CHANEL ARTESANOS, DESFILE ALTA COSTURA PRIMAVERA VERANO 2009
El desfile Alta Costura de Chanel es todo un alegato a las históricas señas de identidad de la firma: El blanco y el trabajo artesanal. La firma nos recuerda cómo, en agosto de 1929, Gabrielle Chanel acude al entierro de Serge de Diaghilev totalmente vestida de blanco. Estos son algunos de sus testimonios en defensa del blanco: “Si una mujer envejece, que se vista de blanco… El blanco lo borra todo” o “las mujeres piensan en todos los colores, menos en la ausencia de color. He dicho que el negro lo aguantaba todo. El blanco también. Son de una belleza absoluta. Son la combinación perfecta. Pongan a las mujeres de blanco o de negro en un baile: ya solo se les ve a ellas”. Y así podemos resumir la apuesta cromática de Chanel: Blanco, sobre todo, y negro.
Aparte del blanco, la obligada reivindicación a los talleres artesanos de los que se nutre la Alta Costura y a los que Chanel habitualmente rinde homenaje en sus colecciones. El taller de Lemarié, conocido por sus trabajos con plumas, trabajó en 8 modelos de la colección: flores, hojas y pétalos aplicados sobre los conjuntos de algunos modelos; chorreras y volantes armados sobre mangas, cuellos y contornos; plegados de satén de seda. Además realizó 8 modelos de tocados confeccionados en muselina, organdí o satén de seda representando pétalos, plumas y formas animales y vegetales. Cada uno representa unas 15 horas de trabajo manual.
El taller de Lesage trabajó en los encajes y lentejuelas de 15 modelos, bordando flores y hojas. Una blusa de lentejuelas de plástico y aros de charol equivales a 400 horas de trabajo; un vestido totalmente bordado, 700 horas; un vestido de percalina blanca bordada de perlas, lentejuelas y cintas de hojas y flores, 800 horas.
Massaro fue el zapatero encargado del calzado. Un modelo único con 8 acabados. La peluquería la gestionó el japonés Katsuya Kamo. Todo, hasta el decorado parece reivindicar el trabajo artesanal, las manualidades, el tacto y la textura del papel. No solo se forraron las columnas del Grand Palais de juegos papirofléxicos, sino que incluso muchos de los vestidos daban la impresión de estar hechos a partir de un catálogo de papel de alta gama.
Fotos: Estrop / Carles Cubos
8 de marzo de 2011 a las 7:54
me urge conocer el numero telefonico y contactar ese gran artista del origami,o lo que sea; me encantaria adornar asi para mi boda que sera el proximo año.