Fue la excusa perfecta para ir a Hábitat Valencia. Sancal organizaba una fiesta en su fábrica de Yecla donde presentaba su nuevo showroom. Un viaje que partía desde la feria del mueble.
Todo empezó a las 3 de la tarde el 18 de septiembre en la Feria del mueble de Valencia: Hábitat. Grupos de colaboradores, prensa y diseñadores esperaban sus respectivos autobuses mientras se relajaban haciendo sesiones de yoga. El objetivo de esta convocatoria era la visita a las nuevas instalaciones de la firma murciana en Yecla.
Ya en Murcia, diferentes grupos recorrieron las diferentes naves donde todo el proceso productivo de Sancal se hace realidad. Un tour hecho para conocer cómo se fabrican sus piezas y también para disfrutar de la gastronomía local de una forma desenfadada y divertida.
La primera parada se hizo en la sección de corte y confección. Un espacio donde se mezclaban maquinas de cortadoras de patrones de última generación con los procesos totalmente artesanos de las cosedoras. De fondo un mural de Agostino Iacurci dedicado al oficio de tejer daba el toque de color a la estancia.
Segunda parada en la zona de pegado y tapizado. Los esqueletos óseos de los iconos de Sancal estaban allí. Vimos desnudas a sus butacas Magnun y Tonella, con sus estructuras forradas de espuma rosa. En las paredes de la nave, un mural gigante que Ricardo Cavolo hizo para Sancal en 2015 por su 40 aniversario.
Mientras se iban presentando las diferentes etapas de producción no faltaban tapas y vinos para alegrar el curso intensivo de producción de una pieza de mobiliario. Al llegar a la zona de mueble auxiliar y lacado, una performance teñida de luz azul utilizaba el lema Be Water my Friend como idea conceptual.
Durante el recorrido los operarios vestían divertidas camisetas con la expresión murciana Púe!!
Por fin llegamos al recién estrenado showroom. Un impresionante espacio de dos plantas con una gran terraza en el que empezó la gran cena y fiesta.
Maniquíes humanos, que descansaban entre el mobiliario expuesto en el showroom, cobraron vida al ritmo de la pegadiza melodía Love is in the air y acompañaron a los asistentes hasta la nueva terraza donde les esperaban suculentas delicatessen y platos típicos de la zona. Entre risas y animadas charlas, los invitados más osados colorearon su piel con efímeros tattoos de los letterings de Marial_Soy.
Por último, el muelle de carga, que el artista Seikon ha transformado en una obra de arte callejera, se convirtió en un improvisado escenario en el que grupo yeclano Parade abrió la pista de baile con un concierto en directo. Un animado Dj continuó con una selección de conocidos temas hasta dejar exhaustos a los últimos en cerrar la fiesta.
La vuelta a Valencia a la 1 de la mañana se hizo algo dura y de la resaca al día siguiente ni hablamos.