Fotografías para entender la sociedad de la imagen. Más de 180 obras de los últimos 30 años. Influencia de los medios en la construcción personal. Feminismo y crítica social.
En estos tiempos hiperbólicos de la imagen, ¿qué mejor que dedicarle una retrospectiva a una de las artistas que mejor la ha diseccionado, la ha utilizado, ha puesto de manifiesto su ambigua dimensión pasional y ha avisado de los peligros de su monopolio? Estamos hablando, claro está, de Cindy Sherman, cuyo trabajo ya no solo artístico sino sociológico, político y casi ético sobre el reino de lo visual resulta imprescindible para comprender la sociedad contemporánea, con todos sus excesos y sus logros. Así lo ha comprendido el MoMa de Nueva York que, en una exposición que lleva su nombre, ha decidido dedicarle una amplia retrospectiva a la artista presentando más de 180 fotografías que engloban todas sus etapas desde la mitad de los años 70 hasta hoy. Una inmensa trayectoria en la que conviven imágenes que abordan temas tan diversos como la construcción de la identidad social y sexual, las influencias simbólicas de los medios (cine, tele, revistas…) en la definición de uno mismo o la transmisión de las luchas sociales a través de su representación artística. Unos temas que ya aparecen en Untitled Film Stills, su serie de fotografías en blanco y negro de finales de los años 70, en las que Sherman juega con los estereotipos femeninos del cine hollywoodiense de las décadas de los 50-60 o de las películas de autor europeas. Algo parecido, pero aun más radical, lleva a cabo la artista en sus famosos retratos históricos (de finales de los 80) en los que se dedica a subvertir los códigos de los lienzos de la pintura clásica con detalles kitsch o puntos de vista contemporáneos. Unos trabajos en los que Sherman hace a la vez de fotógrafa, estilista, maquilladora o modelo, transformando su cuerpo de manera sorprendente con la ayuda de accesorios, disfraces, pelucas o todo lo que le pueda servir para travestirse. Su último trabajo es una visión artificial y decadentista de la alta burguesía (o lo que queda de aristocracia) que sirve de reflexión irónica y ácida sobre el culto de la imagen y el miedo a envejecer que existe hoy en día.
Hasta el 11 de junio de 2012. MoMa. 11 West 53 Street. Nueva York.
2 de marzo de 2012 a las 17:40
Impresiona bastante….