Vermibus presenta su proyecto Unveiling Beauty, donde cuestiona los cánones de belleza a base de activismo clandestino.
Cuando llega septiembre Nueva York, Londres, Milán y París se convierten sucesivamente en las capitales mundiales de la moda. Sus Fashion Weeks, seguidas por millones de personas en el mundo, transforman la fisonomía de las ciudades en un gran escaparate de imágenes cuidadas al detalle que imponen de manera consciente unos cánones de belleza muy alejados de la realidad. Sin limitarse únicamente a las modelos de pasarela, la publicidad en las calles bombardea a los ciudadanos constantemente con rostros perfectos, contaminando la manera que tenemos de ver el cuerpo humano.
Cuestionar esos patrones de belleza impuestos asi como el papel de la publicidad en nuestras vidas es una constante en el trabajo de Vermibus, un artista español afincado en Berlín que lleva años realizando intervenciones en el espacio urbano con este objetivo. Su último proyecto, “Unveiling Beauty” -del que ya os hablamos en Neo2 hace unos meses– toma como punto de partida las cuatro Fashion Weeks más importantes del mundo. Hasta ellas viajó durante el mes de septiembre, y de manera totalmente clandestina llevó a cabo su actuación: sustituir los carteles de las marquesinas publicitarias por otros modificados por él mismo. En estos pósteres alterados también aparecen chicos y chicas “guapos”, pero con una diferencia: gracias a un tratamiento con disolventes los rostros se deforman, adquieren una apariencia fantasmal que en muchas ocasiones recuerda a los tenebrosos personajes de Francis Bacon.
Ahora toda la intervención se puede ver en un video producido por el propio artista, donde se recoge todo el proceso: desde la elaboración artesanal de las herramientas que servían para abrir la marquesinas hasta las reacciones de los transeúntes ante tales imágenes. Porque si de algo se trata todo el proyecto es de despertar la atención de las personas, tan acostumbradas a la publicidad de cuerpos perfectos. Como se puede ver en el video, los carteles de Vermibus no dejan indiferentes y provocan la reacción esperada: sorpresa, seguida inmediatamente por una imperiosa necesidad de compartirlo en las redes sociales.
Puede que actuaciones como la de Vermibus, por efímeras, no causen un gran impacto a corto plazo, pero si son capaces de despertar el sentido crítico en alguna persona, habrán merecido la pena. Os dejamos con el video.
