La cantante Adele regresa con ‘30’. Su nuevo disco resume a la perfección el momento actual de la cantante y compositora británica, a la vez que nos sumerge en los recovecos de su intimidad. Un viaje lleno de melodías atemporales, letras desgarradoras y una de las mejores voces de la música contemporánea.
Adele. A secas. Desde que en 2008, esta británica de voz portentosa, look clásico y canciones cortavenas se coló para siempre en nuestro oídos y en nuestros corazones. ¿Quién no recuerda la primera vez que oyó esa maravilla llamada ‘Chasing Pavements’? Y, en ese momento, el terror. Podría que Adele, como tantos otros, fuese flor de un día. Spoiler que no es spoiler: no pasó. Muchos Grammy’s, ‘Someone Like You’, ‘Hello’ y años después, Adele es considerada la salvadora de la música actual. Y con razón. Es la única capaz de paralizar el mundo cuando saca un single, la única que consigue vender toneladas de discos en formato físicO y la única artista que gusta a niños 9 y a ancianas de 99 años. Ahí es nada.
Hoy es un día para celebrar por los Adelistas del planeta pop. La gran diva vuelve con un álbum de consagración. Un clásico forever.
5 años después de ’25’, Adele trae de vuelta con ’30’ ese pop intimista y a la vez expansivo que le caracteriza. En casi 60 minutos, la cantante y compositora, acompañada de sus colaboradores habituales como Tobias Jesso Jr. y Greg Kurstin, despliega sus alas, ofreciendo una gran variedad de registros, que van desde la balada sonido clásico a la canción pop con toques más vanguardistas. Es un álbum en el que todo se siente nuevo y excitante.
Foto promocional de la cantante y compositora británica
Según vamos adentrándonos en el disco, nos damos cuenta de que las verdaderas protagonistas del conjunto son la intimidad y la emoción. Adele nos da la bienvenida a lo más profundo de sus sentimientos, llevándonos por un camino de aguas turbulentas, en el que, a pesar sentirnos sobrecogidos en muchos momentos, siempre acabamos viendo la luz. La secuencia arranca con la apacible y atmosférica ‘Strangers By Nature’, un tema con sonidos suaves y en línea con el repertorio anterior de Adele. El single ‘Easy on Me’ irrumpe con fuerza, dejando el terreno preparado para una de las canciones clave de este trabajo: ‘Little Love’. La titánica composición de casi 7 minutos sorprende a la vez que impacta. En ella, Adele le habla directamente a su hijo, se disculpa por su divorcio y le profesa su amor eterno de madre. Como bonus, el corte cuenta con secuencias de audio del pequeño y de Adele a lágrima batiente.
Portada del disco “30” de la cantanta y compositora británica
‘Cry Your Heart Out’ es un ejercicio de primer nivel para dejar atrás la ansiedad y los fantasmas. De la depresión es donde surge este trallazo con toques reggae, y que es uno de los puntos de ’30’ que une el sonido marca de la casa con ese rupturismo que introduce en este trabajo la artista. Tomando de nuevo el pop más absoluto como faro de guía, nos encontramos ‘Oh My God’, una de esas canciones que son absolutamente pegadizas, y que amenazan con meterse en nuestro subconsciente para no soltarlo. En la misma linea, y con el sello inconfundible de Max Martin, el sueco hacedor de himnos de la música popular, ‘Can I Get It’.
Adele cantando To Be Loved para sus fans en Instagram
Tras este momento más cercano a la radio fórmula perfecta, Adele vuelve a la sonoridad más contenida en ‘I Drink Wine’. La secuencia prosigue con, el injustamente llamado interludio, ‘All Night Parking’, para dejarnos con Woman Like Me, un eco de Amy Winehouse, cuyo sonido está más que presente como referencia constante en ’30’.
La cantante y compositora británica vestida de Schiaparelli, vía Instagram
La delicada ‘Hold On’, da paso a uno de los temas más especiales y desgarradores del disco. ‘To Be Loved’ es, sin duda, la gema de este álbum. Un gran ejercicio compositivo de la cantante, escrito exactamente en el mismo lugar donde creo ‘When We Were Young’, y que nos abre las entrañas para llevarnos a momentos bellísimos y llenos de dolor y esperanza. No en vano, la propia Adele ha dicho que nunca la interpretará en directo, que ni siquiera es capaz de escucharla. ’30’ cierra con ‘Love Is A Game’, un track que nos lleva de vuelta al Hollywood más clásico, Los Ángeles, nuevo hogar de la artista, y que es un broche de oro perfecto para el disco más sobresaliente de la carrera de Adele.
La foto que subió Adele Laurie Blue Adkins a Instagram el 5 de mayo de 2021, el día de su 33 cumpleaños
Con ’30’, Adele ha conseguido consagrarse como la gran estrella de nuestro tiempo, demostrando que la música no es más que sentimiento, grandes melodías, letras apabullantes y, en esencia, sinceridad y autenticidad. Y ella, de todo eso, va sobrada.