Ana Marti nos presenta Muriel, un nuevo editorial de moda con el que, junto a su equipo, ha conseguido trasladarnos al macarrismo de los 2000 con un rollito nomada/feriante que nos pone a tope
Editorial de moda Muriel x Ana Marti
Fotografía: Ana Martínez
Estilismo: Mario Ville
MUAH: Sergio Jimenez
Modelo: Muriel Seiquer
En este nuevo editorial que nos presenta Ana Marti junto a Mario Ville, Sergio Jimenez, y Muriel Selquer, contiene marcas como Cortefiel, C.O.S, J. Canovas, Ursula Mascaro, Guess, Emilio Tucci, Asos, Intimissimi, Wrangler, Camper, Marciano, Venca, Calcedonia y Bershka entre otras…
———
Foto Arriba: Muriel lleva vestido de Guess + Blazer de Emilio Tucci + Botas de Asos + Bra de Intimissimi
———
———
Foto Arriba: Muriel lleva pantalones de Wrangler + Zapatos de Camper + Bikini de Guess
———
———
Foto Arriba: Muriel lleva blazer de Cortefiel + Collar de J. Canovas
———
———
Foto Arriba: Muriel lleva blazer de Cortefiel + Camisa de Marciano + Top de Venca
———
———
Fotos Arriba: Muriel lleva top de Calcedonia + Vestido de Bershka + Collar y pulseras de J. Canovas + Pantalones de Pinko + Sandalias de Venka
———
———
Foto Arriba: Muriel lleva mono de Bershka x Nathy Peluso + Zapatos de Asos
———
———
Fotos Arriba: Muriel lleva Blazer de Cortefiel + Vestido de C.O.S + Collar de J. Canovas + Zapatos de Ursula Mascaró
———
Editorial de moda Muriel x Ana Marti
Este editorial de moda titulado Muriel que nos presenta Ana Martin, Mario Ville y Sergio Jimenez nos traslada a esta España profunda y costumbrista a través del escenario: La feria. Un fenómeno social y cultural del que quizás nunca nos hemos planteado el origen… Los pequeños “parque de atracciones móviles” no son más que una evolución de lo que comenzó bajo el nombre de “Ferias periódicas” en la Edad Media o “Jardines de Recreo” en el siglo XVII. Como en la actualidad, eran lugares de entretenimiento del gran público y en ellos se podía disfrutar de actuaciones acrobáticas y malabarismos. Eso poco a poco evolucionó convirtiéndose en el amasijo de grandes estructuras metálicas en la que niños y no tan niños disfrutan en las fiestas de provincia. Una costumbre que muchos rechazan o ven marginal mientras que otros, como yo, consideran que han pasado a ser algo significativo e histórico de nuestro país pudiendo incluso identificar una estética especifica a este “movimiento”.