Absolut nos descubre las múltiples facetas creativas de la noche con #AbsolutNights. Primera entrega: Barcelona
El azul eléctrico de Absolut Vodka tiñó las noches de Barcelona la pasada semana. Dos noches donde la música electrónica, el arte y la tecnología se unían para mostrar una nueva cara de Absolut y la inesperada faceta de creadores de la escena nacional e internacional. Dos noches en los que los perfiles de instagram de lo más granado de la ciudad condal se inundaban de selfies de color índigo y el hashtag #absolutnights.
El pistoletazo de salida se dio realmente el pasado martes, con la celebración de una Warm Up Party que sirvió como calentamiento de lo que viviríamos durante el fin de semana. Un aperitivo para ir abriendo boca ante todo lo que Absolut nos tenía preparado.
Todo cristalizó el pasado jueves, cuando tuvimos la oportunidad de disfrutar del fly, el body y la sabrosura de Maluca. La artista neoyorquina -que hizo que no pudiésemos quitarnos de la cabeza su éxito “El Tigeraso” durante absolutamente un tiempo largo- actuó por primera vez en España junto a los multiétnicos productores de Future Brown. El house cósmico de Hugo Capablanca y Marc Piñol, bajo el nombre C.I.P. y los ritmos de la crew de Discos Paradiso, nos hicieron bailar el resto de la noche.
El plato fuerte del viernes fue la unión entre la cantante Hannah Diamond y el productor A. G. Cook -ambos pertenecientes al sello Británico PC Music- deleitándonos con sus deconstrucciones pop. Siguieron en el programa de festejos, el enfoque experimental y oscuro del dj Pedro Vian, creador del sello Modern Obscure Music y el mano a mano de Guillamino y Jami Bassols, con su proyecto Olde Gods.
Un imponente iceberg de prismas triangulares presidió durante los dos días la Carpa del Poble Español, recordando el facetado que el restiling “Absolut Facet” de la icónica botella de vodka lució para la ocasión. La instalación creada por los colectivos LightNotes y Domestic Data Streamers guardaba en su interior mensaje para cada uno de los que se atrevían a entrar en ella. La obra interactiva de Protopixel y los visuales de Eyesberg Studio, creados especialmente para la ocasión, completaban el espíritu arty de estas noches que también sirvieron para que descubriéramos una nueva visión de nosotros mismos, inspirados por el hipnótico eclecticismo de esta mítica marca.