Thomas Sabo presenta una colección de relojes automáticos para celebrar sus 40 años con los mismos códigos de diseño que nos enamoran de sus joyas.
Esta firma alemana tiene mucho más para ofrecer que solo joyas, y la nueva colección de relojes Thomas Sabo lo confirma. Siguiendo sus mantras de tradición y rebeldía, la marca nos presenta 12 nuevos modelos con mecanismo automático de diseño clásico (pero con un twist muy interesante) que van a brillar en nuestra colección y nuestras muñecas.
40 años se dicen pronto
Si sois fanáticos (y fanáticas) de las joyas, lo más seguro es que os habréis cruzado con los diseños de Thomas Sabo en algún momento. Y si no, es una marca que tenéis que tener en el radar si os va el rollo entre delicado y rockstar. Pero claro, 40 años y una misión clara de hacer los mejores complementos dan mucho juego a la hora de expandir catálogo… y otra cosa que hacen muy bien son sus relojes.
Sus piezas de relojería siguen su mantra de democratizar creaciones con la mejor calidad y materiales para todo el mundo. Porque sí, esto no son solo fashion watches… sus talleres también le prestan muchísima atención a sus construcciones, acabados y mecanismos.
Y para celebrar 40 años de legado, nos llega una nueva colección de relojes Thomas Sabo inspirados en uno de los grandes hits de la relojería de lujo. Pero claro, el twist cañero y rockero de la marca sirve para darle un update al clásico… y tenemos bastantes modelos de dónde elegir.
Los nuevos relojes de Thomas Sabo, para los más rebeldes
La base de la nueva colección de relojes Thomas Sabo es uno con el que, seguramente, todos soñamos. Pero ahora, ese icono de toda la vida se reinventa a través de un lenguaje de diseño mucho más atrevido, con acabados y terminaciones que juegan en esa misma liga: tan clásica como rompedora.
La colección de relojes Thomas Sabo abre con 2 modelos de edición de aniversario. El primero viene con una caja de acero de 41mm, bisel liso y cristal open back. La esfera esqueletada nos permite ver el mecanismo automático Miyota 8N40 con función horaria con segundos independientes. Rematando el look, tenemos indicadores en dorado y un brazalete con grabados típicos de la marca. Y en el lado más delicado, tenemos una versión de 37mm que replica el mismo look, pero con un aire más delicado. Y en vez de ser esqueletado, su dial se remata en nácar blanco con indicadores de brillantes.
El resto de los relojes Thomas Sabo apuesta por el mismo look, pero no tan extras. De igual manera, se ofrecen con cajas de acero en 41 o 37mm, mecanismo japonés con segundero independiente y brazalete de acero. Lo guay de estos otros es que sus esferas mantienen el aire open worked con una pequeña ventana.