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Hace un tiempo, unos muchachos de Canadá facturaban uno de los mejores discos de la música pasada, actual y futura. Cantando a la muerte y a las despedidas, Funeral cambió todo y en cierta parte, marcó el camino y el éxito de sus creadores.
Tras grabar en una iglesia, charlar sobre los suburbios y volver a la mitología clasica con Orfeo y Eurídice, Arcade Fire lo quieren todo ahora. Su último largo Everything Now, incomprendido por buena parte de su público y de la crítica como cada uno de los lanzamientos, canta sobre la inmediatez de la sociedad y los caprichos consumistas en los que cada día caemos. Un viaje por el presente y un futuro de lo más oscuro.
Sin duda, Arcade Fire se renuevan en cada disco y en cada gira. Todo lo que facturan tiene ese aroma a innovación, pero sin olvidar las raíces y la herencia. Eso si, transformando y aprehendiendo todas y cada una de las claves para seguir siendo absolutamente modernos.
Para presentar este último LP, los canadienses han ideado una gira de lo más especial con una puesta en escena brutal. No os quitaremos la magia del directo y el factor sorpresa. Sólo os preguntamos ¿creéis que posible tocar en un ring en el centro de un pabellón?. Sacad vuestras propias conclusiones.
El 21 de abril en el Palau Sant Jordi de Barcelona y el 24 en el WiZink Center de Madrid, podréis comprobar porque Arcade Fire era la banda favorita de Bowie y porque, no es que quieran todo ahora, es que ya lo tienen. Talento, canciones atemporales y toneladas de estilo y magnetismo. ¿Qué más le podemos pedir a la música actual? Con Arcade Fire vamos sobrados.
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