MILES KANE

LOS SESENTA NUNCA MUEREN

¿Pensaban que sin la compañía de Alex Turner el bueno de Miles Kane se comería los mocos? El que fuera alma de The Rascals, ahora por libre, no consigue con “Colour Of The Trap” (Sony) ponernos los pezones como escarpias en modo intermitente tal como hiciera hace tres años junto al líder de Arctic Monkeys en aquel refrito revival que respondía a The Last Shadow Puppets. Pero eso no quita que, más allá de lo disfrutable de sus nuevas composiciones, el británico siga erigiéndose como uno de los mayores revitalizadores del garage, el rock’n’roll y todo aquello que rezume a los dorados sesenta (siempre y cuando Mark Ronson no destile su creatividad). Creyéndose Mark Bolan en “My Fantasy” (con la colaboración de Noel Gallagher), un surfero de las costas californianas cuando llega “Counting Down The Days”, o bien abusando del Hammond con la ayuda de Gruff Rhys (tal como ocurre en “Kingcrawler”), Kane aprueba con nota sin hacer avistar nada nuevo a aquellos conocedores de sus verdaderos fetichismos. Aunque ya advertimos que cuando vuelva a juntarse con Turner (quien aquí contribuye desde la barrera co-escribiendo “Telepathy”)  habrá palabras mayores.