Diesel vuelve a apostar por el amor
Que Diesel es una marca innovadora, es algo sabido por todos. Desde su creación a finales de los 70, ha roto estándares, tirado por los suelos las normas, y ha demostrado, que el amor por la moda y por el trabajo bien hecho, es lo más constructivo.
El amor y no la ropa, como todos podemos pensar de una marca, ha sido la principal materia prima, que se ha utilizado para crear su última campaña.
Desde hace algunos años, Diesel, vive una etapa más que dulce, con el diseñador ítalo-japonés Nicola Formichetti a los mandos creativos. Y juntando talentos, ha nacido #makelovenotwalls.
Los muros, tanto fisicos como mentales, son armas. Herramientas, que provocan la separación, los prejuicios y el conflicto. En Diesel, nos animan a coger el martillo y derribarlos, y a vivir y respirar libertad. Este es el mensaje de la campaña #makelovenotwalls.
¿Y quién es el artista encargado de realizar este manifiesto al amor?. No podría ser otro que David LaChappelle. Desde su icónica campaña de 1995 con Diesel, en la que aparecían dos marineros besándose apasionadamente, LaChapelle, siempre ha reflejado a la perfección el espíritu reivindicativo e inconformista que define a la marca italiana.
Las fotografías, muestran la utopia de la guerra: una explosión de color y una sensación de libertad, que vuela por toda la instantánea.
La campaña, junto con el tanque que se ve en las fotos, recorrerá alguna de las ciudades más importantes del mundo. Actualmente, se encuentra en Londres, pero también viajará a ciudades como Berlín, Nueva York, Tokio, Milán o Shanghai.
Diesel lo ha vuelto a hacer. Ha convertido su publicidad, en un símbolo de amor y en un golpe para las conciencias. Porque hay que ver más allá y tirar abajo, los muros construidos con ladrillos de intolerancia. Entonces y sólo entonces, podremos ser quienes realmente somos #makelovenotwalls