La amistad se construye como un edificio, paso a paso. Por eso, en esta conversación con el colectivo Architecture of Friendship se palpa la complicidad.
Es difícil describir la sensibilidad sutilmente ensamblada de proyecto Architecture of Friendship. Compuesto por Santiago Latorre en colaboración con Colin Self, Carlos Maria Romero aka Atabey Mamasita y Nieves Arilla, sus performances son en esencia como un ecosistema donde los entes se entrelazan en una trama de interdependencia.
Imagen de portada: Architecture of Friendship: Santiago Latorre y Colin Self. Foto: Camille Blake
Architecture of Friendship actuando en Sónar Festival 2023. Foto: Leafhopper
“Arquitectura de la amistad” sugiere la construcción de relaciones sólidas, duraderas y significativas entre personas. Evoca la idea de edificar conexiones emocionales y sociales. Así como la creación de un espacio seguro y acogedor donde los individuos pueden compartir experiencias, apoyarse mutuamente y crecer juntos. Architecture of Friendship como metáfora, resalta la importancia de la colaboración, la confianza y el compromiso entre el compositor español Santiago Latorre, el artista multimedia estadounidense Colin Self, la cantante española Nieves Arilla y el performer colombiano Atabey Mamasita.
Architecture of Friendship: Santiago Latorre y Colin Self. Foto: Camille Blake
Orígenes de Architecture of Friendship
Durante la conversación entendemos mejor las intenciones del proyecto al remontarnos a sus orígenes en 2016, cuando Santiago, recuperándose de una larga lesión en ambas manos, comenzó a trabajar con sensores para modular sonidos. A partir de ahí se convierte en una experiencia performativa sonora, una reunión de intensidades que explora las intrincadas complejidades del amor compañero. Esta arquitectura musical, cuidadosamente organizada con sensores, voces, luces, movimientos, sonidos, imágenes y vibraciones, se integra con su entorno de manera orgánica, casi como una cabaña en el bosque. Además el proyecto resultante difumina los límites de la autoría individual en busca de una firma colectiva, encontrando en la cooperación una dimensión extendida de cuidado.
Architecture of Friendship: Santiago Latorre en Etopia (Zaragoza). Foto: Pedro Anguila
En esta entrevista, indagaremos en los orígenes, las inspiraciones y las aspiraciones que impulsan “Architecture of Friendship”, y desentrañaremos su perspectiva sobre las actuales crisis sociales y ecológicas, presentando la empatía como su antídoto. En última instancia, nos embarcaremos en un viaje que encarna el amor, el cuidado y la colaboración inherentes al arte, la música y la amistad.
Architecture of Friendship: Santiago Latorre y Colin Self. Foto: Camille Blake
El proyecto “Architecture of Friendship” parece ser una colaboración multifacética entre varios artistas. ¿Qué podéis contarnos sobre la génesis de este proyecto?
Architecture of Friendship comenzó en 2016 como una performance de Atabey y Santiago para la Architecture Foundation en Londres, dentro de su serie de encuentros Good Grief, que exploraba temas de pérdida y resurrección en torno a las ramificaciones del reciente referendum del Brexit. En ese momento Santiago estaba recuperándose de una larga lesión en ambas manos que le impedía tocar el saxofón o pasar mucho rato en el ordenador, lo que le llevó a desarrollar un trabajo más basado en la voz y a incorporar la colaboración como elemento central en su trabajo.
Architecture of Friendship: Santiago Latorre y Colin Self. Foto: Camille Blake
Colectividad
¿Vuestra idea es trascender los límites de la autoría individual y fomentar una firma colectiva? ¿Cómo creéis que esta colaboración influye en la experiencia artística y en la percepción del proyecto por parte del público?
AOF se ha ido configurando de forma conjunta, siempre en movimiento, hemos ido entrando y saliendo. Ha habido momentos grupales a cuatro, momentos a duo, a trio y también Santiago solo, que es quién ha mobilizado el proyecto a través de las distintas etapas. Nos inspiran formas sonoras precapitalistas que promulgan otras maneras de relacionarse y estar en el mundo. Nos mueve un interés por una noción de ecosistema que presta atención a las interconexiones. La ecología vista como un camino hacia la colaboración, la simbiosis, la coexistencia, la codependencia.
Architecture of Friendship: Santiago Latorre y Colin Self. Foto: Camille Blake
El laboratorio de sonido
También trascendeis la distancia física porque vivís en países diferentes, ¿cómo es el método de trabajo?
La mayor parte del trabajo creativo ha sido a través de encuentros en el laboratorio de sonido de Etopia en Zaragoza. Es un espacio que Nieves y Santiago coordinan desde hace años y en el que Colin y Atabey habían sido residentes previamente; una especie de estudio de grabación de varias salas abierto a la experimentación, con una gran sala reverberante en la que también hemos podido trabajar las partes de luz y movimiento y los momentos de canto en grupo. Tristemente el laboratorio cierra sus puertas en mayo por decisión municipal y eso va a impedir que se realicen proyectos de este tipo entre otras muchas actividades.
Architecture of Friendship: Santiago Latorre y Colin Self. Foto: Camille Blake
Amo a mis amigos
¡¡¡Que pena!!! Habladnos ahora de este poético nombre, “Architecture of Friendship”, está inspirado en la filósofa alemana Hannah Arendt. ¿Qué influencia tiene esta filosofía en la esencia misma del proyecto y en su manifestación artística?
Pues si, el nombre viene de una cita de Hannah Arendt. Resulta que tras ser acusada de falta de amor por los judíos, siendo ella judia, dijo: “You are quite right. I don’t love any people —neither the French, nor the North American, nor the Jewish, nor the Blacks. I love only my friends (Tiene usted toda la razón. No amo a ningún pueblo: ni a los franceses, ni a los norteamericanos, ni a los judíos, ni a los negros. Sólo amo a mis amigos)”.
La cita de Arendt se puede interpretar como un deseo de movilizar la noción de identidad; ella defiende que sus acciones no están basadas en el amor hacia un pueblo o nación en particular, situándose en una brecha entre varias identidades y fuera de cualquier política identitaria convencional. Esta referencia nos ha servido de guía para atravesar muchos temas, desde los celos en las relaciones de pareja a las comunidades geográficamente próximas que se encuentran separadas por fronteras políticas. Architecture of Friendship es una secuencia de canciones que se ofrece como bisagras para activar y ejercitar la empatía, las conexiones sensibles, para despertar la esperanza y recargar el entusiasmo, quizás incluso para fomentar el cuidado entre lo familiar y lo extraño.
Architecture of Friendship: Santiago Latorre y Nieves Arilla en el Festival Fifty Lab en Bruselas. Foto: Jitse Roels
Ecológia vocal
Tanto Santiago como Colin sufrieron lesiones. ¿Cómo afectó esto a vuestra colaboración? ¿Podríais explicar cómo la lesión de Colin impactaron en la dirección y el enfoque del proyecto?
En 2018 Colin visitó Etopia como residente del programa FUGA. Durante este tiempo, buscaba unir la ecología vocal de XOIR, un proyecto de investigación de canto grupal no utilitario, con una narrativa recurrente del canto como resistencia. Tras la llegada abrupta de una lesión en la columna vertebral, el tiempo de Colin en Etopia cambió hacia un proceso de desaceleración, curación y adhesión atenta a la comunicación kinestésica. El canto como forma de resistencia y cuidado se convirtió en un tema principal en la colaboración.
Architecture of Friendship: Santiago Latorre en el Festival Fifty Lab en Bruselas. Foto: Robin Schraepen
Componer junt+s
El proyecto se sitúa “entre la catarsis emocional del canto grupal y la exuberancia que solo aparece dentro de la parentela queer”. ¿Cómo se manifiestan estas ideas en la experiencia audiovisual del proyecto y cuál es su importancia dentro del contexto más amplio?
Una de las cosas inesperadas y especiales de comenzar a trabajar en la música fue el tipo de alegría y placer extraños que surgieron de este lugar lúdico de componer junt+s, una especie de espacio compartido auténtico donde no nos sentimos ridículos entretejiendo recursos emocionales de la música pop o emo. Fue un alivio poder trabajar sin tener que censurarnos en la colaboración.
Architecture of Friendship. Foto: Camille Blake
Habladnos del sistema “Lucy” creado por Santiago, que permite que el sonido y la luz sean afectados en tiempo real por el movimiento de las manos de los intérpretes, ¿cómo se integra en el proyecto?
Lucy está formado por una cámara de infrarrojos que recoge las posiciones de las articulaciones de los performers y dos ordenadores con MaxMSP y Ableton que procesan los datos. Surgió de la necesidad de interactuar con el ordenador sin estar sentado en una posición fija, debido a las lesiones de Santiago en las manos. El movimiento de los brazos en el aire se utilizaba para modificar el sonido de su voz, recuperando de alguna manera la sensación de tocar un instrumento, al tiempo que servía de terapia. El sistema ha ido evolucionando para incorporar el movimiento de varios performers simultáneamente y en la actualidad gestiona los datos de manera que luz, sonido y movimiento se afectan y se realimentan mutuamente, generando sensaciones de transformación orgánicas en escena.
Architecture of Friendship: Santiago Latorre. Foto: Camille Blake
El álbum
Muy interesante, tengo curiosidad por verlo. Además, el proyecto se presenta como un álbum de música titulado “Architecture of Friendship”. Este incluye colaboraciones con otros artistas como Los arrosecs de la vath d’Aussau y el guitarrista Víctor Herrero. ¿Está inherente esa idea de amistad y colaboración en la música y su producción?
Los arrosecs de la vath d’Aussau son un coro masculino del pirineo francés que canta canciones tradicionales occitanas. Estuvimos visitándoles en Laruns y conviviendo con ellos. Vimos cómo el canto en grupo forma parte de sus vidas de una manera muy cotidiana. También vimos que ocurre en cualquier parte del día, durante la comida o al cocinar. Y muchas canciones hablan de la relación entre ambos lados de la montaña, el lado francés y el español. Las grabaciones que hicimos durante esa visita forman parte del disco y del directo. Es como un testimonio de prácticas musicales que existen para resistir a las lenguas, culturas o fuerzas nacionalistas dominantes.
Architecture of Friendship: Santiago Latorre y Colin Self. Foto: Camille Blake
La escucha
Por cierto, hacéis referencia a la importancia de la escucha como forma de resistencia y estrategia contra los lugares comunes. ¿Cómo se incorpora esta idea en vuestra práctica artística y cómo influye en la interacción con el público durante las presentaciones en vivo?
Una manera son las canciones de procesado vocal con Lucy. Es un instrumento frágil, a menudo impredecible, que dificulta la repetición de estructuras y armonías predefinidas. Por eso es necesario escuchar, adaptarse y reaccionar a lo que va ocurriendo en el momento. Otro ejemplo es “Canto primero”, una improvisación entre Colin, Nieves y Santiago. Nos interesaba que la composición en tiempo real fuera algo que hiciéramos junt+s. Queríamos experimentar llevando la vivacidad emotiva del canto en grupo al Autotune, que en la mayoría de los casos se representa con una voz solista. Hacerlo como un trío se sintió como una interacción más profunda y humana con la voz digitalizada-procesada.
Architecture of Friendship: Colin Self. Foto: Camille Blake
Cuidados y sanación
Y luego viene la idea de cuidados y sanación, tanto a nivel personal como colectivo. ¿Cómo se reflejan estos temas en la música y la narrativa del proyecto?, y ¿hay conexión emocional con el público?
La idea del cuidado ha atravesado todo el proceso de creativo. La manera en la que nos hemos relacionado y hemos respetado las necesidades de l+s demás. A nivel más concreto, hay canciones como “I Want to Face Deception” y “Compresión”, con letra de Atabey, que hablan de momentos en las relaciones que requieren empatizar con la otra persona para avanzar junt+s. “Canto al campo” recoge la letra de una jota aragonesa tradicional y la transforma para hacer un canto de liberación “del campo, del aire, de la espiga del trigo”.
Architecture of Friendship: retratos de Carlos Maria Romero aka Atabey Mamasita. Foto: Pol Rebaque
Cambiando de tercio, ¿cuales son vuestras influencias? ¿O que artistas o referentes (de cualquier disciplina) os inspiran?
Algunos referentes que nos han servido para este proyecto son Pauline Oliveros y su idea de “escucha profunda”. Los “Disintegration Loops” de William Basinski, la relación entre Whitney y Mariah y su canción “When You Believe”. Las tradiciones vocales de Córcega, los cantos gaélicos/paganos, los cantos indígenas del pueblo mapuche de Chile…
Architecture of Friendship: Santiago Latorre y Colin Self. Foto: Camille Blake
Recepción del proyecto
Architecture of Friendship tiene varios formatos, desde presentaciones en festivales y otros eventos, hasta formatos más íntimos. ¿Cómo ha sido recibido el proyecto (por la audiencia y la crítica) en estos diferentes contextos?
En general la respuesta ha sido muy positiva, la gente se emociona, pasa por momentos muy diferentes. Hay quien se queda con las canciones más pop y hay quien disfruta de las partes más experimentales que involucran movimiento y sonidos más abstractos. Suelen decir que es un gusto vernos juntos, que se aprecian las distintas personalidades y la complicidad que hay entre nosotr+s.
Architecture of Friendship. Izquierda: Colin Self y Santiago Latorre. Derecha: Atabey Mamasita y Nieves Arilla. Foto: Pol Rebaque
¿Cómo varía la experiencia dependiendo del entorno en el que se presenta y cómo se adapta a diferentes contextos?
Desde la versión del Festival Wadi en Córdoba, con Santiago solo en medio de un descampado a plena luz del día, hasta la versión más grande que hicimos en el auditorio de Sónar el año pasado, con 5 personas en escena y un sistema de interacción, iluminación y vídeo bastante complejo, hemos estado en salas de museo, una antigua iglesia… Según el contexto nos podemos centrar más en la parte de exploración sonora, o en la parte más visual, o combinar todos esos mundos.
Y para acabar, ¿qué más presentaciones están por venir?
Este próximo 26 de abril estaremos en el auditorio de Condeduque en Madrid. ¡Tenemos muchas ganas de juntarnos de nuevo!
Architecture of Friendship. Foto de familia: de arriba a abajo y de izquierda a derecha: Atabey Mamasita, Nieves Arilla, Santiago Latorre y Colin Self. Foto: Pol Rebaque
Fotos cortesía de Architecture of Friendship.
Toda la info sobre la performance de Architecture of Friendship en el Centro de Cultura Contemporánea Condeduque aquí.