Mary. Antes de ofrecérnoslo, nos preguntaron por nuestra tolerancia al picante, y es que esta delicia puede ser arriesgada para sensibles al picante. Personalmente, me recordó al “chiliguaro” de Costa Rica.
Imagen superior: Tom Collins en la coctelería Savas
En Savas cuentan con 11 cócteles, más los clásicos y adaptaciones que pueden hacerte de manera individualizada, según tus gustos y personalidad. Cada cóctel tiene un toque el toque personal de Gintas, y muchos de ellos se han desarrollado pensando en su gente, como el Polsky Fizz o el White Russian. Disfrutar de estas elaboraciones es conocer de manera indirecta a esta pareja tan adorable como genuina.
Imagen superior: Bloody Mary en la coctelería Savas
Si no quieres cócteles, tú te lo pierdes, pero también cuentan con opción de cerveza, por supuesto de La Virgen, algún vino, limonadas… y si lo tuyo es un refresco… únicamente Coca Cola.
El buen sabor de boca que nos llevábamos con sus combinaciones, se intensifica cuando les preguntamos por el horario y nos comentan que su día de cierre son los martes: “Abrimos los lunes para que nuestros compañeros hosteleros tengan a donde ir”.
Tienen muchos planes e ideas para Savas, como incluir platos con productos lituanos, un DJ los domingos por la tarde (¿Te imaginas un paseíto por el rastro y terminar con unos cócteles en Savas?) o ampliar la oferta de la carta líquida con vinos de Jerez.
Y aquí, sin que nadie se entere, para mí, el gran Savas, siempre será Gintas y Dovi o Dovi y Gintas.
Fotografías de Camille Belmonte
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Coctelería Savas
C/ de la Sombrerería, 3, Madrid (Lavapiés)
Horario: Lunes, miércoles, jueves, 18:00-02:00 h.
Viernes y sábado hasta las 2:30 h; domingo 16:00-22:00 h.
IG: @savasbarmad
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