LA APUESTA PERSONAL DEL CHEF JOSÉ MARÍA IBÁÑEZ
No es buena hora para hablar de un restaurante como El Gordo de Velázquez, más que nada porque el mediodía se acerca y el estómago empieza a cantar por bulerías, pero allá vamos. Este restaurante, abierto hace solo unos meses, nació gracias a la pasión de la empresaria Carmen Sinovas por la cocina del chef José María Ibáñez. Un cocinero que ha trabajado con Pedro Subijana y que fue director de cocina en Semon, todo un referente de la mejor cocina catalana en Madrid. Carmen decidió apoyar a José María y juntos emprendieron esta nueva aventura que les ha llevado a abrir su propio restaurante en el número 80 de la madrileña calle Velázquez. ¿Y qué es lo que se puede uno encontrar en El Gordo de Velázquez? Primero, un local muy agradable, alegre y acogedor, distribuido en tres alturas, decorado por María Tirado, que ha optado por dejar las paredes de ladrillo visto y falso hormigón combinándolas con un techo de sarmiento y flores liofilizadas, además de un lucernario con plantas y luz naturales en el sótano. También cuentan con una terraza exterior llena de plantas que actúa como una extensión del local. Pero vamos a lo que nos interesa: la comida. Lo bueno, cuando uno pone en marcha su propio negocio, es que vuelca en él toda la ilusión, el esfuerzo, y, en el caso de José María, la experiencia adquirida a lo largo de sus muchos años de trabajo. Así, la carta de El Gordo de Velázquez se apoya en tres puntos básicos: un buen producto, amplia experiencia y un minucioso trabajo de cocina.
Merluza de Cantábrico con centro de espaguetis de calamar y tomatitos
José María Ibáñez ha trasladado a El Gordo algunas de las recetas con las que triunfó en anteriores cocinas, como los canelones trufados y la coca de calabacín y queso de cabra de Semon o el pastel de berenjena de Jockey. Y además, por supuesto, ha aportado un montón de platos nuevos y personales como las lentejas con foie, las albóndigas de ternera en salsa con colmenillas o platos más internacionales como el escalope de ternera picada con especias que es típico de Bolivia. Además de una buena decoración y una buena comida este restaurante tiene otra gran ventaja: un buen precio. Puedes comer muy bien por un precio medio de 30 euros. Y ahora en verano, si quieres además refrescarte con un buen gin tonic, prueba el perfect serve de Jinzu, una ginebra británica que incorpora sake y botánicos japoneses en su composición, y que estos calurosos meses estará presente en las mejores terrazas de la capital. En El Gordo este “Jin Tonic” incorpora polvo de yuzu, sake, infusión de flor de cerezo y un toque de manzana Granny Smith. ¡Que lo disfrutes!
EL Gordo de Velázquez: Velázquez, 80. Teléfono: 91 826 03 23. Horario: de lunes a jueves de 12:00 h. a 24:00 h.; viernes de 12:00 h. a 02:00 h.; sábados y domingo de 13:00 h. a 02:00 h.
Jinzu El Gordo de Velázquez
Pulpo a la brasa con membrillo
Brandada de bacalao con aceite de trufa y tejas de pan
