Andrea Crespo y el Monstruo en Kraupa-Tuskany Zeidler

Kraupa-Tuskany Zeidler presenta la exposición de Andrea Crespo Step Right Up en Berlín del 25 de enero al 2 de marzo, 2019. He de decirte que me parece una exposición particularmente buena en lo que respecta a la tesis sobre la que la artista trabaja. Se trata de un conjunto de obras que le ponen rostro a un concepto actual y muy adaptado a los tiempos en los que nos encontramos: la idea del monstruo moderno (ref: leer artículo El monstruo moderno); la idea de la figura del freak, de su renovado éxito en los medios y en el arte, por qué éste juega un papel tan singular en nuestra sociedad, cuál es y cuáles son sus orígenes contemporáneos.

Como reflejo, respuesta, mimesis o antítesis de la sociedad y la cultura de masas, los/las artistas hablan de éste monstruo, cada vez mas lo imitan y lo representan en sus videos, sus cuadros y sus instalaciones. Está en sus posts, en su manera de retratarse en su perfil del instagram y a través de sus obras. Se caracterizan del freak en sus performances y apuntalan su idealización, su ascensión a la categoría de divino. Incluso cuando no lo vemos en sus trabajos de forma explicita están allí, escondidos entre las piezas de la exposición como un subtexto, agazapados entre la maleza de la galería. Yo lo comprendo y contribuyo a ello, por supuesto.  Este monstruo es la Incertidumbre. También es la exaltación de la deformidad humana y la referencia plástica al cuerpo no normativo. Con lo que se está tratando es con el nuevo Doppelgänger, la nueva idea de lo sublime (influenciada por nuestra reeducada cultura visual y contexto social), lo sobrehumano que hay en nosotros y al mismo tiempo aquello sagrado, desconocido o temible, con todas las ramificaciones que esto tiene en los ámbito de lo político, jurídico, lúdico, afectivo e intimo. El nuevo freak conecta con nuestros horrores y nuestras pasiones profundas: es Cronenberg, es Yorgos Lanthimos, es Jake y Dinos Chapman, es Ivana Basic, es  Zsofia Keresztes, es Anna Uddenberg.

Es un tema al que me aproximo en mis artículos en Neo2. En cierto modo, se trata como digo de una tesis actual interesante, un recuso, una urgencia, una figura hermosa que me parece conveniente que sea abordada con un discurso razonado, como es el caso de ésta exposición, por que a veces se hace con ligereza y con excesiva intensidad y no tanto sustento (la canitad de imagenes en las redes es abrumadora por momentos). A continuación podeis leer un fragmento del interesante texto de Andrea Crespo publicado por Kraupa-Tuskany Zeidler para su exposición:

Hay un elefante en la habitación y nadie está hablando. Nuestros imaginarios están obsesionados con los espectros de antaño, nuestra sensibilidad moldeada por ellos tanto como por la reacción contra ellos. Sin embargo, en muchos aspectos han regresado, “reconfigurados” y adaptados a nuestros tiempos (Stulman Dennett, 141). Hablo de “espectáculos freak” y de la figura histórica artificial que han creado a través de las prácticas de entretenimiento,  el “estados de ánimo” y las “presentaciones estilizadas”. El ofensivamente denominado “freak” (Bogdan, 35), no el “fenómeno de la naturaleza”, sino el “fenómeno de la cultura”; es un insulto peyorativo no apto para describir a un solo ser humano en este planeta, sino más bien una figura histórica que se proyecta sobre ciertas personas que se encuentran alejadas a lo largo de diversos ejes de diferencias corporales, psicológicas y de comportamiento (Garland Thomson, Prefacio y Agradecimientos XVII). Esta clase de lenguaje sin embargo no se usa a menudo en los espectáculos de las últimas décadas, excepto por algunas de sus manifestaciones. De hecho, lo que los ha hecho encajar cómodamente en los paisajes mediáticos contemporáneos es su inflexión a menudo desinfectada y humanista; La forma en que combinan lo virtuoso con lo vicioso.

Pero, ¿cómo hemos llegado a este punto, particularmente en los Estados Unidos, donde muchas de estas prácticas modernas han sido facilitadas para las masas? Después de todo, los “freak shows” del siglo XIX y principios del XX se habían extinguido después de la Segunda Guerra Mundial. En ese momento, el público había decidido que esa forma de entretenimiento era de “mal gusto”,  incluso descaradamente inmoral, a pesar de las afirmaciones de la industria de que los espectáculos tenían valor un educativo y moral (lo que los hacía, en cierto sentido, precursores de El “entretenimiento escolar” de hoy). El consumo masivo de la televisión solo ha servido para acelerar el declive cultural del “espectáculo anormal”. En última instancia, como resultado de estos cambios en la opinión pública y en la tecnología, los museos de diez centavos cerrados en todo el país y los circos viajeros modificaron sus espectáculos para excluir los “espectáculos anormales” (Garland Thomson, Introducción 11).

[…] No sabemos hacia dónde se dirigen estas tendencias o si desaparecerán y cuándo lo harían; y de hacerlo, cuando reaparecerían de nuevo una y otra vez ya que cuentan con tiempo para ello. Lo que es seguro es que su persistencia en el presente, incluso en una época de “corrección política”, habla de hábitos culturales profundamente arraigados, si no de la humanidad misma. Tal vez estas tendencias hablen de nuestro impulso humano de mirar fijamente y de ir más allá, de mirar a las personas que rompen con las expectativas sobre el cuerpo, la mente y el comportamiento; un intercambio que puede ser una oportunidad para relacionar y crear significado (Garland Thomson, Staring 3, 14). En su nivel más bajo, nuestras miradas y el consumo de “monstruosidad” revelan nuestras tendencias más básicas y carnales de mirar para obtener placer ilícito o ser crueles con aquellos que consideramos menos dignos de dignidad. Pero tal vez a pesar de eso, revelan nuestro deseo de ver a la humanidad en todas las personas, de buscar la imagen de Dios en cada persona viva a pesar de su caída física o psicológica.

Texto – Andrea Crespo.

[completo en https://k-t-z.com]

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Andrea Crespo. Step Right Up exhibition view at Kraupa-Tuskany Zeidler Gallery, Berlin, 2019. Courtesy of Kraupa-Tuskany Zeidler Gallery and the artist.

Step Right Up
Andrea Crespo
Kraupa-Tuskany Zeidler
26.01.2019–02.03.2019. Berlín

www.k-t-z.com