BEATRIZ  MILHAZES

HASTA EL 21 DE JUNIO ES POSIBLE INGRESAR AL TROPICALISMO SENSUAL DE BEATRIZ MILHAZES EN LA FUNDACIÓN CARTIER DE PARIS.
Las pinturas ornamentales y brillantes de Beatriz Milhazes parecen dialogar con los juegos decorativos, artesanales y barrocos de su Brasil natal. Pero también con aquellos artistas para quienes la superficie pictórica funciona a modo de pentagrama abstracto, donde las formas circulares y la superposición de líneas rectas ofrecen no solo intensidad visual sino un patrón de movimiento. Los arabescos geométricos de Milhazes, que van del fucsia al oro, se acercan a unos delicados paisajes tropicales, donde las flores, los follajes y la exuberante vegetación lo ocupa todo. Lienzos de gran escala que funcionan como collages, donde la artista coloca envoltorios de dulces y chocolates y en los últimos tiempos cortes de vinilo. Diversas de estos entramados conforman la instalación que cubre la fachada de la Fundación Cartier, la cual junto a una selección de pinturas de gran formato protagonizan esta exposición. Superposiciones no solo de tramas de color sino de estructuras reticulares: lo que vemos en las pinturas Milhazes es el resultado de una suma de procesos y accidentes. Como si de un caos naturalista se tratara estos palimpsestos nos ubican en el interior de un jardín tropical. Aquí todo huele a vegetación y a capullos de flores.

Hasta el 21 de Junio, Fundación Cartier, París

BEATRIZ  MILHAZES

BEATRIZ  MILHAZES