La Fundació Antoni Tàpies presenta “Cada quien, un universo”, una instalación site-specific de la artista japonesa Chiharu Shiota. Hasta el 23 de junio, adentrense en este universo color escarlata.
Vi la primera vez el trabajo Chiharu Shiota en el pabellón japonés de la bienal de Venecia de 2015. Allí nos encontramos con una maraña de hilos rojos y llaves sobre un bote de madera, donde los visitantes nos sentimos como caminar alrededor de un océano de memorias. Si la primera vez asombra, las sucesivas siempre son visualmente impresionantes. En “Cada quien, un universo”, la artista invita a reflexionar sobre la vida, la muerte y la memoria.
La exposición ofrece una inmersión en el intrigante mundo de Chiharu Shiota. Japonesa afincada en Berlín, Shiota fusiona la escultura, la instalación y la performance. Con su trabajo explora temas universales y dicotómicos como las duplas vida-muerte o eros-thanatos. Para la instalación realizada ad-hoc para la Fundació Antoni Tàpies han trabajado 10 personas durante 15 días. Un proyecto comisariado por la nueva directora de la institución Imma Prieto, es además es una oportunidad única para contemplar la obra de esta influyente creadora en un diálogo íntimo con la arquitectura del lugar.
Instalación y temáticas
Chiharu Shiota transforma los espacios expositivos de la Tapies con una instalación que invita a una profunda reflexión sobre la existencia y la conexión entre presente y pasado. La relación simbólica entre su obra y la de Antoni Tàpies se despliega en un doble sentido, físico y conceptual, revelando paralelismos sorprendentes entre dos visiones artísticas aparentemente dispares. La reivindicación del vínculo con la tierra, el pasado y la memoria, así como el intercambio entre presencia y ausencia, son temas recurrentes que permiten a Shiota tejer una lectura evocadora del pasado desde la contemporaneidad.
Los hilos rojos para Chiharu Shiota
La exposición trabaja con la memoria, el objeto y el cuerpo. Y propone al espectador un viaje introspectivo donde cada hilo y objeto despierta emociones profundas y reflexiones sobre la existencia humana. Para Chiharu Shiota los hilos rojos son una representación del micro-universo de la circulación sanguínea en nuestros cuerpos. Así como en su sentido más literal, también hacen visibles las conexiones entre las personas. Su obra fusiona el macrocosmos y el microcosmos, buscando mantener un sentido de orden y equilibrio. Se presentan contrastes como sueño y realidad, interior y exterior, o el que ya hemos indicado arriba, vida y muerte, en un intento de encontrar puntos intermedios.
Inspiración y trayectoria
Nacida en Osaka en 1972, Chiharu Shiota ha sido influenciada por sus experiencias personales, incluida su enfermedad de cáncer en 2005. Su situación personal la llevaron a explorar la fragilidad y la transitoriedad de la vida a través de su arte. Su obra, que abarca desde instalaciones masivas hasta esculturas y performances, refleja una profunda reflexión sobre la condición humana y la memoria colectiva. Shiota encuentra inspiración en artistas como Magdalena Abakanowicz y Ana Mendieta, cuyo legado ha dejado una huella imborrable en su enfoque artístico.
“Chiharu Shiota. Cada quien, un universo” es más que una exposición; es un testimonio de la capacidad del arte para trascender el tiempo y el espacio, y para provocar un diálogo interno sobre nuestra propia mortalidad y conexión con el cosmos. La obra de Chiharu Shiota nos hace reflexionar sobre nuestras experiencias individuales y colectivas, recordándonos la belleza y la fragilidad de la vida en un mundo marcado por la incertidumbre y la transitoriedad.
“Chiharu Shiota. Cada quien, un universo”
Hasta el 23.06.2024 en la Fundació Antoni Tàpies de Barcelona, + info aquí.
