Peliculón Made In Spain
Siempre se critica al cine español por intentar hacer cine como el de fuera, como el hollywoodiense, perdiendo su identidad para intentar jugar a un juego para el que no está capacitado, una liga que le queda grande. Pero de un tiempo a esta parte, desde que las cadenas privadas, Mediaset y Atresmedia, han querido apostar por el cine a lo bestia, a las maneras de Hollywood, con cientos de millones en promoción (acoso, diría yo), las cosas han cambiado. Se ha creado industria, se está arrasando en taquilla, y se están haciendo peliculones. La pasta gansa ha llegado para demostrar que sí hay talento y que estamos empezando a hacer bien las cosas.
Francisco Paesa (Eduard Fernández), ex agente secreto del gobierno español, responsable de la operación contra ETA más importante de la historia, se ve envuelto en un caso de extorsión en plena crisis de los GAL y tiene que huir del país. Cuando regresa años después está arruinado. En tales circunstancias, recibe la visita de Luis Roldán (Carlos Santos), ex Director General de la Guardia Civil, y de su mujer Nieves Fernández Puerto (Marta Etura), que le ofrecen un millón de dólares si les ayuda a salvar 1.500 millones de pesetas sustraídos al erario público. Paesa ve entonces la oportunidad de vengarse del gobierno español, llevando a cabo una magistral operación con la colaboración de su inseparable amigo Jesús Camoes (José Coronado).
El hombre de las mil caras, es una película que te atrapa desde el minuto uno con la música de Julio de la Rosa, una banda sonora hipnotizante claramente inspirada en los mejores momentos que creó el tristemente desaparecido Alan Vega, en los míticos Suicide del nueva York del CBGBs. Como una tela de araña la música de Julio te atrapa y te impide distraerte en una cinta con un ritmo frenético, perfecto, en la que todo encaja como un reloj suizo. En los tiempos de crisis y corrupción que vivimos, a la mayoría se nos había olvidado que hace 20 años el escándalo Roldán nos tenía pegados al telediario, y en aquel entonces las cosas eran tan cutres como ahora, y la corrupción era tan bestial como ahora.
De manera muy creíble, Alberto Fernández logra plasmar aquel momento de nuestra historia reciente de una manera hiperrealista, logrando un thriller profundo y visceral con pequeñas dosis de humor que hace parecer unos hechos reales en pura ficción. El trío protagonista se sale del mapa, José Coronado, Carlos Santos como un muy convincente Roldán, y un Eduard Fernández que hace historia con una interpretación tan magistral de Francisco Paesa que acojona. Marta Etura también brilla con luz propia y por mi parte sólo resaltar la desastrosa labor de peluquería y maquillaje en la caracterización de Carlos Santos, con unas prótesis capilares que dan risa y que te llegan a enfurecer. Por lo demás un peliculón muy disfrutable que confirma a Alberto Rodríguez como uno de los grandes de nuestro cine y que da la impresión de que todavía no ha llegado a hacer su obra maestra.
“El Hombre de las Mil Caras” se estrena en cines hoy, 23 de septiembre
